Fruto Del Pasado

DAME UNA RAZÓN

¿Por qué me ha estado evitando?

Después de lo sucedido en la oficina Sofía me ha estado evitando a toda costa .

Por alguna extraña razón no me puedo mantener lejos de ella y siento la necesidad de buscarle para hablar pero me llevaría algún mal trato de su parte conociendo su carácter.

—Edrick —Lucas musita a mi lado sacándome de mis pensamientos —. Hablé con la secretaria de la Lombardo y quedó en venir dentro de quince minutos para firmar.

Frente a nosotros se encontrabas los nuevos clientes de Londres firmando los contratos y los documentos de confidencialidad, faltaba solo la firma de Sofía para que todo estuviera listo para empezar lo más pronto.

—Entonces teniendo todo claro creo que no hay más nada que hablar —Arturo, el cliente principal habla —. Faltaría solo la firma de su vicepresidenta.

—Esta por llegar, no se preocupen.

Lucas les responde con una sonrisa.

Recibo un mensaje de Luna diciéndome que Amanda se encuentra fuera de mi oficina histérica pidiendo hablar conmigo.

—Me disculpan un momento ya regreso.

Me levanto, salgo rápidamente de la sala de juntas caminando por el pasillo a la oficina.

Al acercarme escucho gritos y al llegar veo a Sofia frente Amanda.

—¡Maldita zorra! —Amanda grita mientras eleva su mano y Sofía la detiene.

—Amanda ¿Qué coño haces? —Me acerco sujetandole por la cintura y alejandola de Sofía.

—¿Quién coño es esta maldita perra? —Grita histérica —. Quiero que la largues ahorita mismo.

—Amanda, calmate —Forsejea y la sujeto más fuerte —. No puedes venir hacer un escándalo a la oficina.

Observo a Sofía quien luce tranquila pero sus ojos destellan rabia, la miró nuevamente y es cuando me doy cuenta que viste ropa deportiva.

—Edrick soy tu novia, esa mujer me golpeó te exijo que la eches ahora mismo.

Sofía la mira con asombro y se queda en una especie de shock.

Lucas aparece en la sala y se para a su lado observando todo preocupado.

—Señor Benson su novia está falta de modales y no pienso permitir que ni ella ni nadie venga a faltarle el respeto a Luna a cualquiera de los empleados de esta empresa o la próxima vez hago que la corran.

—¿Quién diablos te crees? —Amanda empieza a reírse de ella —. Tú no eres nadie para correrme.

—Me basta con ser la vicepresidenta de la empresa y contar con el cincuenta por ciento de acciones como para poder correrla —Amanda se queda en silencio —. Es mejor que sepa controlar a su fiera o la próxima vez no respondo.

Camina al escritorio de su secretaria y firma los documentos.

—¿Algún otro pendiente?

—La comida con los socios está noche señorita eso sería todo.

—Bien, puedes retirarte cuando gustes y nos vemos mañana Valentina.

—Gracias señorita Lombardo.

Pasa nuevamente a nuestro lado caminado al elevador.

Lucas la mira con una leve sonrisa asintiendo me mira asiente y ella le responde con el mismo gesto.

Se para frente al elevador con la mirada al suelo, se empiezan a escuchar voces levanta la mirada y son los clientes.

—Edrick me puedes expli...

—Ahora no Amanda —Le susurro mientras la sostengo por los brazos —. Cierra tu boca por una vez en tu vida que esos son clientes importantes.

—Sofía Lombardo, es un placer verte nuevamente después de mucho tiempo.

Arturo le habla con una gran sonrisa y Lucas me mira asombrado.

—Lo mismo digo Arturo —Arturo se acerca y deja un beso su mejilla — ¿Qué haces aquí?

—Firmando un contrato de negocios pero estamos esperando a la vicepresidenta para que diera su firma y todo estuviera listo.

—Ya no tienen nada que esperar, ya le di mi firma a los documentos.

Le sonríe, mira a nuestra dirección y su gesto se vuelve serio.

