POV : SOFIA
Había leído tantos libros de autoayuda durante mi corta edad, que podían caber todos en un enorme piscina, lamentablemente aún no podía conseguir una solución a mi situación a pesar de que subrayara cada consejo y aplicar cada ejercicio recomendado seguía estando en el mismo lugar que comencé hace unos años.
En el mundo empresarial nadie se molesta en reconocer tus méritos aún cuando haz dado todo de ti, todavía sigue sin ser suficiente, es cómo entrar en una carrera hípica que no termina nunca.
Quería creer con desesperación que había elegido el camino correcto, y que hoy en día ser parte del grupo empresarial más importante del país a tan corta edad, debería hacerme sentir una mujer orgullosa y no una desdichada cómo me he sentido los últimos tres años, es que me he preparado para ésto se supone éste era mi sueño, por el cuál sacrifique y abandoné las cosas que me hacían sentir feliz.
«No entiendo que es lo que sucede conmigo»
De hecho me despertaba por las mañanas deseando que los últimos meses de mi vida hubieran Sido una broma cruel y retorcida, no es posible que me esté convirtiendo en una mujer tan aburrida e insípida adicta al trabajo.
Las noches que debieron ser de fiestas, bailes y mucho alcohol fueron sustituidas por viajes de negocios, cócteles y largas horas de trabajar en la oficina.
Las hojas de mi pasaporte estában llenas con sellos recientes de distintos países que no recordaba haber visto, cada uno era un recordatorio de lo drástico que había cambiado mi vida en el último año.
Me había mudado más de cinco veces a diferentes penthouses de lujos y cada semana ofrecía una increíble cena para nuestros accionistas, preparada por el mejor chefs de la ciudad pero no conocía a fondo ninguna de esas personas, sólo me encargaba de memorizar sus nombres y la cifra de ganancia que aportaban por año para nuestra compañía.
Todo mi guardarropa estába lleno de prendas exclusivas con las mejores marcas de diseñador, aúnque daba igual porqué no tenía tiempo para salir a lucirlos en una noche de fiesta con amigas...
«Amigas que tampoco las tenía.»
Centré mi atención en la bandeja de lasaña que terminaba de sacar del horno...
¡Oh diablos!
Se encontraba toda quemada por los bordes y el centro estaba algo crudo, era mi tercer intento, nunca fuí buena cocinando pero quería hacer algo lindo para conocer al fin la familia de mi novio, así que de momento tendría que quedarse así.
Tomé el móvil y llamé a Harry mi actual novio, era por lejos el más comprensivo, atento y cariñoso, un hombre íntegro y un ejemplo a seguir para muchos empresarios que se están labrando un camino ascendente dentro de éste medio.
Nunca dice cosas incorrectas sobre todo el tiempo invertido en mi trabajo o mis viajes de último momento, si no todo lo contrario me apoya y entiende perfectamente la gran responsabilidad que ha puesto mi hermana Dara sobre mis hombros, si todo sigue así en unos años puede que nos decidamos a dar el gran paso para unificar nuestras empresas.
Pulse su nombre en la pantalla y esperé unos segundos a qué contestara, lo hizo al tercer repique.
— ¿Si, cariño? ¿Te sucede algo?.
— respondió.—
— Hola señor ocupado
¿Dónde te encuentras? Llevas cinco minutos de retraso.
— pregunté divertida, hubo un silencio sepulcral durante varios segundos.
—Oh, cariño lo siento.
—Su voz sonaba distante.
—Estoy trabajando en la oficina no creo que logre llegar a tiempo.
— Mi sonrisa y todo el buen humor se esfumó de inmediato, había puesto mucho esfuerzo para que todo saliera perfecto en esta noche, Incluso me tomé el día libre para organizarme.
Respiré pausadamente un par de veces antes de darle una respuesta.
— Entiendo cielo, lo dejaremos para otra ocasión.
— Igual que siempre «Pensé»
— Eres la mejor preciosa.
Prometo compensarlo éste fin de semana antes de nuestro vuelo.
