[MILAN, ITALIA]
[BENICIO]
Maletas listas, pasajes en mano, corazones latiendo a mil por hora y el reloj nuevamente en nuestra contra.
"Deben darse prisa, Sayed y la familia de Selene la están buscando por todas partes." Ese fue el mensaje que recibí hace menos de una hora de Nicole y sé que debemos salir lo más pronto posible de aquí, pero no quiero preocuparla, no quiero que Selene pueda llegar a arrepentirse de todo esto.
― Ghali, es mejor que nos demos prisa.― Le digo mientras ella se termina de arreglar el cabello.
― Sí, en un momento estoy lista, solo debo cerrar la maleta ―. Y se ve frente al espejo una última vez.
― Te ves preciosa cariño.― Digo abrazándola por la cintura y dejo un beso en su cuello ―Iré llevando las cosas al auto, cerrare tu maleta por ti.― Digo intentando apresurar nuestra huida.
Selene se voltea de inmediato y comienza a revisar la habitación, pareciera como si no quisiera dejar ningún rastro de que ambos estuvimos aquí. Después sale detrás de mí y hace lo mismo en la sala y finalmente salimos del piso dejando todo atrás. Bajamos en el elevador y damos un último vistazo al edificio donde pasamos la noche, sabemos que si todo sale bien debemos agradecerle a Nicole con creces.
― ¿Estás lista para el siguiente paso en este escape? ― le digo a ella mientras la noto entre emocionada y nerviosa.
― Contigo siempre estaré lista para lo que sea.― Responde firme y sé que el sentimiento es mutuo.
― Entonces démonos prisa que tenemos un vuelo que tomar y todavía varias horas de viaje ― le doy un beso en la mano y después ambos subimos al auto para dirigirnos directo al aeropuerto.
Manejo por unos minutos por la ciudad hasta tomar la carretera y después de un rato llegamos al aeropuerto de Milán. Estaciono el automóvil justo en el lugar donde me indicaron que lo dejara y bajo inmediatamente las maletas para así entrar al edificio. Selene parece un poco intranquila, incluso trata de taparse un poco la cara y para poder tranquilizarla, me paro de inmediato y sacó de mi maleta uno de sus velos y se lo doy. Ella me ve extrañada.
― Lo dejaste una vez en mi piso ghali, y lo guardé para dártelo luego ― le digo sonriente
― Ese ha sido un gran detalle.― Comenta a pesar de sus nervios.
― Todo estará bien amor, te lo prometo ― le digo mientras veo cómo se cubre y me sonríe.
Caminamos hacia el interior del aeropuerto y no puedo dejar de mirar la manera en la que ella se comporta, me atrevería a decir que está paranoica y se la pasa mirando a su alrededor como si alguien estuviese siguiéndonos. ―Ghali.― Le llamo una vez más para que nos acerquemos al counter y así hacer el check in.
Ella lo hace de inmediato y cuando la chica le pide su pasaporte e identificación los muestra con un poco de miedo, sin embargo, se tranquiliza cuando la chica sonríe y comienza a imprimir los pases de abordar sin ningún problema.
― Ecco la tua carta d'imbarco (Aquí tiene el pase de abordar).― Dice la mujer mientras nos entrega los pases de abordar.
― Grazie mille, dov'è la porta di imbarco? ( Muchas gracias, ¿Dónde se encuentra la puerta de abordar?) ― Le pregunta ella y aquí estoy yo mirándole con una cara de idiota que debe ser digna de una fotografía.
― ¿Hablas italiano?― Pregunto, pero ella parece ignorarme.
― Girare a destra e poi sinistra alla fine della sala.( Gire a la derecha y después a la izquierda al final del corredor ― Explica la mujer mientras señala el corredor.
― Grazie buona giornata. (Gracias, buen día) ― Responde mi novia y ahora si me mira a los ojos.
― ¿Entonces? ¿Hablas italiano?― Vuelvo a preguntar mientras caminamos ya sin nuestro equipaje.
― Hablo 5 idiomas Benicio, Italiano es uno de ellos. ― contesta orgullosa.
¿Ha dicho 5 idiomas o mi subconsciente comienza a fallarme? Me pregunto por dentro e intento mantener la compostura. ―¿5 idiomas?― Es lo único que puedo preguntar.
― Si, creas o no estudié idiomas en la Sorbona de París, hablo Inglés, Español, Francés, Italiano y Mandarín, aunque en el último no soy muy buena aún ― y sonríe al ver mi cara que supongo es épica.
― Vaya, eres toda una caja de sorpresas.― Digo aun anonadado por su nueva revelación.
― No tienes idea ― me dice mientras me guiñe el ojo y de pronto como por arte de magia toda la paranoia quedó atrás y eso la hace increíblemente más sexy.
Seguimos caminando hacia el área de seguridad para seguir los protocolos y revisiones necesarias para luego entrar a la sala que da paso al área de embarque donde esta el gate que nos han indicado rodeado de tiendas y locales de comida. ―¿Quieres algo antes de subir al avión?― Le preguntó mientras le tomo de la mano.
― ¿Qué te parece si mientras esperamos nos tomamos algo en aquel bar? Tengo ganas de una bebida fresca, hace mucho calor ― me dice un poco más tranquila, supongo porque aquí ya no hay marcha atrás o Sayed ya no puede pasar.
― Vale ¿puedes ir escogiendo una mesa? Yo necesito ir a hacer una llamada ― miento.
― Si, claro, no te preocupes, mientras no me dejes aquí sola.― Bromea.
― Eso nunca, dejar a una novia que habla 5 idiomas será imposible ― le bromeo y antes de irme le doy un beso.