Lucas se acerca al escritorio de su secretaria tomando los documentos y se acerca a ellos.

—¿Eres la vicepresidenta de esta empresa? —Ella le asiente con una sonrisa —. Entonces me quedo tranquilo, se que este trabajo está en mejores manos.

—Gracias Arturo, ahora si me disculpas llevo algo de prisa por regresar a casa.

—¿Cómo está Howard y tu madre?

—Mi padre está mucho mejor y mamá sigue a su lado a, sabes que es algo terco en ocasiones.

—Howard nunca cambiará —Ríe —. Espero reunirme con ustedes antes de irme.

—Cuenta con ello, le diré a papá que te llame para que puedan cenar con nosotros.

—Aquí están los contratos listos —Lucas se los extiende —. Teniendo la firma de la señorita Lombardo pueden revisar que todo está bien.

—No hace falta, Sofía tiene toda mi confianza —Arturo hace un gesto con la manos —. Ha llevado muchos negocios en Londres y todos con buenos resultados así que estoy tranquilo.

—Señor Benson, señor Cáceres gracias por todo.

Arturinse despide elevando su mano en modo de despido.

El ascensor abre sus puertas, Arturo le extiende su mano, ella la toma y el leayuda a subir al ascensor .

Antes de el ascensor cerrar sus puertas la miró por última vez.

—Me puedes explicar ¿De dónde diablos salió esa estúpida?.

La sujeto por el brazo y la llevo arrastras hasta mi oficina, cierro la puerto y suelto de ella.

—¡Auch! —Se queja mientras frota su brazo —. Esas no son maneras de tratarme frente a tus empleaduchos.

—¡No Amanda!, esas no son maneras de venir a tratar a mis empleados y mucho menos de faltarle el respeto a la socia de la empresa.

—Yo no le falte el respeto a nadie, esa estúpida me abofeteo sin razón.

—Sofía es una mujer seria y si llego a ese límite fue por algo.

—Te estoy diciendo que no ¿Puedes creerme?

Me acerco a mi escritorio, levanto el teléfono marco la línea y rápidamente contesta.

-Luna, hazme el favor de venir la señorita Valentía y usted a mi oficina ahora mismo.

-Si señor

Cuelgo el teléfono y en menos de dos minutos ambas tocan, les abro la puerta y les hago pasar.

—¿Me pueden decir porque la señorita Sofía abofeteo Amanda?

Me cruzó de brazos frente a ellas, Luna baja la mirada nerviosa y Valentina mira Amanda.

—La señorita quería hablar con usted y Luna le dijo que se encontraba en una reunión muy importante que no le podía atender, se alteró empezó a gritar e insultar a Luna.

—Estúpida —Musita Amanda.

—Amanda, te callas —Exigo molesto —. Sigue por favor.

—En ese momento llegó la señorita Lombardo le pidió que se calmara y le dijo prostituta barata de gimnasio y por eso la señorita la abofeteo.

—Gracias Valentina, ya se pueden retirar.

Ambas salen de mi oficina, cierro la puerta y me volteo encontrando a Amanda con lágrimas en los ojos.

—A mi tus lágrimas falsas no me convencen Amanda, te pasate al insultar a Sofía.

—¿No crees que defiendes demasiado a esa tipa? Y sobre eso la tuteas, dime ¿Tienes algo con esa tipa?

—Ese no es asunto tuyo, no voy a permitir que vengas a insultar a mis empleados o a Sofía nuevamente.

—¡Basta Edrick! Pareciera que estas embrujado con esa mujer —Grita enojada —. Dime ¿La defiendes por qué se parece a Sara? Porque la vi y se parece mucho a ella.

—Deja de decir idioteces, la defiendo porque es la socia de la empresa y sin ella esta empresa podria venirse abajo junto a las demás empresas de papá.

—No necesitas de ella, te ofrecí la ayuda de mi familia para que salieran a flote y no quisistes, soy tu novia Edrick.

—No voy aceptar tu ayuda, la última ayuda que me ofreciste me costó hacerte mi novia y hacerlo público esa farsa ya acabó, no pienso caer en tus chantajes por el dinero de tú familia.

