Capítulo 2

2011 คำ
“¿A qué le tienes tanto miedo?” “¿A qué le temes, a lo que escuchas, a lo que ves o a lo que te hacen?” Muchas personas dirán, no temas y afrenta tus miedos. Pero yo me pregunto, ¿tú a que le temes?... Había escuchado estas preguntas formadas de diferentes formas a lo largo de los años y mis respuestas solían ser algo insignificante, pero desde que vi un vídeo donde mencionaban esas palabras, me ha colocado a reflexionar. ¿A qué le tienes tanto miedo?... He tenido miedo a perder a las personas que amo, esa era la respuesta que creí que era “la mejor” para responder cuando me preguntaran. Pero me ha dado cuenta, que mi mayor miedo es perderme a mí misma y se hizo realidad. Verán… Estoy rota, esa es la verdad. Cuando sentí que toda yo, cambio por completo. Creí que tendría ese cambio para mi propio bien, pero cometí un grave error, porque no cambie por mí, cambie para los demás y eso me llevo a perder mi esencia. Me perdí a mí misma y hasta este momento, no he podido encontrarme. Lo he intentado, muchas veces… Pero siempre ha sido difícil, porque ya no sé quién soy yo. Finjo una y otra vez, que soy alguien feliz, finjo que no pasa nada… Y muchas veces, prácticamente siempre, debo fingir que nada pasa, porque no quiero preocupar a los que me rodean. Siempre finjo ser fuerte, siempre finjo ser feliz… Pero, la verdad… No lo soy, nunca he sido feliz, nunca me he considerado ser cien por ciento fuerte. Tuve que sacar ese valor ante ciertas situaciones, pero no considero que realmente yo sea así. He tenido que escuchar, por años, las mismas palabras de siempre… Eres una niña, algún día sabrás lo que es la felicidad, algún día serás una gran mujer, algún día serás fuerte, algún día serás independiente, algún día… Escucha eso, una y otra vez. Pero, siempre me digo… ¿Cuándo he sido realmente feliz?, ¿cuándo he sido una mujer fuerte?, ¿cuándo he sido independiente?... Tuve que aprender a valerme por mi misma por años, porque siempre tuve que observar como mi familia prestaba más atención en otras personas y no en mí, siempre me pregunté, ¿por qué me ignoran?, ¿por qué no me preguntan, aunque sea si realmente estoy bien?... He llorado sola, siendo la oscuridad y la soledad, mis únicas compañías. Me alejé de las personas, me he encerrado en mi mundo. Ahora muchos se preguntarán, ¿por qué lo haces?... Bueno, solo puedo decirles que, en mi caso, nunca creyeron en mí, nunca sentí que me demostraran amor verdadero, nunca me sentí protegida por las personas que amo, nunca me sentí respetada por esas personas. Siempre me sentí rechazada, olvidada y odiada, inclusive me sentí así conmigo misma. Y ese ha sido otro error que he cometido en mi vida. Me encerré en un mundo que yo misma he creado, para sentirme amada, protegida y respetada. Pero en ese mundo, solo estoy yo y la soledad como mi testigo. He odiado por tantos años, he odiado a los causantes de mi dolor… Pero, no me había dado cuenta, que yo también fui una de las causantes de ese dolor. Si tan solo hubiera hablado, si tan solo pudiera expresarme mejor, si tan solo dejara de fingir ser fuerte, si tan solo dejara de fingir ser yo… Quizás, solo quizás estaría alguien más a mi lado, en lugar de la soledad. He sufrido tanto, me he odiado y jamás he aprendido amarme… ¿Por qué?, porque no dejaba de escuchar todo el tiempo: “Mady no te vistas así, te ves fea… Mady no digas esas cosas… Mady eres una mala niña… Mady eres una mentirosa… Mady ojalá no existieras… Ojalá no existieras”. Esas palabras marcaron mi vida de una forma por tanto tiempo… Que ha sido difícil olvidarlas y superarlas… Esas personas que decían