Mi Querido Profesor

8. Provocación.

El plan parecía simple y durante la cena me dedique a afinar los detalles, no era algo muy complicado de lograr al menos eso pensaba y podría resultar muy entretenido además de que necesitaba poner en su lugar a Madison y más después de saber la importancia y las consideraciones de Evan hacía ella, ellos mantuvieron una amena charla, al menos eso creí por las risas y comentarios que tenían.

Nadie se ocupó de mi y en realidad no importaba tenía cosas más importantes en que pensar, afortunadamente la cena terminó sin mayores contratiempos y pude retirarme a mi recámara, Nani no tardo en subir con el pretexto de llevarme una jarra de agua pero sabía que tenía algo más en mente.

- Buenas noches mi niña, te traje esto.

- Gracias Nani, dejalo sobre la mesa- dije sin más.

- Davy......tienes algún problema con Madison?, hoy la trataste muy mal y parecías algo molesta.

- No para nada....y no creo haberme comportado grosera, solo le aclaré que ella no es de esta "familia"- acentúe con mis manos la palabra- no creo que eso sea malo.

- Te molesta su presencia en esta casa?

- Dios, otra vez con eso....Nani no estoy celosa, no quiero a Evan ni siquiera me gusta- ya sabía a dónde quería llegar con este interrogatorio, así que lo detuve antes de tener otra innecesaria conversación, Nani solo se encogió de hombros y salió de la recámara.

Me fuí a acostar de lo más tranquila, mi plan iniciaba mañana, miré una última vez mi dedo índice donde coloque el anillo, la sensación aún permanecía como si todavía lo estuviera usando y eso solo me animó más y me permitió conciliar el sueño como no lo había hecho en mucho tiempo.

Desperté algo más tarde de lo habitual pero era domingo así que en realidad no importaba, ya pronto era la hora del almuerzo y también era hora de poner en marcha mi plan: seducir a Evan.

Yo regularmente dormía en pijama de pantalón y playera pero si quería que esto funcionará debia bajar usando algo más revelador, así que me puse un lindo camisón de seda color rosa, un pequeño secreto de Victoria, a pesar de que me llegaba a la mitad del muslo aún debía verme inocente y ese color era el indicado, me coloque encima una bata a juego y la deje abierta, alise mi cabello, me puse algo de perfume y use un muy sutil lipstick, una última revisión en el espejo y estaba lista, era momento de bajar.

Me dirigí inmediatamente al comedor y para mi fortuna Evan estaba ahí, demasiado atento en su tablet que ni siquiera se percató de mi llegada ahora solo tenía que llamar su atención me aclaré la garganta y saludé muy alegre.

- Hola, buenos días.

- Buenos días- Evan no levantó la vista.

- Creo que me desperté algo tarde, Nani ya sirvió el desayuno- dije con un dulce tono de voz.

- Es domingo, supongo que esta bien que te levantes tarde- respondió dulcemente aún sin mirarme- y no te negara la comida, eres su niña.

- Supongo.....- seguía sin mirarme- qué desayunas?

- Café, waffles y fruta....esta delicioso, hace tiempo no disfrutaba algo así, extrañaré a Martha cuando acabe esto-por fin levantó su mirada hacia mí, yo tenía una sonrisa inocente y él parecía no ser indiferente, note como tragó saliva y su manzana de Adán se movió, sus ojos se clavaron en mí y pude ver algo de deseo.

- Tal vez si me convences puedo hacer que se quede- dije con coquetería y en doble sentido, Evan trago grueso al parecer entendió mi comentario.

- No puedo contratarla, aún no.

- Aún?....planeas robarme a Nani?-me senté a su lado y coloque mi barbilla bajo mi mano.

- Si.....tal vez más adelante....pero....debo..... no depende solo de mí- respondió muy nervioso y no era para menos el escote del camisón dejaba ver el inicio de mis senos, esto sería más fácil de lo imaginé.

- No será fácil....Nani no me dejaría a menos que planees secuestrarnos?

- No..... sería muy arriesgado..... pero- se aclaró la garganta- cuando te cases con Kyle, ella no querrá estar ahí, lo sé y tú lo sabes, y bueno si Madison esta de acuerdo, tal vez- otra vez esa mujer, al parecer tenía que considerar su opinión para todo.

- Por qué importaría lo que opine Madison?, es tu casa y puedes decidir libremente, no?- quería saber qué tanta importancia tendría esa mujer en un futuro.

- Su opinión es muy importante, después de todo ella tomara las decisiones domésticas en esta casa, cuando.....- hizo una pausa y su mirada se volvió nostalgica- cuando nos divorciemos.