—No es ninguna farsa porque tenemos sexo en ocasiones ¿O eso también es farsa?

—Se llama sexo ocasional sin sentimientos de por medio, eso no te hace importante Amanda.

Me abofetea y veo la ira en sus ojos.

—Eres un maldito Edrick, pero juro que esta me las a pagar y vas a estar a mi lado quieras o no, te lo aseguro.

Sale de mi oficina dando un portazo, respiro tratando de calmarme y tomó asiento en mi silla.

La puerta de la oficina se abre entrando Lucas.

—Amanda iba que echaba fuego —Toma asiento frente a mi escritorio —. Las chicas me contaron lo que sucedió con ella y con la Lombardo.

—¿Qué opinas?

—Qué la Lombardo es de armas a tomar , ya veo que si es de carácter fuerte como se muestra —Sonríe —. Tampoco puedo negar que se veía muy bien vestida deportiva.

—Lucas...

—Sólo es un comentario amigo, ¿Escuchastes a Arturo? Confía ciegamente en ella.

—Al parecer es amigo de su padre. —Musito y asiente.

—Pero también habló de su trabajo y no e sentirá por lo que te dije que leí.

—Es una mujer muy inteligente Lucas, eso nadie se lo quita al contrario se lo reconocen.

—Te veo distraído desde hace días ¿Qué sucede?

—No pasa nada,estoy bien.

—¿Tiene que ver con del desfalco a las otras empresas?

—No, eso se está investigando gracias a Sofía.

—¿Por qué gracias a ella?

—Contacto a un grupo de personas que investigan este tipos de cosas y ya están tras las pistas de esos malditos.

—Entonces no te detesta como tú crees.

—No lo sé amigo, esa mujer es una interrogante muy grande.

(...)

Llego a mi PentHouse , me doy una ducha empiezo alistarme para la cena de hoy con los clientes.

Mi teléfono suena y es un mensaje de papá pidiendo que vaya a casa que necesita hablar con urgencia conmigo.

Observo mi reloj y todavía es temprano. Salgo de mi PentHouse, me dirijo al sótano y me subo a mi auto saliendo en dirección a casa de mis padres.

Los seguridad me dejan entrar, dejo el auto estacionado, y subo las escaleras entrando a la casa.

—Buenas noches, joven Edrick. —El mayor domo me recibe —. Su padre lo espera en el despacho.

—Gracias.

Camino a el despacho, al entrar veo a mi padre en su escritorio firmando unos papeles.

—Hijo, llegaste —Se levanta y se acerca abrazarme —. Te llamé con urgencia porque los accionistas están presionando con lo del desfalco, si lo hacen publico puede traernos problemas.

—No te preocupes papá, la hija del señor Lombardo me contacto con una empresa especializada y ya están cerca de dar con ellos.

—Es un alivio hijo —Sonríe —. Este tema me tiene loco, pensé que tendría que recurrir a la ayuda de los Chang.

—No papá, haré lo que sea menos recurrir a la ayuda de ellos nuevamente.

—Se que fue un gran sacrificio para ti hijo.

—Ni te lo imaginas papá, imaginate que hoy hizo un escándalo en la oficina, trato mal a mi secretaria le dijo prostituta a la Lombardo y esta la abofeteo.

—No puedo creer lo que me dices hijo —Me mira asombrado —. Esa muchacha sigue siendo una inmadura y que vergüenza con la señorita Lombardo.

—Ella es una mujer con el carácter fuerte papá, inteligente y de armas a tomar —Me quedo pensativo recordando lo de Arturo —. Fijate que el cliente de hoy del cuál te hables Arturo Tiffin ¿Recuerdas?

—Si, un cliente muy potencial.

—Pues se conocen y apenas supo que ella es la vicepresidenta de la empresa dijo que pone toda su confianza en ella por el gran trabajo que ha hecho.

—Estuve investigando y si tiene una buena reputación en Londres por su gran trabajo.

La puerta del despacho se abre, entra mamá vuelta una furia.

