El turista de Evangeline

Querido turista te agradezco eternamente por enseñarme la cruda realidad del amor y por plasmar en mi alma cada página de este libro. Si algún día te preguntan por Evangeline, que el brillo de tu mirada me describa detalladamente. Es que fuiste para mí lo que es un barco para un marinero, me llevaste más lejos de lo que pude llegar a imaginar, conocí un mundo nuevo en el que tú y yo éramos plenamente felices, sí... felices, solo fuimos tú y yo navegando en un mar que lastimosamente nos obligó a tocar tierra firme. Y sin más que agregar a esta dedicatoria que me obliga a resignarme te pido: -Vuela y sé feliz aunque no sea yo la causa de tu sonrisa. PROLOGO En la confluencia del destino, la vida a veces nos lleva por caminos inesperados y nos muestra que el amor, como un río caprichoso, puede cambiar su curso en un abrir y cerrar de ojos. Esta es la historia de Evangeline, una joven de corazón impetuoso y alma soñadora, cuyo encuentro con el amor la llevó a las alturas de la felicidad y al abismo del desengaño. Con el susurro del viento entre las hojas y el aroma de las flores de primavera como testigos, Evangeline conoció a aquel hombre que encendió en su pecho la llama del amor más profundo un amor que creía tan único y real como el de un par de albatros. Era un hombre de mirada intensa y palabras suaves, cuya presencia llenaba su mundo de colores antes desconocidos.Pero como en todo cuento de amor, el destino guardaba sorpresas. Después de compartir risas, sueños y secretos bajo la luz de la luna, el hombre que Evangeline amaba se marchó, llevándose consigo una parte de su corazón. Fue una despedida amarga, como el ocaso de un día radiante que da paso a la oscuridad de la noche. Los años pasaron, y Evangeline construyó nuevos sueños sobre los cimientos de su pasado. La vida la llevó por senderos distintos, pero el eco de aquel primer amor resonaba en su memoria como una melodía inacabada y dolorosa. Hasta que un día, el destino, travieso como siempre, volvió a cruzar sus caminos. El reencuentro fue un torbellino de emociones encontradas. Entre miradas que buscaban respuestas y sonrisas que escondían temores, ambos se dieron una segunda oportunidad. Pero el tiempo no perdona, y con él, llegaron las sombras del pasado que acechaban en lo más profundo de sus corazones. Ella, ahora cautelosa y herida por la memoria de aquel primer amor roto, se encontró enfrentando una encrucijada similar. La ironía del destino se revelaba cruelmente, cuando el hombre que una vez la abandonó se veía ahora en la misma posición. Y así, el ciclo del amor se cerraba, como un nudo que se aprieta más con cada intento por deshacerlo.Esta es la historia de cómo el amor puede sanar y lastimar, cómo puede ser un faro en la tormenta y también un laberinto sin salida. Es la historia de Evangeline y su lucha por redescubrir el significado del perdón, la confianza y la redención en los brazos de aquel hombre que, como ella, también busca sanar las heridas del pasado. Adéntrate en estas páginas con el corazón abierto y la mente dispuesta a descubrir que, al final, el amor no siempre es perfecto, pero en su imperfección radica su belleza más profunda. Capitulo 1 Un día, nuestras vidas se rozaron apenas perceptiblemente, sin que ninguno de nosotros lo notara en ese momento. recuerdo perfectamente que me pidió salir para hablar y conocernos pero yo lo rechacé sin pensarlo, ¿Cómo podría saber que iba a amarlo tanto en un futuro? en ese momento me encontraba muy ocupada fingiendo ser alguien que realmente no era, todo para complacer a la persona que decía amarme. Llevaba una vida de hipocresía intentando hacer feliz a la sociedad, la cruel y oscura sociedad que nunca se ha interesado por tus deseos y por tu felicidad vivimos cegados tratando de encajar en un mundo lleno de falsedades, muchas veces mi único escape era cerrar los ojos y soñar con mi libertad entraba en mi precioso mundo de fantasías, imaginaba como hacía mis maletas y viajaba a un lugar desconocido totalmente sola, sin amigos y sin pasado, cambiaba mi nombre e iniciaba de nuevo; veía aquel lugar precioso aunque solo existiera en mi cabeza, habían arboles enormes que hacían sombra en las calles y sus preciosas ramas bailaban al compás del viento, observaba todo a mi alrededor y veía a las personas caminar pero notaba algo extraño y era que todos iban por la vida solo por que sí con la mirada hacia abajo y sus manos ocultas en los bolsillos, pensé: ¿Será que ellos viven de la misma forma que yo? ¿Porqué si éste lugar es tan hermoso no lo disfrutan? Algunos caminan apresurados para ir a trabajar y cumplir con lo que la sociedad impone pero... ¿Y sus vidas? ¿Acaso no notan que el tiempo pasa? Quisiera ayudar pero recuerdo mi realidad y soy igual que ellos, me negaba a abrir los ojos no podía seguir con mi triste vida así que intentaba sumergirme aún más en mis pensamientos, recorría aquel bonito lugar con la mente y me imaginaba rentando una habitación en un segundo piso, había una enorme ventana con vista hacia la calle que me encantaba por cierto por que me permitía seguir apreciando los hermosos árboles, el lugar era pequeño pero muy acogedor tenía una repisa llena de libros y una antigua radio a cassette en la que seguramente colocaría a diario las canciones de Joan Manuel Serrat y Facundo Cabral, era fantástico lamentablemente solo estaba soñando despierta. Soporté mi realidad por algunos meses hasta que decidí vivir la vida sin complicaciones y basada en mis