Atrapada por una venganza

Mi día normal

Elizabeth

Este día fue un completo desastre, empezando por el imbécil que frenó de improviso y ocasionó que yo colisionara con su auto, lo que hizo que mi buen día terminará, además no fue eso, sí no que el muy estúpido dijo que era mi culpa, "ja" yo Elizabeth Johnson

culpable de un accidente, «por díos», ahora lo que verdaderamente me preocupa es que desobedecí a mi padre y fui a dar condolencias a la familia Smith.

Se que no le va a gustar para nada, pero lo que más me llena de ira es que ni siquiera tuvieron la educación de recibirme, además que después de que me expuse lo mínimo era que su hija hubiera salido, pero no, ella no se dignó a no salir

—Señorita Elizabeth, su padre pide verla de inmediato, hace más de una hora pregunta por ti y ya no sé que más

decirle, está hecho una furia.

—Levanto mi vista y es Lauren, mi secretaria y mejor única amiga, bueno por así decir, las dos fuimos a la universidad juntas

y nos inscribimos en administración y aunque ella no terminó todos sus estudios por problemas económicos decidí ayudarla y por eso hoy es mi secretaria aparte de ser mi mejor amiga.

La verdad me agrada ya que en parte ella hace algo de lo que tanto le apasiona al igual que yo, y aunque muchas veces estamos en desacuerdo, pero así la adoro.

—Déjalo ya se le pasará, además hoy no ha sido un buen día, tuve un loco que por poco me mata y en su defensa alegó

que era mi culpa, ¿Lo puedes creer?

—Me levanto y camino por la oficina mientras Lauren me sigue con su libreta de apuntes.

—¿Y era guapo? —pregunta ella con su sonrisa llena de picardía.

—¡Cómo crees que me voy a fijar en un asesino en serie!, estaría loca si lo hago —respondo firmemente.

—No es para tanto, además según por lo que dices fuiste tú quien lo atropello y no él a ti, ¿Entonces por qué lo

llamas asesino en serie? —Alza una ceja y me mira fijamente a la espera de mi respuesta, dejó salir un resoplo y camino.

—Pues no hacía falta averiguar, pues el muy imbécil me llamó altanera y señora, cosa que no lo soy, pero ya cambiemos la página, me fastidia hablar de una persona insignificante que se atravesó en mi camino, ¿Dónde están los balances que te pedí de la empresa

Smith & asociados.

—Pues te cuento que me fue bastante difícil conseguir, el nuevo presidente de la empresa el señor James Smith puso

miles de, pero, pero si jefa lo logré —responde entusiasmada como si hubiese salvado al mundo de la destrucción, bueno no salvó al mundo, pero si va salvar mi mundo, ya que tenemos que estar preparados para la asociación con el nuevo presidente y dueño de "Smith & asociados". Pues no quiero que mi padre se vuelva a llevar otra sorpresa ya que fueron miles de dólares que nos robaron y

quiero estar preparada.

—¡Ven dámelos!, no entiendo como mi padre se fue a asociar con ellos cuando evidentemente quedaron en la quiebra, después de todo lo que hicieron. —Tomó los documentos y aunque es una excelente empresa y que puede ayudar a la nuestra con todo de la exportación, no niego que mi padre no midió los riesgos y más ahora que el antiguo dueño y presidente falleció.

—Pero el señor Harry solo habla de los beneficios. —Camina tras de mí, mientras yo hablo, pues todo esto me causa intriga, cuando mi padre se asoció la empresa era productiva y se expandía mundialmente, pero ahora no sé que esperar.

—La verdad me preocupa ya que, si con Oliver Smith tuvimos bastantes problemas por el dichoso desfalco, no me imagino que va ser con James que se ve que es un hombre bastante arrogante y prepotente.

—¿Y cómo te fue con la hija del señor Smith?, le diste las condolencias. —Mientras me siento, juego con la hoja que sostengo en mis manos, estoy algo alterada por lo sucedido hoy.

—La verdad no, ni siquiera la pude encontrar, me imagino que deben estar en lo del velatorio y exequias —respondo, mientras pongo mi vista de nuevo en el computador.

—Hay Elizabeth, menos mal y tú padre no se enteró que fuiste a esa casa o si no arde Troya, además como se te ocurrió ir sola, te hubieran hecho algo, imagínate a tu padre moriría de dolor.

—Hay Lauren tú y tu bocota, por lo visto no vas a cambiar.

Pero si en el fondo tiene toda la razón, con el señor Smith no quedamos en buena posición y me imagino que James Smith estaría dispuesto a todo.

—Bueno jefa, me retiro y no se olvide ir a ver a su padre, la está esperando y de seguro y usted no va a la

que cuelgan es a mí. —En cuestiones de dramas Lauren tiene una imaginación que

le envidio.

Dejen Que pase aproximadamente una hora y salgo de mi oficina para ir con mi padre, si es cierto pidió verme en su oficina hace mucho, pero hasta que no terminaré mi trabajo no voy con él, y él no lo puede decir nada ya que es el mismo me enseñó que primero el trabajo y después lo demás, tocó suavemente hasta que escucho su ronca y vieja voz indicándose que puedo pasar.