
Nyxara cae del cielo como un rayo perdido, sin recuerdos, sin magia y sin fuerzas. Vulnerable y confundida, es acogida por la familia Solvard, quienes la llaman Natasha. Pero ella no es solo una joven misteriosa: en su corazón late el eco dormido de un dragón milenario condenado a vivir como humana.
Mientras intenta adaptarse al castillo, Natasha descubre algo que no esperaba:
el amor humano es más peligroso que cualquier magia.
Los tres hermanos Solvard, cada uno de forma distinta, comienzan a rodearla, a cuidarla, a desearla:
Draegor, galante y coqueto, la hace reír cuando más lo necesita.
Lucian, dulce y tierno, le ofrece un refugio seguro en su mundo de magia.
Kael, duro y silencioso, lucha por mantener distancia… aun cuando su corazón late más fuerte cada vez que ella pronuncia su nombre.
Natasha aprende a leer, a reír, a sentir… y sin darse cuenta, su alma se entrelaza peligrosamente con la de los tres. Pero hay una mirada que la incendia más que cualquier otra:
la de Kael, el guerrero que juró no involucrarse y que termina siendo el único en quien ella piensa antes de dormir.
Entre bailes, celos, noches compartidas y un destino que los empuja a acercarse incluso cuando no deberían, Natasha y Kael descubren un amor que duele, que sana, que consume…
y que podría destruirlos si la verdad de su origen sale a la luz.
Porque no hay magia más poderosa que la del corazón.
Y no hay rayo más devastador que un amor que intenta negarse a sí mismo.