propias reglas, decidí volver a ser yo y esa cruel realidad terminó muy rápido sin dudas fue el cierre de un mal ciclo. Yo, Evangeline era un alma libre, el barco de mi vida no tenía un puerto fijo, me encantaba respirar el aire fresco de lugares diferentes, viajar y viajar del lado de la ventanilla y soñar despierta mientras mi mirada se perdía en el paisaje y en las nubes que cambiaban de forma mientras me seguían. Yo veía al turista como un completo Don Juan que solo buscaba diversión, él era un chico muy agradable y divertido a mi por lo general me parecía atractivo pero no quería ser parte de su juego y sin saber lo mucho que lo amaría en el futuro, yo lo rechacé nuevamente. En esa etapa de mi vida yo creía ser feliz y solo pensaba en planificar viajes para huir de la gente y de las responsabilidades, tenía miedo de perder mi preciada libertad pero eso estaba a punto de cambiar; mi vida cambiaría de una manera extraordinaria en un abrir y cerrar de ojos. Ya había pasado algo de tiempo desde mi conversación con el turista pero confieso que siempre que me cruzaba con él en la calle mi corazón se sobresaltaba demasiado y me sentía muy intimidada por él, ya algo estaba sucediendo y de manera muy acelerada, normalmente era yo la que intimidaba a las personas, era algo fría y me encantaba mucho llamar la atención, puedo asegurar que era muy egocéntrica y nada me importaba más que yo pero había algo que acababa con mi fortaleza o mejor dicho había alguien y ese alguien sin dudas era él, no sé qué pasaba y no sé por qué me sentía tan atraída por un desconocido pero estaba pasando y en el fondo no quería que terminara. Un día fui a visitar a mi mejor amiga "Ema" como de costumbre, para hablar de todas las cosas que nos estaban sucediendo en los últimos días y sí, ciertamente hablamos de todo lo que pasó por nuestras cabezas pero en ningún momento mencioné a mi turista , jamás mencioné que tenía unos ojos preciosos que reflejaban toda la ternura del mundo; además su sonrisa era única y ni loca contaría que su mirada me dejaba paralizada cuando se chocaba con la mía . Dios mío pero ¿que rayos me está pasando? ¿porque pienso tanto en él? y ¿porque sonrío cada vez que lo recuerdo? Me siento demasiado tonta. No entiendo lo que me pasa además me prometí que nunca me enamoraría. Mi amiga no paraba de hablar y de contarme sus cosas pero mi mente estaba en otro lado. Estoy perdida y todo por un extraño, ¡un simple turista! ¿pero que está pasando por mi cabeza?. Mientras yo batallaba una y otra vez con mis estúpidos pensamientos Ema seguía contándome detalladamente sobre ese viaje a Polonia que pensaba hacer en unos meses, ella estaba muy triste porque no quería irse aun, además no nos veríamos por un largo tiempo y jamás nos habíamos separado, siempre estuvimos unidas desde niñas, era mi compañera de juegos y de vida , ese tema me entristecía mucho y aparte estaba muy distraída. Aunque estaba allí físicamente mi cabeza se encontraba en otro lugar, en otro planeta. Yo escuchaba lo que ella me decía mientras le ayudaba a organizar su ropa y veo entre sus cosas una franela que me llama mucho la atención, era azul y tenía un dibujo que me atraía mucho, resalto que no me gusta para nada el color azul pero por alguna razón esa prenda me atrajo mucho, la ví observé detalladamente el dibujo y lo guardé claramente en mi memoria fotográfica, era un corazón rojo, estaba roto, sangraba, tenía alas y también habían rosas y otros detalles que me daban curiosidad. Luego de ver el dibujo la coloqué nuevamente donde estaba pero Ema la tomó, la puso en mis manos y me dijo: úsala para dormir a mí me la regaló un amigo con el que trabajaba pero realmente no la utilizo quiero que la tengas de recuerdo, por favor úsala solo para dormir porque fue un regalo y no quiero que te la vean (exclamó mientras me veía con cara de inseguridad). Le dije que no habría ningún problema, de inmediato entró curiosidad en mí y le pregunté quien era su amigo, no me había dicho nada al respecto y claro ella comenzó a describirlo y no puede ser la terrible coincidencia de que su amigo era mi turista. ¡No puede ser! cuando escuché que pronunció su nombre me quedé petrificada, no lo podía creer. Yo recuerdo que solo le dije si, lo conozco, una vez me invitó a salir pero yo no acepté y de vez en cuando nos escribimos, Aunque realmente ha pasado muchísimo tiempo desde la última vez que hablamos, también lo he visto algunas veces en la calle. Ella me dio una charla súper larga y me dijo que lo mejor sería que mantuviera mi distancia, que él era del tipo de hombres que no tenía ojos para una sola mujer y me dijo que había hecho bien en rechazar su propuesta, pero de alguna manera me sentí retada y sentí que yo era diferente al resto. ¿Porqué no cambiaría por mi? ¡Quiero intentarlo! (Pensé) "Como siempre, nuestro corazón está tomando decisiones que no le corresponden". Después de un rato me fui a casa, me acosté a pensar y a ver el dibujo de la franela, no sé por qué razón el dibujo llamaba tanto mi atención, la guardé y decidí tomar un baño para salir a visitar a mi madre. Eran aproximadamente las 2 de la tarde, el día estaba muy caluroso pero quería salir y necesitaba despejar mi mente, ya estaba cansada de vivir en este lugar aunque no había pasado mucho desde mi última mudanza así era yo, era totalmente nómada mis pies por alguna razón no podían pisar por tanto tiempo la misma tierra porque ya quería desaparecer a nuevos lugares y olvidarme de todas las rutinas existentes.