— Prometió y me dió la impresión de que sonreía por imaginarse todo lo que haríamos así que me contagio un poco su entusiasmo.
—Eso suena Interesante, esperaré con ansias.
—Digo y me despedí.
Suspiré antes de tomar la bandeja entre mis manos y dejarla caer en el bote de basura, estaba acostumbrada a cancelar nuestros planes en último instante pero pensé que está vez las cosas serían diferente, era tiempo de conocer a sus padres la habíamos planeado tantas veces y ninguna vez se pudo.
Las luces de mí móvil parpadearon y hubo unos segundos en que la ilusión se apoderó de mí al pensar que se trataba de Harry, llamando arrepentido por cancelarme a último momento, pero no pasó..
Y la decepción llegó de inmediato, sólo era un texto de mi madre informándome sobre los últimos detalles de mi fiesta de bienvenida, suspiré y eché el móvil a un lado.
« Cómo si en verdad quisiera una»
******************
Días después...
Observaba por la ventanilla impaciente por aterrizar, hasta que por fin apareció frente a mí el familiar horizonte reflejado en cielo...
Harry iba a mi lado tal cómo lo prometió hemos pasado un increíble fin de semana aúnque su móvil no dejó de sonar nunca y su bandeja de correo se mantuvo activa, igual fue maravilloso.
Siento que ambos somos un equipo y nos complementamos, a partir de ahora mi agenda cambiará y quiero pasar todo el tiempo necesario junto a él hasta que le toque regresar a casa.
—¿Quiere un refrigerio Señorita Harper?
—Una de las azafatas se paró frente a nosotros, Harry ni siquiera se inmutó.
Seguía pegado a su computadora adelantando trabajo.
— Quizás su jugo de ciruelas favorito.
— Asentí con la cabeza y seguí mirando por la ventanilla, apreciando la vista.
— Vertió el líquido en un vaso de vidrio y me lo entregó junto a una servilleta, luego ajustó la almohada detrás de mi cabeza y sonrió.
—La señora Harper quiere que se sienta lo más cómoda posible, cualquier duda puede comunicarse directo con uno de sus asistentes personales.
— Susurró esperando una respuesta.
— No, gracias es muy amable por lo pronto sólo quiero ir a casa.
— Contesté y ella Asintió satisfecha.
Cuando se alejó tomé el teléfono para enviarle un texto a Dara, no me ha contestado las llamadas desde ayer en la noche pero un sonido proveniente de Harry me hizo darle toda mi atención..
Tenía el ceño fruncido y observaba la pantalla de su móvil.
— ¿El Grupo Harper's está fusionado con los Lennox cierto cariño?
¿Que tan fuerte es esa unión?.
— Su pregunta me tomó por sorpresa, a pesar de haber hablado antes sobre la mayoría de los convenios que llevaba mi familia con otros empresarios el nunca se había interesado por saber más sobre el tema.
— Si la alianza surgio del primer matrimonio de mi hermana Dara, luego tras su divorcio se mantuvo igual, años después mi tía Juno se casó con mi tío Astaroth el hijo mayor de Aitor Lennox y surgió una nueva alianza.
¿Por que lo preguntas?
— digo con curiosidad.
—Pues estoy viendo la noticia del CEO actual en Har&Lex
Balthazar Lennox..
posó desnudo para una revista de chismes y pienso que un consorcio tan reconocido cómo el que tiene tu familia se vería afectado por este tipo de noticias amarillistas, es un descaro por parte de ese ejecutivo lo que acaba de hacer.
— La expresión de sorpresa en mi cara se congelo por varios segundos.
Espera, ¿que? ¿Desnudo? ¿está hablando de la polla de Balthazar?
—¿Que?
—¿No lo has visto verdad? Está en todas partes... Es algo denigrante no puedo creer que tu hermana permita algo así.
—Se queja nuevamente.
Una sensación familiar invadió por completo mi cuerpo, habían pasado años que no pensaba en él de esa manera.
