Era una pregunta razonable; todas nuestras hijas eran vírgenes hasta su Festival la semana pasada, pero dependiendo de cómo fue criada Abigail, podría ser virgen todavía o haber tenido relaciones sexuales con cualquier cantidad de hombres o chicos en los últimos años. La investigación histórica dejó claro que, dejadas a su suerte y sin la estructura del Festival, la mayoría de las niñas en Estados Unidos solían volverse sexualmente activas mucho antes que nuestras hijas actuales. Abigail asintió. —Sí —dijo en voz baja, levantando los dedos—, pero sólo dos veces. —De acuerdo, excelente —la animó Martin con voz suave. Satisfecho de que no nos encargáramos de desflorarla, lo que simplificaba enormemente su participación en las actividades de la tarde, le dio un par de golpecitos suaves en e

