Alexander Pude notar su rostro como se transforma por uno completamente molesto, como si le hubiera encendido fuego en una caldera. Sé que con esto se vendrá encima un problema bastante grande para mí empresa, y para mi familia porque querían que me casara con ella, pero yo no, en especial ahora que Julia apareció en mi vida, ella es la que debe ser mi esposa. Y luego… acabarla, acabar con ella como se lo merece. —No puedes estar hablando en serio, esa mujer es una gata ¿acaso la has visto? puede que ahora se vea presentable, es obvio que es una mujer insípida y desagradable —Zoe habló con rabia. —Sí, porque la he visto puedo decir que ella es la mujer que quiero para mi vida. No tengo por qué explicarte nada, lo de nosotros solo ha sido sexo nada más. —¿Solo sexo, eso es lo q

