Por primera vi al padre de Bea. Resultaba ser un tipo alto, de rasgos fuertes y con los mismo ojos color chocolates de su hija, pero más envejecidos y menos brillosos y sobretodo, se podía notar que estaba envuelto en el rencor. Tenía tanto dolor en su mirada que parecía miserable y patético y verlo con aquella mujer con aires de grandeza me hizo sentir pena por Bea y su hermana.
Justo ahora no puedo juzgar esa forma que se sentía al odiar a Carrie, era evidente que sus padre eran los culpables de todo, ellos se había encargado de sembrar una semilla de odio en su hija.
-Hola-su voz es muy suave al saludarlos. pensé que la madre correría y abrazaría a su hija pero no hizo nada solo la miro con desdén desde un punto.
-¿feliz por lo que hicieses, Beatriz? ahora por culpa de tus mentiras metiste en problemas a un chico respetable ¿no tienes vergüenza-dice su padre fríamente.
Bea solo baja la cara, se niega a mirarlos y único que hace es apretar mi mano con mucha fuerza.
-yo no miento, padre. él..-
-el nada-Le interrumpe- nunca un muchacho como ese que está acostumbrado recibir una buena educación sería incapaz de ponerte un dedo encima.
-no, es así papá. El trato de abusar de mi-su voz sube una octava y lo mira profundamente pero se que tiembla aunque no lo demuestra.
La sala tiene una especie de energía extraña y pesada que apenas me permite pensar, yo solo quería concentrarme y tratar de ignorar la voz que me gritaba que le rompiera la cara aquel viejo.
-claro que no, de seguro tu tenías que andar de puta como siempre-grito tan fuerte que podía sentir la tierra temblar ante su enojo.
Aquellas palabras verdaderamente la lastimaban, yo solo quería partirle la cara a ese maldito viejo por no escucharla.
-¿por qué no me crees? el trato de abusar de mi tal y como lo hizo aquella vez, el día en que...-
-cierra la boca. No la menciones, no quiero que ni se te ocurra ensuciar tu memoria. tu fuiste la culpable, si no fuera por tu irresponsabilidad ella estuviera viva-grito- Carrie tenía que vivir, no tu pero no podemos arreglar las cosas ¿o si? por desgracia eres nuestra única heredera y tienes responsabilidades con la familia-se acercó a ella con tal rapidez que no vi venir lo que hacía después.
Halo su cabello y la obligó arrastrarse. mi impulso básico fue el conectarle un derechazo en el ojo tomándolo también.
-agradezca que es el padre de Bea o también ya estuviera lleno de golpes-dije entre dientes viendo como el ponía una expresión del miedo y entendí que era un cobarde que se aprovechaba de las criaturas débiles.
-¿como te atreves? voy a poner tu trasero en la cárcel. de seguro tu fuiste el que le distes esa idea descabellada ¿no es cierto? lo único que querían era sacar dinero. dime cuál es tu precio, yo te daré lo que sea con tal de que la dejes en paz, ella no es para alguien como tu después de todo fue criada como una New Castle, gaste miles de dólares para que se casara con un hombre de alta sociedad y no para qué se revuelque con cualquiera-
-un momento-Sam sale junto a Vivi-no le permito que hable así de Bea en mi casa ¿me oye usted? así que les voy agradecer que se larguen o llamo a la policía- sus pesadas botas hicieron un ruido siniestro. Jake, Alex y Dante se detuvieron a mitad de la escalera y retuvieron como toda la respiración.
- ¿esto es lo que tienes por amigos Beatriz? trate de darte una oportunidad, pero veo que o la quieres, desde hoy está muerta.
- ¡Papá! ¡no! ¡espera! -dice aterrada-yo...-pero se queda ahí sin moverse-yo no quise que Carrie muriera, yo soy capaz de dar mi vida por la suya. aquella noche después de que Tommy se aprovechara de mí, discutí con ella porque...
-no la culpes, deja de ser inmadura. tu siempre odiaste a tu hermana, nunca pudiste llegarles a sus talones.
-lárguense-Sam dio un paso y se plantó frente al hombre que claramente se dio la vuelta junto a su esposa.
-Todo fue culpa de Carrie-empieza a gritar-ella pensó que sería divertido que me acostara con Harry, ella me lo confeso-dijo demasiado tarde, el Auto se había marchado-
-Carrie dijo que planeó los encuentros porque sentía que estaba sola. quería que también tuviera lo que ella tenía, los amigos, los viajes , el amor de mis padres y no vio lo que sucedió. no entendía mi forma de ser.
-oh por dios-Vivi estalla en los brazos de Sam sintiéndose culpable.
-yo nunca pedí eso, ellos me obligaron. hable con Carrie, quise desahogarme, pero me dijo que no fuera infantil, que aquello era solo un juego. yo me puse furiosa y acelere, aunque no quería, pero deseaba estar en casa y no mirarle la cara hasta que se atravesó el otro auto y evitando un choque me desvié y salí volando por una zanja-dijo delante de todos mientras casi de rodillas al suelo y empezaba arrancarse los cabellos de su cabeza-yo amo a mi hermana pero también la odio.
-no sigas Bea-le digo tomándola en mis brazos-ya fue sufriente, te haces daño-digo pero en realidad me hacía daño a mí. en verdad yo era el verdadero hijo de puta en esta historia.
la casa se sentía turbia por sus lágrimas. Los chicos solo mirar al suelo confundidos, preocupados y avergonzados, los cuatros sabíamos lo que habíamos hecho.
La tome desde el suelo. ahora una niña indefensa y frágil estaba delante de mí y era mucho más terrible que la fría y sin sentimientos.
-no fue mi culpa-me decía a la vez que la llevaba en brazos hacia su habitación.
la coloco en la cama con ternura y me acuesto a su lado, ella necesitaba un consuelo y estaba dispuesto hacerlo. como pude la envolví en mis brazos y deje que llorara todas las lágrimas que había contenido durante años de sufrimiento y silencio.
El cuerpo de Bea se sentía frágil y tan claro como el cristal. Esta era la primera vez que podía ver sus sentimientos claramente. Me quería golpear en la cara mientras leía ese maldito diario y las estúpidas cosas que dije sobre ella.
La Bea desdichada solo se recuesta en la cama, dejo que use mi pecho para que descanse su cabeza y sus lágrimas, ella necesitaba ahora y más que nunca q alguien para la cuidara.
Degenerado. Basura. Canalla.
Cerdo bastardo de pronto no era tan mal nombre para alguien como yo.
La había juzgado, la creí un monstruo y de la peor calaña solo para darme cuenta de que ella había sufrido mucho.
Sus dedos se enganchan con mucha fuerza en mi camiseta y solo toma tiempo para escucharla hablar. Limpio sus lágrimas con mi pulgar y estoy tan tentado en besarla y protegerla entre mis brazos para que no derramara ni una lagrima pues lo peor que podría pasar con una chica como ella que siempre lucia fría e insufrible era aquello, que estuviera rota e indefensa como una niña pequeña.
-El me sigue odiando-otro par de lágrimas saladas se escurren sin poder evitarlo.
-no pienses más en eso, ese sujeto es un imbécil, Bea-beso su cabello y lo acaricio suavemente hasta que su mano busca la mía y se entrelaza.
-sí, pero es mi maldito padre ¿porque nunca fui suficiente para él?-respiro profundo ante aquella pregunta-Para los dos. Yo solo fui creada como una donadora de sangre para mi hermana y nada más. Papá solo buscaba el único bien de Carrie y podía entenderlo hasta cierto punto, después de todo era su hija, ella heredaría toda la fortuna, todos los hijos mayores New Castle nacían con ese beneficio, a Vivi igual-su cuerpo se aleja lentamente.
Siento un vacío en mi interior por la distancia.
Ambos nos quedamos en absoluto silencio, no me atrevo hablar, solo escucho atentamente su respiración y la mía en aquella oscuridad fría. La cama rechina por sus movimientos y camina hacia una esquina de su habitación.
-Sabes Neil. No quiero hablar más de eso-su voz se siente rígida, siento su dolor y solo quiero acercarme pero soy tan cobarde que me quedo sin palabras esperando a que diga lo que tiene que decir-pero gracias por todo-gira rápidamente y me regala una sonrisa.
Siento que una fuerza mágica me golpea, puede ser la culpa, puede ser lo malditamente hermosa que se veía en ese momento mientras su rostro en plena oscuridad se iluminaba con la más bella de las sonrisas que jamás había visto.
Comprendí ahí que ella era humana, que incluso hasta la persona más dura, más fuerte podría ser frágil de vez en cuando y no sé porque pero me sentía afortunado por compartir con ella esa otra parte que nadie conocía.
-¿te gustaría ver una película conmigo? Prometo que no será nada de animé o algo por el estilo.
-lo que tu pongas está bien- respondo luego de una larga pausa.
De algún modo creo que me deje llevar en todo esto, pero que más daba, ya no podía retroceder y ahora tenía que seguir adelante con lo que sucedía.
era la primera vez que vi una película en la cama de una chica sin tocarla y no es que no tuviera tentando en abalanzarse sobre ella precipitadamente, pero entendía que no era el momento, Bea necesitaba un espacio así que solo me deje llevar y vi sin decir palabra alguna El Exorcista junto a ella.
Cuando todo termino la vi dormida por primera vez, ella parecía inocente y tranquila con sus ojos cerrados. Sin querer evitarlo paso una mano en su cabeza y solo me retiro en silencio.
Bajo tranquilamente hacia nuestro sótano. Tenía ganas de tocar la batería y dejar que todo esto se fuera con la música. Nuestro lugar de practica era una bodega pequeña y calurosa en donde apenas si cabían los equipos perfectamente y un sofá n***o con una pequeña nevera que estaba surtida con cerveza.
Tomo asiento y miro el cuarto gris, solo una bombilla me da claridad a mi mente y dejo que todo se vaya con el goleo de los platillos a mi propio ritmo, quería que cada palabra, cada golpe, cada palabra amarga se esfumaran con la furia de la música para siempre.
No se cuanto tiempo dure pero toque hasta que los brazos me dolieron, hasta que cada gota de sudor empapó mi camisa y me sentía fatigado. Con mis músculos rígidos y una boca ardiente pensé en tomar algo.
San entra a la habitación y va directo hacia el refrigerador pequeño. Noto que esta serio, se que va a hablar y se que no me va a gustar. Me lanza una lata fría de cerveza, la destapo y solo bebo hasta el fondo la bebida amarga para estabilizarle.
¿vienes hablar?-pregunto muy tranquilo. Me desplomo en el suelo sin camisa y cierro los ojos.
-Tu sabes que yo nunca me he metido en tu vida, Neil-el mueble rechino con su peso, su voz era casi neutra y baja, esto no solo era una charla entre amigos, aquí había algo más.
-no tienes que ser sentimental, Sam. Esas cosas conmigo no van, solo dime lo que tienes que decir y listo.
-¿qué pasa contigo y Bea?
.¿cómo de qué pasa? no hay nada-le digo a él y a mí mismo como una advertencia.
-para ser nada la defendiste muy bien de ese loco y de sus padres y además fuiste al único que dejo entrar en el baño cuando llegaste, son muchas… coincidencias como tu evidente cara de celos cuando hablaba con Erick en el bar o la manera en que la miras y también debería mencionar que cierto estúpido se le escapo hace unas noches atrás sobre un acuerdo de sexo o algo así.
-le voy a patear el trasero a Alex cuando salga de aquí, sabes-me prometí a mí mismo-no tienes que preocuparte Sam, no hay nada solo teníamos una especie de acuerdo entre nosotros, eso es todo.
-no creo que sea todo. no soy tonto Neil. puedo advertirte que si le haces algo a esa chica no solo Vivi te castraría, yo también te partiría la cara pues me cae muy bien y es casi la hermana de la mujer que amo. Mierda-deja salir-se que no es mi problema y que ambos son adultos, pero esos juegos entre ustedes no creo que salga nada bueno de ellos. La estas usando.
-aquí la que me usa es Bea, ella solo está conmigo para quitarse sus problemas de encima. por eso te digo que no tienes por qué sentirte tenso en esta situación, pararemos cuando ella lo pida-quise sonar despreocupado pero no estaba tan seguro escuchándolo decir de mi boca.
-¿por que Bea? explícame es, ella ni siquiera es de tu tipo de chica.
-precisamente por eso. si fuera mi tipo de chica ya estuviera aburrido de ella. no hace preguntas, le da igual con quien salgo o lo que hago, es perfecta porque me odia.
-pero ese odio no es contra ti, Neil. ella es así por lo que le paso hace tiempo y no se ha podido recuperar, no solo fue que ese tipo la intentara violar, también el novio de su hermana hizo lo mismo y desde ese día creo ese comportamiento en donde los aborrece a todos, a mí ni siquiera me deja acercarme mucho pero tú, eres diferente.
-quizás sea porque no la presiono. Bea siempre tiene el control de todo y sabe que no busco amor, ella tampoco lo quiere.
-Como tu amigo es mi deber decir que esto apesta y si no paran ahora mismo, alguno de ustedes saldrá perdiendo.
-nadie tiene por que perder-y trato de creérmelo, nadie tiene que salir lastimado.
Esto era un trato de palabra sobre como seria nuestro juego. Pero por alguna razón sus palabra me produjeron un miedo interno, yo no quería lastimarla y mucho menos jugar con ella y tampoco quería enamorarme de Bea porque después de todo las mujeres siempre hacen lo que quieran contigo cuando les entregas tu corazón y él era un ejemplo de ello, siempre se deja mandar por su chica y calla mientras ella grita y luego esta mi padre. él era un buen hombre, alguien de confianza que amaba mucho a Violet y le daba lo mejor y ella solo le pago de la peor forma.