- Ya veo.....- no era necesario averiguar más, ella sería la Señora de la casa, la futura esposa de Evan, bien ahora con más razón mi plan debía funcionar, me iba a divorciar de él, no tenía duda de eso, pero al menos le arruinaría esto a ella.

Evan y yo guardamos silencio, él regreso su vista a su tablet y se enfocó tanto que olvidó por completo mi presencia al menos eso creí hasta que noté que volteaba a verme disimuladamente, "Evan, Evan, ya eres mío" pensé, Nani salió de la cocina, se asombro al verme así vestida e hizo una mueca de duda, que yo ignoré.

- Mi niña..... buenos días?, estás bien?- preguntó con mucho interés.

- Si Nani....me regalas algo de desayunar, me muero de hambre- dije esto con un sensual tono de voz, Evan lo notó y volvió a tragar grueso y ví cuando rozó su mano varias veces en su pierna y eso me dió una idea, lo estaba poniendo inquieto.

- Que bueno......en seguida te sirvo- respondió no muy convencida, se retiró a la cocina y regresó con mi desayuno, lo mismo que le sirvió a Evan.

- Gracias- respondí sonriente y me acomodé en mi silla pero mi pierna toco ligeramente la pierna de él, fue un sutil movimiento, lo necesario para que creyera que fue un accidente.

Se puso de pie inmediatamente, se disculpó y salió del comedor, sé que el toque de mi piel le gustó, Nani seguía observandome de forma inquisitiva pero yo actúe muy natural.

- Davy.... quería avisarte que me tomaré esta semana de vacaciones, mi hermana esta algo enferma y me gustaría visitarla y ayudarla un tiempo, claro si no te molesta?- molestarme?, por supuesto que no, sin Nani en la casa mi plan avanzaría más rápido y no existía la posibilidad de que me delatara, este viaje suyo me caía como anillo al dedo.

- Ya que- respondí fingiendo molestia pero por dentro estaba brincando de alegría- cuándo te vas?

- Mañana temprano, dejaré todo listo para que no tengan problemas con las comidas, yo espero regresar el próximo domingo.

- De acuerdo.

Nani se retiró a la cocina, yo terminé mi desayuno y subí a mi recámara a darme un baño, Evan estaba en su estudio y yo tenía que realizar unos proyectos para otra clase y aprovecharía esta oportunidad para trabajar a su lado, la parte sexy del plan estaba en pausa ahora era momento de trabajar lo emocional y esa era la parte complicada.

Ingresé a su estudio fingiendo no saber que estaba ahí, en cuanto escuchó la puerta levantó la vista de inmediato.

- Lo lamento- comenté- no sabía que estabas aquí, yo solo quería hacer algunas tareas- Evan estaba usando lentes y con su pelo despeinado lucía realmente sexy.

- Esta bien, descuida.

- No te molesta?

- No para nada, adelante.

Entré y me dispuse a trabajar en el otro escritorio de diseño, él no dijó nada por lo que supuse estaba bien con eso.

- Sería trampa si me ayudarás?

- Creo que si.

- Y si nadie se entera, aún sería trampa?- pregunté maliciosamente.

- Aún sería trampa.

- Hay algún modo en que pueda convencerte?- le sonreí dulcemente cuando enfoco su vista en mí.

- Podría ayudarte si cubres mi tarifa, sabes que soy uno de los mejores arquitectos del país y mis costos no son bajos.

- Ya veo......Evan puedes liberar unos 50 mil dólares?, necesito pagar unas asesorías- él soltó una gran carcajada y yo no tardé en hacerle compañía, estábamos muy cerca el uno del otro y podía sentirse una corriente entre nosotros

- Qué tienes que hacer?- preguntó levantándose de su asiento para pararse atrás de mí, creo que si iba a obtener su ayuda.

- Un plano de situación y emplazamiento.

- Ya....- Evan tomó el lápiz y comenzó a explicarme los principios básicos que debía tomar en cuenta, me ayudó a delimitar el diseño y me sugirió hacerlo en dos planos montables.

Hice lo que me indicó aunque en ningún momento él hizo un solo trazo y escuché cada uno de sus consejos, había quedado cautivada por la forma tan elocuente en la que hablaba, en sus clases no era tan consciente de esto pero ahora podía notar que era un hombre inteligente y culto, terminé de realizar el plano, he de decir que nos tomó toda la tarde, pero no lo sentí, su compañía parecía hacerme sentir cómoda y en calma.

