La Reina

Capitulo (5-4)

—No creas que te salvaras de esto, Luciano, si caemos todos, tú estás involucrado también. —Massimo amenazaba a su hermano menor, quien solo puede rodar los ojos. —Es cierto que algún día tendremos que “sentar cabeza” pero, por el momento creo que hablo por todos nosotros, que ese momento está muy lejos. —Varios le dan la razón a Massimo, casarse no estaba en sus planes, por ahora.

—Papá, mis hermanos solo hablan de la casa Kahler y que sus chicas son inigualables, ¿enserio crees que ellos quieran quedarse con una sola mujer para toda la vida? Si me preguntas, eso no es nada inteligente. —Rossy llama la atención de todos en la mesa, incluso de Axel.

—¡Rossy! —Alessandro le llama la atención a su hermana, quien sonríe y le saca la lengua. —No le creas, padre, solo quiere hacernos quedar mal. —Vamos a la casa Kahler por asuntos que deben ver con el trabajo.—Alessandro trata de ocultar la obvia verdad, no es como que Frederick sea un tonto o algo por el estilo, sus hijos hace muchos años habían probado lo que era disfrutar del sexo con una mujer experimentada, algunas veces el mismo sexo era algo adictivo, desde que dejaron Italia hace tantos años y con esto fueron por curiosidad hacia el burdel ubicado en la casa Kahler, pues, era obvio que la sed de estos jóvenes no sería algo fácil de llenar.

—Por favor, Alessandro, no me quieras tratar de idiota. —El hijo mayor de Frederick solo mira hacia Rossy, quien, a su vez, se muestra contenta por desviar la atención hacia ellos y no con ella. Por otro lado, Axel que no puede evitar escuchar a conversación, se encuentra confundido, ¿Qué había en su casa que él no sabía? Su padre era un hombre altamente estricto, regido por las mismas reglas con las que lo educo su padre, así que, hasta que Axel no fuera lo suficientemente mayor, tendría que esperar para ver todo aquello que, hasta ahora, se le ha ocultado.

—¿No sabes que hay en la casa Kahler, Axel? —Giovanni, se dirige al joven alemán, quien, al verse transparente con sus pensamientos, no hace más que asentir con la cabeza, mientras esto sucede, a todos se les ha servido el postre, un delicioso pastel de chocolate amargo, cubierta también de chocolate y una decoración de fresas con crema, encima. —¿Es eso posible? Para tu edad, supuse que ya lo sabrías. —Parece que Giovanni no recuerda que, se trata de un chico de 13 años.

—Padre dice que la zona norte de la casa estará prohibida para mi hasta que tenga 18 años. —Es lo único que responde Axel, Rossy a su lado, debe admitir que también siente curiosidad por esto, sus hermanos solo hablan de lo que sucede en la casa Kahler, y aunque nada de eso le incumbe, a veces no puede evitar escuchar de más.

Sea lo que sea, ella se está haciendo una idea de lo que puede ser y todo lo que sucede en la ahora zona norte del amplio territorio dentro de la casa Kahler: sexo.

—Creo que nos estamos desviando del tema, padre, hablabas sobre el baile de primavera. —Para consecuencia de muchos, Francesco ha traído de vuelta uno de los temas que Frederick mencionada, porque si, en una familia con muchas personas y tanto ruido, era imposible que hubiera un solo tema de conversación. Loco, ¿No?

—Es cierto, gracias por recordármelo, Francesco. —El mencionado solo puede hacer un rápido movimiento con la cabeza—Como decía, muy pronto será la fiesta de primavera de la casa Felicce, y con esto, nuestra querida Rossy estará presente como una pequeña dama, ¿No es emocionante? —Frederick vuelve a dar este anuncio, años atrás, mucho antes de que la misma Rossy naciera, la fiesta de primavera es la muestra de que la alianza entre las cuatro casas más poderosas en la mafia estaba aliada, siendo esto una buena oportunidad para demostrar que tanto poder había, pero, esta vez la cosa seria diferente, Rossy estaría siendo presentada como, la última hija y única niña del basto linaje dentro de la familia Felicce.

—Lo que también será una muy buena oportunidad para que conozcan a muchachas encantadoras, no olviden que, es necesario que algún día, ustedes continúen con la familia. —Les recuerda Viena. —El tema de este año, serán las damas, todas las presentes tendrán que destacar su belleza, incluyendo los elegantes accesorios en sus vestidos, cabello y apariencia en su totalidad, y Rossy, muchos estarán ansiando conocerte. —La mencionada siente como una especie de nervio sube por su pecho, había estado presente en aquellos bailes, claro que, su participación no era algo que se debía destacar, en ese momento era un adorable infante de menos de 6 años, pero, por lo que sabe, todas sus clases de modales, etiqueta y protocolo deben usarse en base a esto, y ella, estará lista para demostrar que, no le asustaba la vida adulta.

—Si madre, daré mi mejor esfuerzo. —Responde Rossy, dejando satisfecha a sus padres, quienes, como cada año, serían los principales centros de atención, con el único fin de no poner tanto peso en sus hijos.

Nadie dice otra cosa en lugar de eso, todos se concentran en terminar el delicioso postre que se les había puesto delante del planto, así que, cada quien se concentraba en pensar en lo suyo, en especial Rossy, tenía muchas cosas en que pensar, esperaba que todo saliera bien, de lo contrario, no tendría la oportunidad de arreglarlo.

Cuando llega la noche, es momento de dormir para los más jóvenes, quienes se van hacia sus habitaciones, Axel se iría mañana en la mañana, a su vida solitaria en la casa Kahler, tenía como consuelo a Rossy, quien también le visitaba, ellos tenían una única conexión, algo que ni siquiera los gemelos Novicokv o el mismo joven Abbey comprendería. Rossy es como el fuego, cálido, abrazador y atractivo como el sol, Axel era más calmado, solitario y frio, siempre manteniendo un perfil bajo, no desando llamar la atención, aunque, su presencia era notada en seguida, donde sea que fuera, igual que la luna. Ambos jóvenes tenían una vida por delante, llena de desafíos establecidos por sus padres, pareciera que la vida del otro era más fácil, pero, no era así, y ellos lo comprendían a la perfección.