INTRO
Titulo original: Mi pequeño Alpha
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Ⓒ 2021 by Sandy Co.
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Día inesperado
Yo amaba mi trabajo y lo buena que era en el sector financiero, si alguien me preguntara si me sentía sola, lo negaría, mi mundo era perfecto hasta que ocurrió algo que no buscaba más…
Un joven que había robado mi atención y hasta cierto punto me causo curiosidad, resulto ser aquel ser que ya no buscaba desde hace años que renuncie a la idea de encontrar a mi pareja.
Y fue justamente el trabajo lo que me llevo a conocerlo, y no podía ser el peor momento, pues justamente me encontraba huyendo de la posibilidad de enamorarme y tener una relación, cosa que no era normal en mi vida.
Recordé todas las historias románticas que te cuentan sobre lo sobrecogedor que es esa experiencia, para mí fue parecido a que me tiraran un balde de agua fría, sentí que la Diosa Luna se burlaba a mis expensas.
Parecía que nada era ordinario en mi vida, no hubo reconocimiento mutuo por fortuna, ni las mariposas revoloteando en el estómago, o el olor de tu pareja que te vuelve loco, incapacitándote y quitándote el libre albedrío.
Sin la opción de escabullirme porque para mí pesar, aún tenía trabajo que realizar y ante lo formidable de que mi supuesta pareja no me reconociera, me la jugué y seguí hasta culminar con mi trabajo. Excusas, por supuesto que me pude haber inventado una, realmente no sé si era que no me gusta dejar el trabajo botado o yo haciéndome tonta porque muy en el fondo si me afecto la conexión.
Pero el gusto me duro muy poco y luego de un incidente que casi me cuesta la vida, tuve que hacer lo que correspondía, ante mi resistencia a doblegarme y entregarme a la conexión de los lobos.
Estaba confundida porque no era posible que albergará la idea de unir mi vida a la de este joven, nada tenía sentido, mis sentimientos eran un lío, mi cerebro, la parte lógica, me decía que esto ya no era algo que yo deseaba, no quería perder mi libertad, yo no estaba hecha para vivir en una manada, mucho menos volverme el ejemplo a seguir que ellos requerían.
Así, antes de partir de este lugar de forma definitiva, una bruja poderosa vino a mí, para darme un sermón y hacerme sentir más miserable de lo que ya me sentía.
— Entiendo que las circunstancias no son las ideales y quizá pienses que no eres compatible con él. Pero debes de saber que llevo muchos años viendo cómo trabaja su famosa Diosa Luna, y créeme cuando te digo que, no hace uniones al azar.
— Puede ser, pero yo soy lo peor que le puede pasar a ese pobre, yo creo que solo estoy de paso en su vida, no es posible que la Diosa Luna lo castigue con una pareja como yo.
— Bien, al parecer tú ya estás decidida y no puedo hacerte cambiar de parecer, debes saber que el romper el vínculo que los une, tiene consecuencias desastrosas, algunos incluso mueren, ¿aun así quieres proseguir?
— ¡Sí!
Me dijo exactamente lo que debía decir para romper con la conexión y poder irme para ser libre.
Mi fuerza de voluntad y convicción flaquearon al verlo de frente a mí, me perdí por unos momentos en sus ojos, esos que gritaban bondad e inocencia.
Regrese a la realidad al escuchar la voz de la bruja que nos decía que hacer y así continué...
— Yo Sylvia Allen, integrante de la manada de Acadia, te libero a ti ***** *****, de la conexión que nos une para que seas libre de buscar a tu verdadero amor y pareja —al terminar de enunciar aquello, mi cerebro y corazón se congelaron.
El escuchar que aceptaba mi liberación dio comienzo a un dolor indescriptible, fue necesario pasar la noche en ese sitio, pero a la mañana siguiente no hubo poder alguno que me detuviera de largarme de ahí.
Una decisión que por las circunstancias que pasaba era fácil y difícil, luego esta se volvió una historia que mis congéneres van repitiendo. Así que si quieren saber que me llevo a liberarme de mi pareja los invito a seguir.
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Mi trabajo es mi vida
Había sido un día productivo, cerramos un acuerdo de inversión por demás lucrativo con una compañía dedicada al desarrollo de aplicaciones bastante innovadoras y con potencial de crecimiento.
Así que después de la cena y las formalidades con la contra parte, propuse a mi equipo una ida al bar para relajarnos y como siempre a seguir haciendo contactos, nunca dejaba de sorprenderme como el trabajo había permeado mi vida, ya no distinguía si mis decisiones eran sobre mi vida o el trabajo, mi mente y sus engranes nunca dejaban de girar, al menos es lo que todos me decían.
Nos dirigimos a un lounge bar en un hotel de Nueva York, todos me miraron como si los hubiera traído aquí con engaños, cuando entramos sabían que seguía en modo “trabajo”, suspiraron en unísono, les dedique una sonrisa inocente, sobra decir que este lugar era bastante exclusivo, siempre se podía encontrar a los hombres de negocios, millonarios y toda persona que me interesaba tener en mi lista de contactos. Para suavizar la situación y de por sí decepción en el semblante del equipo, intente animarlos diciéndoles que la cuenta la pagaría yo, algunos sonrieron, otros aplaudían y así mejoro el ambiente.
La verdad no era cercana con ninguna de las personas en el equipo, pero ellos sí que me conocían, el equipo se había formado para cubrir la necesidad de cerrar este negocio, yo no tomaba proyectos involucrados en tecnología, no era mi campo, pero mi superior me encomendó la misión de conseguir el proyecto, conociéndolo sabía que era el inició, lo agradecía, él me entendía era como mi mentor en esto.
Era relativamente temprano por lo que no había muchas personas, hoy el color era azul intenso, sí, las luces cambiaban frecuentemente así como el mobiliario, nos situamos en uno de esos sofás en medio círculo y algunos taburetes, de inmediato las bebidas comenzaron a fluir, ni cuenta me di de lo que pedían, yo estaba más enfocada en ver qué personajes nos engalanaba con su presencia, pronto le di una palmadita a Will y le pase una tarjeta de presentación, acerco su oído intentando escuchar, le dije que la entregará al pedir la cuenta, que disfrutarán, me levanté para dirigirme al baño para recorrer el lugar.