Pero recordé que eso no era parte del plan, estaba tan concentrada que olvidé mi motivación principal, sin embargo, tal vez por hoy había sido suficiente, claramente Evan estaba mucho más relajado y abierto hacia mí eso lo ponía en una clara desventaja en este juego, después de todo estaba vulnerable y en ese estado recuperar su amor no seria complicado, decidí dejarlo en el estudio, él no pudo concluir su trabajo por ayudarme y supe que le tomaría probablemente gran parte de la noche.

- Gracias- dije suavemente y en un impulso lo besé en la mejilla, era parte de mi plan, me repetí.

- De.....nada- respondió con asombro y solo salí sin más, no volvimos a vernos hasta el día siguiente.

Nani iba rumbo al estudio sabía que habíamos estado trabajando ahí juntos, nos topamos justo cuando yo cerraba la puerta y ya no pudo con la curiosidad.

- Davy, todo bien?

- Sí Nani, por qué la pregunta?

- Pues, no sé solo quería saber, si no necesitabas un medico o algo parecido?......un psiquiatra tal vez- esto último lo susurro.

- Por qué lo necesitaría?

- Pues porque has estado actuando muy raro con Evan, hasta pareces amistosa, me preocupe un poco, tú no sueles ser así y menos con él.

- No me he dado cuenta- tenía que seguir fingiendo demencia, si alguien me conocía bien era ella y no podía delatarme frente a Nani.

- Segura?.....Davy no sé que esta pasando por esa cabecita tuya pero......

- Solo estoy dándome la oportunidad de conocerlo, como me lo pediste,- interrumpí- también fue el último deseo de mi mamá y quiero intentarlo, saber quién es Evan realmente, no lo sé, tal vez podamos ser amigos- lo dije con toda la intención, sabía que él estaba al otro lado de la puerta escuchando nuestra conversación, pude ver la sombra de sus pies, no podía permitir que dudará si sentía que era algo directa, debía parecer algo casual.

Nani me miró por unos segundos, no parecía del todo convencida pero al menos le sembré la duda, le sonreí tranquilamente y me retiré a mi recámara, solo esperaba que no le metiera ideas en la cabeza que lo hicieran dudar, ahora debía aprovechar su ausencia.

A la mañana siguiente Nani salió muy temprano, Evan la llevo hasta la estación del tren y de ahí se fue a la universidad, hoy no tenía clase con él y era una oportunidad para poner en marcha una nueva estrategia, escuché que a un hombre se le conquista por el estómago, en mi vida había cocinando, pero que tan difícil podría ser?, siempre se puede contar con un buen tutorial de YouTube.

En cuanto tuve un periodo libre, busque algunas recetas, me llamó la atención un filete Wellington, no parecía complicado, pero para estar segura comparé varios tutoriales, elegí el más simple, concluí mis clases y fui de compras, afortunadamente en Nueva York se consigue lo que sea, llegué al departamento y puse manos a la obra.

Comprobé que esto era más difícil de lo que pensé, terminé haciendo un desastre en la cocina, probablemente si Nani estuviera aquí ya me habría regañado, y no era para menos, había harina por todos lados, los trastes sucios abarrotaban el fregadero, el puré de papá se me quemó en tres ocasiones, la especias estaban regadas por todo el piso y dos filetes fueron a parar a la basura, solo esperaba que este último estuviera delicioso.

Evan llegó justo a la hora de la cena, subió directamente a su recámara y al parecer me estaba buscando, llegó hasta el comedor con un semblante de angustia.

- Pensé que no habías llegado- mencionó.

- Llegué muy temprano, me dió tiempo de preparar la cena- su rostro cambio, parecía tenía algo de curiosidad.

- Tú cocinas?

- No, pero nunca es tarde para intentar- le sonreí aunque estaba muerta de cansancio- vamos toma asiento.

- No crees que tal vez podríamos pedir algo......o quizá ir a un restaurante, qué dices?, te gustan las hamburguesas no?- estaba nervioso y no creo que quisiera probar mí comida.

- Es mejor cenar en casa.

- Tal vez en otra ocasión, hoy la noche está muy linda aprovechemos y vamos por algo delicioso.

- Crees que mi comida no es deliciosa?- cuestioné molesta.

- No, no es eso, es solo que.... bueno.....no se te antojan unos canelones?

- No

- O que tal comida Tai?

- No

- Vamos por unas hamburguesas.

- No..... siéntate voy a servir la cena- finalicé y salí rumbo a la cocina, no iba a pasar todo el día haciendo un desastre y llorando de frustración para que él decidiera que no merecía ni el beneficio de la duda.