aquello, me pregunto… ¿Alguna vez pensaron en el dolor que causaban en lo profundo de mi ser?... Esas palabras me llevaron a vivir con ansiedad, a vivir con depresión… Estos sentimientos te consumen poco a poco, te arrastran a la oscuridad, te aleja de las personas, pero sobre todo… Te puede alejar de ti mismo… Me siento como si todo el tiempo estuviera fallando, como si nunca fuera a poder salir de esa oscuridad que me consume poco a poco… Me siento olvidada por las personas que amo, me siento olvidada por mí misma… ¿Quién soy realmente?... No lo sé… Solo sé que hay dolor y odio en mi corazón, y a la única persona que le reclamo por esos sentimientos, es a mí misma… Por eso, siempre me pregunto… ¿Algún día seré feliz?... ¿Algún día podré olvidar?... ¿Algún día podré perdonar?... ¿Algún día podré amarme?... No lo sé… Simplemente, no lo sé… Hay una canción con la que me he sentido reflejada sin querer. ¿Por qué?, se preguntarán… Porque, su letra me lleva a recordar tantas cosas por las que tuve que pasar, que me han lastimado como nunca. Se llama: dime quien me salva a mí. ¿Alguna vez pensaste en querer quitarte la vida? Tal vez te imaginaste en tu propio funeral Como un fantasma, observando desde arriba Para poder ver por fin si para alguien fuiste especial Lo dije en un pasado, el pesimismo es adictivo La gente esnifa líneas, yo las escribo La depresión viene y va, como las olas del mar Solo quiero hundirme en el agua y empezar a respirar Sentirme libre Flotar con la marea sin peleas, sin sentimiento que rimen Mis lágrimas clavándose en mis letras como agujas ¿Llorarán mis canciones cuando nadie las escucha? ¿Por qué los demás siempre han tenido que ir primero? Demasiados "te quiero" y pocos "me quiero" Me repiten: "tus escritos me salvaron de morir" Pero tengo una pregunta, dime, ¿quién me salva a mí? Te hablan de deconstruirte Pero no de qué hacer cuando te derrumbas por quitar la pieza equivocada Ya no sé qué decirme Estoy acorralado entre la pared y yo mismo empuñando la espada Y tal vez nunca me perdone No hay peor mordaza que la que uno se autoimpone Soy un loco en esta vida de la que somos esclavos Con la mirada perdida y sentimientos encontrados Andar sin rumbo y por inercia Dando tumbos en un mundo como si fuera una bestia Por mucho que uno quiera, nunca va a parar la rueda Si la esperanza es lo último que se pierde, ¿qué me queda? ¿Dejar que pasen los segundos? El tiempo es un profesor que mata a todos sus alumnos ¿Te salvaron mis palabras? ¿Te ayudaron a seguir? Ahora soy yo el que pregunta, dime, ¿quién me salva a mí? Con el tiempo he aprendido a soltar la mano Porque no puedes salvar a quien no quiere ser salvado ¿Y si estoy destinado a vivir en la oscuridad? Porque el caos es mi manera de entender la libertad Estoy cansado de entender, pero de que no me entiendan De ser solo un saco al que arrojarle piedras De que se pierda nuestra humanidad por un triste podio De que duela más el amor que el odio Nunca existieron las palabras para expresar lo que siento Ni vientos que se las llevaran lejos de aquí dentro Me dijeron; "irás al infierno si no te confiesas" Me di cuenta tarde que ya estaba en mi cabeza Siempre queremos comenzar de cero Pero no nos damos cuenta de que la ecuación siempre ha sido la misma Y de nuevo, empezar de nuevo Pero no hallamos respuesta, y la solución puede que ya no exista Me siento un visionario rodeado de invidentes Me siento un escenario sin actores que interpreten Ya no sé ni quién escribe, ¿la razón o el corazón? Ya no sé qué nos define, ¿la intención o la elección? Ese bucle infinito, el bosque de incontables sendas No se te caerá