Di unos golpecitos suaves con los dedos sobre mi rodilla, me había dado cuenta de que probablemente nadie me respondió mis llamadas porqué están resolviendo este escándalo.
— Seguramente no se trata de Balthi..
—Frene mis palabras antes de pronunciar la manera cariñosa en que solía llamarlo.
— Balthazar.
— Afirmé.
—No creas en rumores de revistas tan mediocres.
— Contesté con seriedad sin dar mucho detalle.
— ¿¿Rumores?? Es en serio cariño.. vas a defender al idiota.
Justo hace unos minutos se filtró un vídeo reciente donde sale follando con sus manos a una mujer en la barra de un bar..
— apreté la mandíbula sólo de imaginarlo sabía que el era un Dios del sexo pero porqué tanto exhibicionismo y publicidad al respecto...
Acaso se estaba vendiendo a si mismo..
—Dices eso porqué el tipo viene siendo una especie de tío.
— Fruncí mi ceño de inmediato Balthazar mi tío si cómo no...pensé y me sonrojé de pensar en todo lo que alguna vez hicimos juntos.
—Algo.... Así.
—Terminé la conversación y el nuevamente coloca sus audífonos y se sumergió nuevamente en su trabajo.
Durante los últimos cinco minutos he estado en un conflicto interno entre ver o no la fulana foto, algo en mi interior me decía que era mejor no mirarla, pero la curiosidad era mucho más fuerte.
«¡Míralas! Vamos... Míralas ¡joder!»
Suspiré y disimuladamente busqué el enlace de la revista, con la idea de que tal vez podría tratarse de un montaje.
—La quijada se me cayó al suelo, apenas conseguí la foto.
— Balthazar estába asomado con la mitad de su cuerpo en un balcón a plena luz del día, con un habano entre su mano derecha y una sonrisa de satisfacción en los labios.
Sus ojos miraban directo a la cámara y era un depredador.. fácilmente podría desayunarse un par de chicas cómo yo antes de comenzar su día..
Su mirada era hambrienta y controladora cómo si estuviera diciendo:
«Ven aqui»
Todo en él, había cambiado por supuesto el primer cambio estába en los centímetros de su espalda, que era enorme y esa piel dorada cómo si tuviese un bronceado perfecto lo hacía resaltar.
La polla se le asomaba dura y erecta entre las piernas..
¡Joder! Era tan gruesa y enorme, mucho más a cómo la recordaba, el conjunto de venas junto a un rastro de vello le agregaba un toque varonil, casi podía sentir su sabor salado en el fondo de mi garganta...
Seguía siendo más grande que cualquier polla que haya visto antes o ahora.
«Cómo pude abarcar toda esa monstruosidad dentro de mí alguna vez.»
Agité mi cabeza varias veces con incrédulidad por lo que estába haciendo Balthazar o en realidad era que no podía dejar de mirar su polla sin pensar en sexo.
Deslicé mi dedo por la pantalla para ver otras imágenes en diferentes posiciones pero no logré ver nada más...
¡Joder! Sólo veía su maldita polla. Era impresionante de cualquier ángulo que la mirase.
Desde que lo conocí por primera vez las mujeres nunca parecían aburrirse de él, siempre cegadas por su gran atractivo, claro que yo me sentía satisfecha en ese momento sabiendo que el era todo mío a pesar de todas las diferencias que nos rodeaban.
Entonces, pensé en lo incómodo que sería encontrarme con él dentro de unos días, era un asunto que no había estudiado, quizás porqué no le di importancia y lo veía cómo algo que estaba en el pasado..
La foto de su polla hizo pedazos todas mis suposiciones...
¿Que demonios haría ahora?
No cerré la foto, si no que seguí buscando otras imágenes de él en la web.
Miré a Harry que ya se encontraba dormido, y eso no me detuvo.
Sabía que estaba mal me pasé todo lo que quedaba de vuelo mirando su polla durante más tiempo de lo que nunca me atrevería admitir...
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Nota Autor:
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