Regresé con un filete que lucía un poco más dorado de lo que debería, bueno mucho más dorado pero no se quemó, y un puré de papa aguado, me sentía muy orgullosa de mi cena, no parecía de restaurante pero tampoco era un asco.

Corté un trozo de filete, el cuchillo tardó en cortar la costra pero solo tuve que poner un poco más de empeño y una vez cruzando la barrera se cortó con relativa facilidad, se veía igual que en internet, se lo serví a Evan junto con un poco de puré y esperé atenta su respuesta.

Él lo dudo un poco pero notó mi expectativa y no tuvo más remedio que comer un trozo.

- Y bien?- pregunté en cuanto empezó a masticar.

- Esta.....esta....un......poco.....- seguía masticando- esta....

- Estaaaaa?

- Esta......lo siento no puedo- escupió la comida y tomo un enorme trago de agua.

- Qué, qué tiene de malo?- pregunté decepcionada.

- Lo siento....

- No te gustó?- pregunta estúpida, desde luego que no le gusto.

- Es solo que- parecía dudarlo- esta.... bueno....sabe....

- Dilo de una vez.

- No te ofendas, para ser tu primera vez esta bien....solo que quedó crudo y quemado.....no sé cómo lo lograste pero así es....y sabe algo.....amargo- no pude creerlo y lo probé, necesitaba confirmarlo por mi cuenta y..... efectivamente estaba asqueroso, escupí el bocado y salí corriendo al baño.

Esto fue un desastre de proporciones épicas, debía reconsiderar mi plan, tal vez continuar por este camino no era lo mejor, lo mejor sería regresar a la parte de seducción y provocación al menos sabía que dió resultado y no corría el riesgo de enviar a Evan al hospital o peor matarlo, digo no lo amaba y lo odiaba, pero no lo suficiente para matarlo.

Para su fortuna Nani dejó suficiente comida en el refrigerador y pudimos tener una cena decente.

- Lo lamento- dije verdaderamente apenada.

- Descuida.....no fuiste la peor.... Madison me envió al hospital con vomito- esa mujer otra vez, por qué tenía que mencionarla?- claro que ahora es toda una experta, después de unos cuantos cursos- solo fingí una sonrisa, si ella creé que se saldrá con la suya esta muy equivocada, no será su esposa, no ella, estoy decidida a arruinarles su fiestecita.

Estábamos recogiendo la mesa y me dí cuenta de la mancha de comida en su comisura del labio de Evan, esto parecía cosa del destino porque todo se estaba alineando para mis propósitos, sin ninguna duda lo limpie con mi pulgar, provocando un desasosiego en él, definitivamente este camino era mucho más fácil, estaba por comentarme algo cuando su teléfono comenzó a sonar, lo tomó sin dudarlo y contesto la llamada, caminando rumbo al despacho.

- Hola, Mady......- fue todo lo que alcance escuchar, ya no me molestó que respondiera, sabía que estaba teniendo éxito en mi cruzada, pensé en seguirlo para saber más y tener un plan de contingencia pero yo también recibí un mensaje de Kyle, se estaba disculpando por la forma en la que me trató en los últimos días y quería compensarme, no estaba segura de verlo, francamente ya no estaba segura de querer algo con él, pero fue tan dulce en su texto que tal vez no haría daño darle una última oportunidad, por supuesto con nuevas reglas, ahora sería yo quien dictará el rumbo de nuestra relación.

La convivencia con Evan estaba resultando favorable en muchos niveles, el más importante es que él estaba más receptivo a mí y mis avances ya no parecía incómodo con mi presencia, claro que tuvimos algunas peleas que provoque con toda la intención, digo no sería creíble para nadie que pasáramos de insultos, odio y gritos a casi amigos, él era un hombre inteligente y seguro lo notaría, era mejor conservar la fachada, además me dió una tarjeta para disponer del dinero que deseará y finalmente me ayudó a realizar mis proyectos escolares y la mejoría se notaba, mis profesores estaban más que complacidos con mis trabajos, ya no solo era por las donaciones.

Compartimos más tiempo pero ambos acordamos procurar ser discretos en la universidad cuando Megan nos encontró en su oficina y comenzó a cuestionar lo que ocurría entre nosotros, yo solo le comenté que era por cuestiones de trabajo, ya todos sabían que no me iba muy bien en su clase y resultó ser el pretexto perfecto, aparentemente se lo creyó pues no preguntó más, después de eso Evan me pidió mantener mi distancia pero no se lo iba a permitir así que durante su clase le envié un mensaje de texto:

" Mi profesor es muy bueno, me preguntó si da lecciones privadas"

Si, estaba siendo un poco más atrevida de lo que pensé pero era un impulso que a veces no lograba controlar, y solo era porque soy una persona muy decidida y enfocada, además este plan se había convertido en mi misión principal, no había otra razón.

