SR. DIXON

DARYL DEMETRIUS DIXON LENNOX  Estoy sentado en la sala de juntas mientras un grupo inversionistas presentan sus propuestas, la mayoría de los empresarios están interesados en trabajar conmigo, no por nada soy unos de los hombres más influyentes de la industria. He trabajado mucho para llegar a donde estoy, le prometí a mi padre antes de morir que haría crecer nuestra empresa y he cumplido su última voluntad al pie de la letra. La junta termina y entro a mi oficina, Doris mi secretaria, entra y me entrega algunos reportes que tengo que revisar, miro a Sonia parada en la puerta mirándome provocativamente —Hola –dice ella con sugestión —Gracias Doris, puede retirarse –digo, mi secretaria asiente y se marcha, una vez solos, Sonia se acerca seductoramente y me mira con lujuria —Estoy trabajando –digo con sequedad, detesto que me interrumpan cuando trabajo —Ya lo sé, pero necesitaba verte –dice con sugestión, me levanto y ella me rodea por el cuello —Daryl te necesito –dice cerca de mi cuello con la voz cargada de pasión, la miro fijamente, Sonia es una mujer muy hermosa y sofisticada, hemos sido socios y amantes desde hace mucho, pero jamás he pensado en tener nada serio con ella, yo jamás me enamorare de nadie, el amor es  para idiotas, tengo muy claras mis prioridades, mi empresa y el poder, eso es lo único que me importa. —Voy más tarde a tu departamento – digo y a ella le brillan los ojos —Está bien, te esperare con ansias – dice y me da un acalorado beso, se aleja contoneándose provocativamente y sale de mi vista, un buen polvo, eso es lo que Sonia siempre ha sido. La tarde pasa entre reportes y algunas llamadas, Doris entra y sonríe tímidamente —Señor lo busca el Sr. Patricio – dice Doris y mi mejor amigo aparece sonriente —Gracias – digo y Doris nos deja solos — ¿Cómo estás? – pregunta Patricio mientras nos damos un fuerte abrazo —Bien, todo está controlado – digo y se sienta frente a mí —Se perfecto que todo está controlado, eres un maniático del control, me refiero a ti, como estas – dice mi amigo —Bien Patricio, como quieres que este – digo y el me mira irritado —Me voy por dos semanas y tú sigues siendo un ogro – dice con burla y lo miro con enfado —No soy un ogro – digo exasperado —Como tú digas, que te parece si vamos a tomar algo para celebrar mi regreso – dice con una sonrisa Patricio se fue dos semanas a Inglaterra por unos negocios, él me conoce perfectamente, es el único al que le tengo toda mi confianza, de hecho es mi único amigo, aunque está obsesionado con que encuentre una buena mujer, no entiende que a mí no me interesan esas tonterías del amor. — Está bien – digo y él sonríe con satisfacción Estamos sentados en el elegante bar bebiendo whisky, Patricio me pone al tanto de sus dos semanas en Inglaterra, y yo le cuento sobre los nuevos negocios que estoy haciendo. — ¿Y que más ha pasado en estos días? – pregunta mientras bebe de su copa, inhalo de mi cigarrillo y contesto — Nada importante – digo y doy un trago de mi whisky — ¿Alguna mujer? – dice Patricio con cautela y lo miro irritado —Muchas – digo con sequedad y exhalo el humo mi cigarro —Sé que te acuestas con muchas, yo pregunto por alguna especial – dice, y le ruedo los ojos —Cuando vas a entender que no me interesa tener relaciones amorosas con nadie – digo exasperado —Daryl eres joven, exitoso, tienes un gran futuro, me gustaría mucho que encontraras a una buena mujer, y no me refiero a Sonia, quiero decir una mujer con la que compartas tu vida – dice mi amigo —Patricio eres muy sentimental, ya te dije que a mí solo me importa el dinero y el poder, esas