el mito si no te crees la leyenda ¿Te ayudaron mis palabras a no ir hacia el abismo? Pregunto una vez más, dime, quién me salva a mí... ¿De mí mismo? ¿Por qué los demás siempre han tenido que ir primero?... Esa pregunta me la he hecho tantas veces, ¿por qué siempre colocamos a los demás antes que a nosotros mismos?... Y siempre llego a una misma conclusión… Amor… Muchas veces lo hacemos por amor, otras veces lo hacemos por costumbre, pero yo… Lo he hecho por amor y eso ha hecho que me olvide de mí, de ser primero yo, segundo yo y tercero yo. Duele… Duele tanto estar con ese sentimiento de temer decepcionar a esas personas que amas, a esas personas que crees que siempre estarán para ti, así como tú lo estás para ellos… Duele como una mierda… Nunca he tenido miedo a la muerte, nunca le he temido… Solo he temido perderme en un enorme abismo, del cual nunca podré salir… Muchas dicen todo el tiempo que conocen cada detalle de mí, pero ni siquiera he podido conocerme a mí misma, entonces me pregunto… ¿Por qué dices conocerme, cuando ni siquiera yo lo hago?... Me siento como si estuviera fallando todo el tiempo, como si cada día cayera más y más en ese enorme abismo, me siento perdida, es como si estuviera atrapada en ese lugar, sola y en completa oscuridad… Muchas veces… No sé dónde estoy, que es lo que quiero, no sé nada. Es como si mi mente quisiera estar en total silencio… Me siento agotada de luchar contra los demás, de luchar contra mí misma, me siento agotada… Durante años he vivido triste, he llorado noches y noches enteras, sola en una enorme habitación y nadie se da cuenta. Nunca se dan cuenta, porque cuando me obligo a calmarme y salir de esa habitación, me obligo a fingir ser feliz, a fingir una sonrisa y por eso, no se dan cuenta de lo rota que me encuentro… “La gente va y viene, se para de frente y pasa de largo, y siguen sin darse cuenta de que ella está rota”. Cuánta razón tiene frase que escuche una vez de un vídeo que un extraño publicó, tiene tantos significados, que te marcan. No siempre la tristeza la reflejaremos con lágrimas que ruedan por nuestras mejillas, muchas veces se refleja por medio de una sonrisa, todo para que no sepan que te sientes mal. Porque temes herir a los demás, pero preferimos herirnos a nosotros mismos. He notado que una persona que sufre de depresión se caracteriza por muchas cosas, entre ellas, el culparse todo el tiempo, cuando se supone que nunca ha sido tu culpa, sino que es culpa de otra persona… Una persona que sufre de depresión siempre está ayudando a los demás, siempre demuestra ser feliz, cuando en realidad lleva puesta una máscara para no demostrar la tristeza que hay en esa persona. Suelen preferir la soledad, antes que, a las personas, hasta el punto de alejarse, solo para escapar de la realidad… Duele… Duele más engañarte a ti mismo, que engañar a los demás… Me perdí a mi misma, por hacer feliz a los demás, me perdí por tanto tiempo, que no sé quién soy ahora. No sé qué es lo que realmente deseo para mí. ¿Cuándo será el momento de dejar el dolor atrás para sanar mi corazón?... ¿Cuándo?... No solo las personas externas a tu familia serán quienes te lastimen siempre, sino también tu familia y duele más… Te pueden romper el corazón en mil pedazos, te bajan tu autoestima, te hacen odiarte a ti misma, te hacen odiarte cada centímetro de tu cuerpo, cada minuto de tu existencia… Me pregunto… ¿Algún día seré feliz?... No lo sé… Quizás si… Quizás no… Solo con el tiempo lo sabré.
อ่านฟรีสำหรับผู้ใช้งานใหม่
สแกนเพื่อดาวน์โหลดแอป
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    ผู้เขียน
  • chap_listสารบัญ
  • likeเพิ่ม