Evan sacó su teléfono y me miró rápidamente con el ceño fruncido, regreso su vista y leyó el mensaje, se puso nervioso y se rascó la mejilla, un movimiento que había aprendido significaba nerviosismo, disfrute verlo así, sin dudarlo me envió una respuesta.

"No puedes pagar sus honorarios, tendrás que esforzarte"

Nada del otro mundo, bien amigo, no te daré tregua.

" Cómo puedo esforzarme?"

Evan sonrió y respondió.

"Hay muchas maneras, elige la mejor"

A caso estaba coqueteando conmigo?, me surgió la duda pero su sonrisa de lado lo delató, efectivamente lo estaba haciendo.

"Alguna en especial?"

Mi miró directo a los ojos esperando ver un sonrojo pero yo le sostuve la mirada de manera traviesa, regresó al teléfono solo para contestar.

"Se me ocurre una, portate bien y tal vez te diga en qué consiste o te lo muestre"

Eso no me lo esperaba, fue demasiado directo y me tomó desprevenida, obtuvo lo que quería, me sonroje y sentí un calor creciendo en mi cuerpo, él sonrió triunfante ante mi reacción y continúo con su clase, no pude evitar entender porque todas en la universidad estaban embelesadas con Evan, era un hombre no solo atractivo si no también inteligente, no presté atención a lo que decía me había perdido en su encanto.

Fuera de eso en la universidad me comporte de forma muy normal, excepto que acudia a su oficina para llevarle algo de comer, con el pretexto que Nani me lo solicitó, de vez en cuando aprovechaba para comer con él y así pasáramos tiempo juntos, todo iba a avanzando de maravilla, Evan comenzó a bajar la guardia e hizo el intento de tomar la iniciativa de pasar más tiempo juntos pero no se atrevía del todo, su deseo era evidente cuando yo solía usar camisones un tanto reveladores y mi ropa le mostraba un poco más de mi cuerpo, lo había seducido de eso no había duda, estaba segura que él quería más de mí, y yo quería verlo a mis pies suplicando por mi amor y solo hasta ese momento me sentiría satisfecha.

Esta noche tomaría un camino un poco más directo, no consideré las posibles consecuencias, supe que tendría una cita con Madison, al parecer habían quedado de ir a cenar, ella seguía presente en este juego y ese no era el objetivo, él no debía tener a ninguna de las dos, a mi tenía que anhelarme y a ella rechazarla, ese era el plan, en fin, ya que no tenía opción arruinaría su cita y además intentaría besarlo, un paso que estaba planeado pero no hasta un par de días más, calculé cada movimiento tan fríamente que incluso tenía fechas previstas sin embargo tenía que adelantar todo y en cuanto llegó la noche puse manos a la obra.

- Deberíamos ver una película, estoy algo aburrida- dije mientras sostenía su brazo y hacia un puchero, sabía que se vería con Madison y no estaba dispuesta a dejarlo ir.

- No tengo tiempo- Evan intentaba alejarse pero sabía por su expresión que no deseaba irse, quería quedarse conmigo.

- Vamos.....una película, se lindo conmigo.

- Davana, madura....- dijo sonriendo ante mi jugueteó con su brazo.

- Soy una niña mal criada....ya deberías saberlo además tienes que consentirme, le dijiste a Nani que te harías cargo de mí.

- Dije que te cuidaría no que te consentiría, hay una enorme diferencia.

- Bueno, entonces cuida de mi, debes vigilarme y la mejor forma es estar a mi lado- abrace su brazo y le sonreí, este juego con Evan me estaba gustando.

- Supongo que no vas a desistir, cierto?

- Nop- lo tomé de la mano y lo llevé hasta la sala de estar, lo aventé sobre el sillón y me dispuse a elegir una película, lo ví sacar su teléfono y enviar un mensaje de texto, espero le avisara a esa mujer que no llegaría a su cita pero eso tendría que averiguarlo después.

- Solo por favor no me tortures con alguna comedia o algo muy romántico, sí?- sí pensaba en una comedia algo tonta pero ya había conseguido mucho de él por hoy, probablemente era mejor elegir algo de acción, estaba poniendo la Carrera de la Muerte cuando escuchamos que alguien entró al departamento, Evan se levantó y fue a averiguar, era Nani no se supondría que llegaría hoy pero al parecer se adelantó un par de días, esperaba que eso no dañará mis planes, aunque ya no estaba segura de cual era mi plan, esta convivencia se volvió disfrutable para mí.