Alistair —Pasemos al siguiente punto del orden del día —dijo Kendrick—: los números de reclutamiento. Las universidades van a graduar a sus próximas clases en unos meses. Necesitamos empezar a contactarlas para atraer nuevos empleados. —Tenemos personal asignado para asistir a ferias de empleo en sus alma maters y hablar con posibles candidatos —informó Martha—. También deberíamos poder acomodar el aumento en el número de internos que solicitaste, Alistair. Además, marketing ya envió los nuevos folletos y pósters para que la gente los lleve consigo. —Sería mucho más fácil reclutar si Alistair no despidiera a todos —dijo Samuel. —Ashley tenía que irse —le recordé. —Tristan es un idiota —resopló mi hermano. —Y como tal, debemos protegerlo. Ashley probablemente intentaba atraparlo para

