Capítulo 1
POV SERENA
Hoy es mi última semana en esta manada, ya conseguí que mis padres aceptarán que iría a estudiar a la ciudad capital mundana, por fin podría estudiar programación. Todo era un secreto ya que por alguna razón mi mente decía que así tendría que ser.
Soy una loba común, aunque mi padre es el mejor guerrero y comandante en jefe de las tropas del alfa. Mi madre era hija del Gamma de la manada vecina y mi padre hijo de una larga línea de guerreros.
Mi manada Luna Plateada, llamada así por ser la primera creada por la diosa nos hace más fuertes que los demás, tenemos pedigrí. El alfa Dean que es el rey de todos los alfa es un tipo frío, espeluznante hasta la pared de en frente, es el único que fue creado por la diosa para ser el rey, es el favorito de Selene, es el más fuerte, el más rápido y el más hermoso, sí, el más hermoso de los hombre lobos que he visto. No es el más viejo pero si en más fuerte. Todos dicen que aunque es el favorito la diosa no le ha dado a su compañera todavía y que si no la tiene antes de su primer milenio puede ser derrotado por los Primeros, los puros, un grupo de 9 tipos, aunque ninguno quiere el título, la diosa sabe por qué.
Las vibración del teléfono me saca de mis pensamientos.
- Todos estamos listos Ser, tenemos que salir en el cambio de turnos.
El mensaje de Anna me puso en alerta.
Salgo de mi habitación y me preparo para hacer la única tarea que tengo que hacer desde los 10 años, ir a preparar la habitación del alfa antes de que llegue a la casa, cambio las fundas de las almohadas, la sabana y cierro las cortinas de la ventana, siempre 10 minutos antes de que él llegue a casa.
La brillante idea fue de mi madre, para que ayude con algo en la casa según decía, y era por que yo era la loba que menos importancia tenía, así que mi olor no lo molestaba. Gracioso no?
- Mamá, ya terminé mi gran tarea - le dije desde las escaleras - Me voy a dar unas vueltas con Anna y las chicas.
- Serena, te quiero aquí antes de las 01:00 am - dijo mientras me apuntaba con su dedo y su cara de asesina.
- Siii, solo doy una vuelta nada más - le respondo con una sonrisa
- Sabes que yo soy tu madre no? - me pregunta mirandome con desconfianza
- Obviamente si, cuando no podrías recordármelo - le digo con los ojos en blanco.
- Te conozco mejor que tu misma, así que te digo solo una cosa, aquí a las 01:00 o estas castigada hasta que encuentres a tu compañero, me dejo entender??? - me pregunta
- Sí señora - le digo y le mando un beso al aire
Y salgo corriendo antes que me siga dando lata, tengo que ser rápida, no puedo encontrar al alfa entrando y yo saliendo si no encontrara algún motivo para que me quede en casa.
Salgo de la casa y me dirijo a la frontera sur para ir a la manada vecina.
Mis amigos están ahí, listos con dos vehículos todo terreno, somos 13 lobos en busca de problemas y vamos a la discoteca de moda.
- Pensé que no llegabas - dice Anna.
- Amor te tengo una sorpresa - dice Sarah dándome una bolsa de regalo.
- Tienes que usarlo hoy - dicen Anna y Sarah al mismo tiempo.
Veo el contenido y es un mini vestido rojo sangre, es muy llamativo para mi gusto... pienso en la expresión de mis padres y sonrío...
- Mmm por que no... - digo
- Feliz cumpleaños!!! - me gritan todos casi al mismo tiempo.
- Gracias a todos, por estar en mi día especial - les digo
- Eres la primera de nosotros en hacerse mayor - dice Diego, es un lobo aspirante a centinela
- Además tu vendrás cuando sea nuestro turno - dice Anna
- Que??? - pregunto sorprendida - no sabes como me costo poder salir
- No era una pregunta querida Ser - dice Sarah - es una orden
-Vamos a beber entonces - les grito
Por ser hija del comandante en jefe, todas las experiencias de un adolescente las había saltado, como vivía en la misma casa que el alfa, la casa tenía otro tipo de reglas. Mis amigas ya habían dado sus primeros besos y habían salido con chicos, y yo ni lo uno ni lo otro, algunas hasta ya habían tenido relaciones sentimentales.
Pero yo... con los estudios y las exigencias de mi madre, no podía hacer mucho.
El camino a la otra manada ya estaba arreglado, la madre de Diego había nacido ahí y había pedido los permisos para que los centinelas nos dejen pasar.
La noche era joven, la cuidad era preciosa y el bar estaba a las afueras de la pequeña ciudad. Yo tenía una misión este día, hoy sería el día de mi primer beso. Es hoy si o si, desde varios metros ya se podía escuchar la música, desde la estrada era concurrida por lobos jóvenes.
El gorila de la entradas nos dejó pasar y la noche empezó. Estaba oscuro, los juegos de luces y el humo a cigarrillo estaba en todos lados, nos agarramos una mesa y empezamos las rondas de chupitos de tequila, cabe resaltar que yo nunca había tomado alcohol.
Anna y Sarah decidieron que teníamos que bailar en la pista, Mateo y Diego y los demás estaban entrando en ligues de una noche.
Somo lobos los beneficios de serlo era que éramos muy pasionales y demasiado carnales... esto se marcaba más e los machos jovenes y después de los 18 en las hembras.
Vi un lobo bastante apuesto que no me apartaba la mirada de encima, y me sentí sensual y deseada. Bailar con mis amiga cantando a todo pulmón era algo fuera de serie, todo estaba saliendo bien.
mientras bailábamos bebimos como marineras.
El momento en el que subimos a la barra a bailar con varias chicas que nunca había visto junto con mis amigas era muy excitante.