estupideces del romanticismo son para idiotas – digo y mi amigo me mira con enfado —Creo que un día de estos encontraras a una mujer que te volverá loco y caerás perdidamente enamorado, no sabes cómo voy a disfrutar verte así – dice Patricio con diversión —Jamás, eso jamás va a pasar – digo con firmeza y tomo de mi trago, Patricio mueve la cabeza sonriendo, es la verdad, yo jamás me voy a enamorar de nadie, eso lo tengo muy claro. Aparco afuera del departamento de Sonia, subo y la miro con un diminuto conjunto de encaje n***o, se acerca a mí y me besa, la tomo con fuerza de la cintura y la llevo a la habitación, la desvisto con rapidez y entro en ella con fuerza, gime mientras me muevo con fervor. No es necesario un preámbulo, nuestra relación siempre ha sido así, solo pasar un buen rato, nunca me ha pedido nada más, porque sabe que todo se acabará. Termino de satisfacerme y me visto, ella esta agitada mirándome con depravación —Quédate – dice y la miro ásperamente —Ya sé que no te gusta dormir acompañado, solo será esta noche – dice ella, termino de vestirme y camino a la puerta —Nos vemos en la oficina – digo y salgo, ella tiene razón, no me gusta dormir con nadie, odio que me cuestionen, nunca le he dado explicaciones a nadie, y nunca lo hare. La mañana llega y me levanto para ir a la oficina, salgo a la cocina y Delia me sonríe con cariño, ella es mi ama de llaves, es una mujer mayor, creo que me conoce mejor que mi propia madre. Me siento en la barra y coloca un plato de omelet y jugo de naranja frente a mí —Gracias – digo y ella vuelve a sonreír —De nada, buen provecho – dice amablemente y sale de la cocina, comienzo con mi desayuno mientras leo el periódico, escucho la puerta abrirse y miro Jasón parado frente a mí, es mi guardaespaldas, estuvo en el ejército y es muy eficiente, tras el miro a mi insoportable primo —Sr. su Primo lo busca – dice Jasón serenamente, el idiota de Rodrigo entra y me abraza eufóricamente, yo lo miro irritado —Puedes retirarte – digo mirando a Jasón, asiente y me deja con Rodrigo — ¿Qué haces aquí? – digo molesto, su sola presencia me exaspera —Parece que no te da gusto verme primo – dice y lo miro con frialdad — ¿No estabas en Francia?– digo y continuo con mi desayuno, él se sienta a mi lado sonriente —Así es, pero regrese, extrañaba a la familia – dice y bufo con sarcasmo, es un parasito, si regreso es porque quiere dinero, me levanto y él me mira —Hey, ¿a dónde vas? – dice y me giro para mirarlo A trabajar, las personas productivas, trabajamos – digo irritado, él sonríe con cinismo —Eres multimillonario, no tienes que trabajar por el resto de la vida – dice y lo miro con enfado —En la noche voy a ir al antro, vamos – dice y niego —Por favor, mira sé que no te gusta, pero conocí a una chica y la quiero impresionar, el lugar es de tu propiedad así que…– dice y ya sé que pretende —Si quieres ir, hazlo, pero no cuentes conmigo – digo y él se acerca con rapidez —Por favor, acompáñame, mi amiguita llevara a su prima o algo así, por favor necesito soporte – dice con suplica —Estás enfermo si piensas que voy a ir a aburrirme con las niñitas cabezas huecas con las que te acuestas- digo y él mira con frialdad —Daryl nunca te pido nada, por favor – dice y sé que no me va a dejar en paz, ¿porque me tiene que molestar a mí?, como si nunca hubiera salido con más de dos mujeres, como sea, no podré quitármelo de encima hasta que acepte —Está bien, eres insoportable – digo con enfado, él sonríe con alegría y salgo de mi departamento, el idiota de Rodrigo sale con crías tontas, y ahora tendré que soportarlas, pero me la cobrare.