—Me puedes explicar lo sucedido con Amanda —Mi padre sujeta el puente de su nariz —. Me llamo hecha un mar de lágrimas.

—Mamá, tengo cosas más importantes que hacer como para hablar de Amanda —Me levanto y miro a mi padre —. Te veo después papá, adiós.

Salgo del despacho pese a sus gritos, salgo de la casa y subo a mi auto saliendo a toda marcha para llegar a la cena.

Al llegar me encuentro a Joegre y parte de sus socios, los saludos y tomamos asiento esperando que llegue Sofía.

Tomó un sorbo de mi trago, al levantar la vista la veo entrar en despampanante vestido robandose la mirada de todos en el salón.

Se acerca y le sonríe a Jeorge.

—Lamento la tardanza señores.

Jorge se levanta sonriendole.

—Una mujer nunca llega tarde, nosotros llegamos temprano.

Toma su mano deja un beso en ella, sus dos acompañantes hacen lo mismo.

Me levanto, le entiendo mi mano y la ayudo a tomar asiento a mi lado.

La veo suspirar y mantener su mird en frente.

Luego de la cena y al cabo de un tiempo Joegre se levanta y la invita a bailar.

Mientras bailan, ríe haciendo que un destello de celos empiece a crecer en mi.

La canción termina y ellos terminan de bailar. Me disculpo y me levanto caminando a ellos.

—¿Me concederias a tu bella acompañante para bailar esta pieza?

—Por su puesto.

Jeorge deja un beso en su mano y me la entrega.

Jeorge se va regresando a la mesa, observa a la gente a nuestro alrededor y sonríe forzadamente.

—Quería pedirte disculpas por lo de esta mañana —Me mira fijamente —. No puedo justificar el comportamiento de...

—Puede ahorrarse las disculpas señor Benson —Susurro interrumpiendome —. No me interesa recibir una disculpa de usted o de su novia, solo me interesa que respete a las demás personas.

—Amanda no es mi novia. —Musito con una sonrisa al ver su reacción.

—Su vida personal no me interesa señor Benson. —Trata de sonar indiferente.

—La de usted a mi si ¿Qué me cuenta de ella?

Trato de mirarla fijamente pero esquiva todo intento.

—Mi vida privada no es de su incumbencia.

La música termina y rápidamente se aleja de mí regresando a la mesa.

Los socios se despiden, toma su bolso y camina rápidamente por el pasillo para la salida.

La sujeto del brazo haciendo que gire y acorralandola contra la pared.

—¿Por qué siempre estás a la defensiva conmigo? ¿Por qué me huyes? —Musita a centímetros de su boca —. Dame una razón o te me volveré loco.

—Edrick por favor aléjate —Susurra —. No me lo hagas más difícil, aléjate.

—Dame una razón.

Se queda en silencio, observa detenidamente mi cara hasta que su mirada se detiene en mis labios.

Veo como muerde la comisura de sus labios y sin poder aguantarlo más pego mis labios con los suyos.

Beso delicadamente sus labios, luego de unos segundos responde el beso y mueve sus labios al compás de los míos.

Enreda sus brazos sobre mi cuello, mientras enredo mis manos sobre su cintura, bajo la mano instintivamente y es ahí cuando se separa de mi y me abofetea.

—No vuelve a besarme en su vida —Musita con la respiración agitada.

—A qué le tienes miedo —La tomó de la cintura y la vuelvo pegar a la pared —. En un principio pensé que estaba loco pero ya veo que no.

—¿A que se refiere? —Titubea.

—Tus labios, hace mucho no sentía esa sensación y quizás me esté volviendo loco pero sus labios son tan iguales a los de ella.

—Esta usted demente —Se suelta de mi agarre —. Vuelve a ponerme una mano encima y le juro que se va arrepentir.

Sale a toda prisa del salón, golpeo la pared y trato de pensar.

No pueden haber dos mujeres tan parecidas en este mundo que me despierten los mismos sentimientos y mucho menos que sus besos me sepan iguales....