
Se dice que las amistades entre polos opuestos suelen ser las más gratificantes, y así era la de Anthony y Chase. Anthony era la viva imagen de la rectitud y el liderazgo. Siendo hijo único de una de las familias más prestigiosas y futuro Alfa de la manada más grande de la región, él lidió desde pequeño y con muy buena gana con su riguroso entrenamiento y las expectativas de sus padre. Era un chico intachable, prodigioso, y estaba seguro que su futura pareja también lo sería. No se imagina gobernar al lado de alguien que no lo fuera. Por otro lado, Chase era un desastre. Uno extremadamente guapo, pero un desastre. Aún siendo el primogénito de una linaje de Betas, sus capacidades no excedian las de las habilidades físicas, que se le daban estupendas. Su fama de mujeriego no era ningún misterio, tampoco su maravilloso plan de vida de casarse con una chica absurdamente guapa y asquerosamente rica. Apoyaría a su mejor amigo Anthony como su futuro Beta, pero él se apoyaría en los brazos de una preciosa mujer hogareña rodeada de su docena de cachorros después del trabajo duro. Anthony sabía de su sueño, y sabía muy bien de su propio sueño: una vida tranquila, próspera y en compañía de su pareja perfecta. Por eso cuando su lobo reconoció por fin a su pareja...quiso matarse. *Basado en el relato corto "Rechazado" de mi propia autoria, pero en versión novela (y hombres lobos).
