—Vamos, cariño —dijo Autumn con un codazo mientras me preparaba la mente—. No se te habría ocurrido follar con ellos si no fuera por nosotras. "Estoy de acuerdo", añadió Erika con una sonrisa diabólica. —Está bien. —Suspiré con resignación. ¡Trato hecho! Las dos chicas me sonrieron. ¡Esto va a ser divertido! *** Mientras planeábamos acostarnos con mis hermanos, finalmente aparecieron buscándome. Ambos se sorprendieron bastante al ver a Autumn y a Erika, pero sobre todo, se excitaron muchísimo al ver los diminutos bikinis que llevaba cada una de mis amigas. Mi hermano se quedó boquiabierto al verlos. Sabía que ambos estaban locos por mis amigos. James definitivamente tenía una predilección por Erika, algún fetiche asiático, y Max, que era un fanático de los pechos grandes, siempre se

