Capítulo 3

1021 Palabras
Sophie y yo fuimos a tomar un autobús que nos llevaría hacia la enorme ciudad. Tenía que confesar que era la primera vez que subía a uno y me sentía como si fuera a subir a la mejor montaña rusa de Disneylandia. Mire a mi alrededor y noté a todas las personas en sus asientos, algunos parecían muy cansados y otros solo escuchaban música en sus audífonos. Miré por la ventana y sonreí. - Pareces una niña pequeña - dijo sophie bromeando. - Lo sé - rei - se siente tan extraño, pero lindo. - ¿Lindo? - frunció el ceño - yo detesto esto - hizo una mueca - ¿no tienes nauseas? - En absoluto - negué. Sophie miró bien la calle y pronto me tomó del brazo. - Vamos, debemos bajar aquí - se incorporo rápidamente y toco un botón. Pronto el autobús se detuvo y las puertas se abrieron. Sophie me permitió bajar primero. - Bueno, ahora solo caminamos una cuadra y llegamos al bar donde estarán mis amigos. - Esta bien - sonreí emocionada. Durante el camino iba mirando las vidrieras de las distintas tiendas que se encontraban. Pensaba en lo mucho que me costaría volver a usar tacones después de haber estado cómodamente con las zapatillas. - Aquí es - Sophie se soltó de mi brazo y entramos hacia un bar. Este estaba lleno de chicos de aparentemente nuestra edad. - Hasta que al fin llegas - dijo una chica levantándose de su asiento. Pronto los demás la imitaron. - Perdón por la demora, el bus estaba demasiado retrasado. Por no decir que tuvo que ayudar a escapar a una princesa. - Les presento a mi prima Solange - dijo tomándome del brazo para acercarme a ellos. - Hola chicos - dije con timidez. Pero me sorprendió cuando la chica de pelo rojo me abrazo como si me conociera de toda la vida. - Sophie nos habló mucho de ti, tanto que ya queríamos conocerte. Por cierto mi nombre es Tiara. - Encantada - dije recibiendo su beso en la mejilla. - Yo soy Peter y el es mi mellizo Robert - ambos me saludaron con un beso en la mejilla. Y luego se acercó alguien que reconocí, el chico de quien tanto me hablaba mi amiga. Sin embargo sabia que faltaba uno. - Hola, yo soy Nathan - se acercó y tomó mi mano para depositar un beso en ella, estaba usando un tono que no me agradaba. - Un placer - force una sonrisa y pude ver la incomodidad de Sophie. - Bueno nos sentemos - dijo Tiara. Rápidamente me puse al lado de Sophie y por debajo de la mesa le tomé la mano para que supiera que todo estaría bien. - No sabía que tenías una prima tan linda ¿eres de aquí? - dijo aquel chico intrigado. - Si, en realidad mi hogar está a dos horas de aquí, pero me estoy quedando en casa de Sophie. - Debo decir que iré a casa de Sophie más seguido - sonrió. - Como siempre, Nathan intentando ligar con cualquier chica nueva que llegue. Hola chicos Todos nos volteamos y allí estaba el. Thomas, el chico apuesto que quería conocer. - ¿Que pasó que demoraste? - preguntó Robert. - He terminado tarde de trabajar con mi abuelo - hizo una mueca - de verdad estaba dudando en venir. Pero no podía contra la insistencia de Sophie. Sophie sonrió con orgullo. - Te presento a mi primita querida. Sol, el es Matt. Matthew. Ella es solange - dijo presentándonos. - Es un gusto conocerte Solange - el se acercó y besó mi mejilla. Su exquisito perfume inundó mis fosas nasales. - El gusto es mío - sonreí. Luego de que el se sentara, todos comenzamos a ver la cartilla para hacer nuestros pedidos. - ¿Que vas a ordenar? - dijo Sophie mirando la cartilla conmigo. - Tal vez una hamburguesa, muero por probarla - mordí mis labios. - ¿Como? ¿nunca comiste hamburguesa? - dijo Nathan haciendo que todos me miraran raro. - Mi madre piensa que no son saludables - y eso era cierto. Mamá me tenía prohibida la comida chatarra. - No conozco a nadie que se haya muerto por comer una hamburguesa - dijo Robert frunciendo el ceño. - Puede que sean grasosas pero son riquísimas - Tiara arrugó su nariz y todos asintieron. - Esta bien, una hamburguesa para ti y una para mi - dijo Sophie - y ¿como refresco? - ¿Tu que vas a tomar? - quise saber. - Tal vez una cerveza - se encogió de hombros - pedire una coca cola para ti, ya vas a ver que es deliciosa. Pronto le hicieron seña a una moza y tomó nuestros pedidos. - Tengo miedo de preguntar si alguna vez tomaste coca cola - dijo thomas sonriendo. - En realidad no, mi madre me suele dar agua, o jugo o agua con soda - expliqué. - Tu madre es cruel - dijo Peter haciendo que su hermano asintiera de acuerdo. - No es cruel, solo es una persona obsesionada con la comida saludable - Sophie trato de defender. - ¿Eso significa que no bebes alcohol? - No - negué. Rei al ver que todos estaban pendientes sobre todo lo que decía - no me miren como si fuera un alienígena. - No, es solo que es increíble que una chica como tú no haya probado estas delicias - Tiara nego asombrada - con nosotros vas a saber lo que es vivir. - No tengo dudas de eso. Una vez que nuestros pedidos llegaron, me dediqué a probar esa hamburguesa. No quería que se terminara. Matt me observó y comenzó a reír. - ¿Qué? - dije sintiéndome avergonzada. - Tienes un poco de mostaza - dijo señalando su boca - permíteme. Pronto agarró una servilleta y comenzó a limpiarme la boca con mucho cuidado. - Es extraño - dijo el mirándome a los ojos. - ¿El que? - frunci el ceño. - El parecido que tienes con la princesa.
Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR