Capítulo 7
Como toda una tonta creí que Eiden lo dejaría estar, no me di cuenta de lo equivocada que estaba hasta que tocaron mi puerta y abrí para encontrarme con él allí de pie
- creo que debes dejar de salir corriendo siempre que estas hablando conmigo - hizo una pausa que aprovechó para hacerme retroceder y entrar en mi habitación - ¿o es que acaso te pongo nerviosa?
- para nada señor Brown - crucé las manos frente a mi cuerpo - es simplemente que me tomo por sorpresa su llegada, y como pudo ver estaba en una situación incomoda
- no puedo ver que tiene de malo lo que hacía, solo se estaba probando un vestido - a simple vista el parece más retraído y serio de lo que es en realidad y en momentos como este me alegro de que así sea
- se que no es el momento ni tampoco el tipo de ropa que se utiliza en el traba
- por mi la puede usar cuando quiera, no tengo problemas con versela puesta
- por favor no bromee, estoy muy avergonzada - sonrió
- ya deja de armar una tormenta por una tontería, en verdad me gustó verle el vestido puesto. Le queda muy bonito
- gracias, es muy amable
- no lo digo por amabilidad, estoy siendo sincero - aclaro y también corto el tema - vine a preguntarte cuanto te debo de la ropa de Nataly - negué, no la compré con la intención de que el me devolviera el dinero luego
- es un regalo
- eso no es necesario - seria tonta si creo que es necesario
- ya se que no es necesario, es solo algo que quiero hacer por ella
- si es así entonces te lo agradezco - sonrei
- no hay problema señor Brown -camino hasta donde me encontraba, me puse rígida como una columna, el acomodo un mechón de mi obscuro pelo tras mi oreja
- es Eiden, odio que me llamen señor Brown
- ¿y como lo llaman sus subordinados en la empresa? - le pregunté, necesito hablar para no saltarle encima - no tengo idea, pero de lo que si estoy seguro es que no deben tenerme un bonito apodo, todos me temen o me tienen mala voluntad, no se llega a donde estoy yo tratando bien a las personas - voy a tener que buscarlo en internet, se que es rico, o se. Es obvio por el modo en que vive, lo que no se es cuanto o como lo logró
- a mi me trata bien, ya se que no llevo mucho tiempo aquí pero no tengo de que quejarme
- no todos tienen la misma suerte, tu tienes algo que me impide ser un imbécil como lo soy con los demás, debe ser tu aire infantil - ya se que no es un insulto, sin embargo que un hombre como Eiden te diga que pareces infantil duele hasta la médula
- ya se, soy muy infantil - di un paso atrás - me veo del mismo modo. Eso me quedó claro en la entrevista, pero como ya aclare ese día soy una adulta así que por favor tratarme como tal
- ¿te molestaste por lo que dije? - me esta mirando fijo, es obvio que me moleste, no se siquiera para que se toma el tiempo de hacer una pregunta tan tonta
- para nada, ya se que es así. No me asombra que para usted no sea de la misma manera, pero puede estar tranquilo que cuido a su hija de la mejor manera en que alguien va a hacerlo - no quiero que se cuestione mi trabajo
- eso ya lo se, y también se que te molestaste - volvió a acortar la distancia que nos separaba - ¿es que quieres que te vea como a una mujer? - la verdad es que si, sin embargo soy consciente de que no puedo dar esa respuesta, por Nataly y también por mí, no puedo permitirme perder mi empleo solo porque mi jefe sea súper sexy, esas cosas pasan
- no, además lo que yo quiera no tiene importancia. Tu opinión es una y nada puede cambiarla - se alejo y camino a la puerta
- quizás ese vestido pueda - dijo y salió, agradecí que así fuera, respire profundo y corrí a quitarme el vestido
- no se porque siempre me estoy metiendo en problemas, es como si lo hiciera a propósito. Soy un total desastre - me dije a mi misma.
Logre mantenerme con vida ele resto del día y al día siguiente sin crear mas problemas, el viernes en la mañana espere a Nataly en el recibidor y para mi sorpresa apareció con uno de los vestidos que había comprado para ella
- ya creí que no te los pondrías - le dije
- no pensé hacerlo, y estoy segura de que me queda muy mal - respondió intentando mirarse
- te queda bien, eso sin contar que considero que ese es el tipo de ropa que debe usar una niña de tu edad
- ¿que tiene de malo mi ropa? - se puso a la defensiva
- no estoy diciendo que tenga nada de malo, no lo tiene. Simplemente esta te queda mejor - la tome de la mano y se dejo, por primera vez en casi una semana que llevo aquí - vamos a desayunar para después ir al doctor
- ¿mi padre no va a ir con nosotras? - quiso saber, y hasta yo quisiera saber. Después del incidente del vestido apenas lo he visto, y aunque dijo que iría con nosotras ya casi es hora de marcharnos y aun no aparece
- no lo se - respondí con sinceridad
- deberías saberlo - respondió Eiden entrando en el comedor - debe saber señorita D'santo que cuando digo que voy a hacer algo lo cumplo - se sentó junto a Nataly - y le dije que iría a la consulta de mi hija - acarició su pelo - sientese a desayunar con nosotros - me pidió
- no es necesario señor Brown - se que me pidió que le dijera su nombre, sin embargo el acaba de utilizar mi apellido así que hice lo mismo - ya desayune en la cocina
- a partir de ahora comes en esta mesa conmigo y con nataly - fue una clara orden que nos dejo a su hija y a mi desconcertadas
- comprendo - respondí de inmediato
- ¿si comprendiste que haces de pie? - es algo sumamente extraño como da las órdenes de una manera tan natural que no te deja opción más que obedecer sin discutir, así que me senté y los vi comer puesto que en verdad había desayunado. Eiden no deja de mirarme y me está poniendo nerviosa, por suerte Nataly termino y se puso en pie, o pensé que por suerte, porque de inmediato me di cuenta de que no era el caso
- voy a lavar mis dientes, después de eso podemos irnos - y así se fue dejándome sola con su padre y mis nervios
- no tienes que poner esa cara - dijo Eiden, no se de lo que habla
- ¿que cara? - le pregunté para que aclarara
- esa que tienes en este momento, una de terror total como si yo comiera personas - explico y puso un trozo de fruta en su boca, esa es una fruta muy afortunada
- no creo que usted coma personas - se levanto de su asiento, hice lo mismo, camino paso por al lado mio y se detuvo tras de mi, se pego a mi oído
- no se confíe, a veces me gusta comer personas - sonrió y se fue, yo me quede como una tonta petrificada en el centro del comedor.
Salí al jardín, James esta parado frente al auto esperando por nosotros
- ¿creí que habías desayunado con nosotros? - dijo o preguntó no estoy del todo segura
- y lo hice
- es que te vi en la mesa con el patrón - él se toma atribuciones que no le tocan, y a pesar de que hace unos días creí haberlo puesto en su lugar, al parecer nones el caso
- ¿eso tiene algo que ver contigo? - le pregunté en una forma más que predispuesta, me apretó el brazo muy fuerte y tiro de mi en su dirección
- si, te dije que me gustas - no pude responder porque Eiden apareció
- ¿que sucede aquí? - pregunto y de inmediato James soltó mi brazo
- no sucede nada - me miró - ¿verdad? - yo asentí y ayude a Nataly a subirse en el auto, lo que escuche después me dejó de piedra - nosotros estamos comenzando una relación - mire hacia atrás y Eiden me está mirando, no se lo que está pensando porque su expresión está completamente en blanco.
- non sabía - le respondió a James - felicidades, espero que les vaya bien - cuando regrese del hospital el me va a escuchar, no he comenzado y después de esto no voy a comenzar una relación con él.