LA OBSESIÓN DEL MAGNATE

 Miami — EEUU 20 de enero 2018  Luna Cárter Me preparo en mi habitación a toda velocidad, como estoy acostumbrada ¡mi vida es un caos con tantas obligaciones!, debo ir a la universidad ¡ya casi termino!, Mi licenciatura en administración de empresas, estoy en mi último año, y apenas tengo 22 años,  además me encuentro en una academia de Ballet en la que soy una de las  bailarinas principales...  Me visto con mis jean viejos y grandes una sudadera cualquiera, mi tenis ¡tengo los pies destrozados a causa de mi disciplina! ¡Pero soy feliz! Me ato en cabello, me encanta ¡pero el clima en Miami es una locura! No podría llevarlo de otra forma, y me coloco mis infaltables anteojos, no tengo problemas de vista, pero me gusta este look.  Bajo y me siento en la mesa a desayunar con mis papás, y mi hermano ¡está feliz! Porque hoy va a jugar con el equipo de la escuela futbol, ¡todos vamos apoyarlo! Incluso mi padre que casi nunca tiene tiempo para nosotros gracias a su trabajo, pero de allí vivimos…  Mi madre nos sirve el desayuno panqueques de arándano — ¿No pudiste hacer otra cosa?—Se queja mi padre, últimamente ¡no hay algo que haga mi mama que a él le parezca bien!  — ¿Te sirvo unas tostadas? —Pregunta ella triste.  —Déjalo así, ¿ya te arreglaste? Se va ha hacer tarde. —Contesta él con expresión cansada en la cara ¡casi nunca sonríe!  —Si. —Responde mi mamá sentándose en la mesa para comer.  — ¿Vas a ir así?, al menos péinate, te va a ver la gente ¡eres tan descuidada contigo misma! —Le regaña Y nosotros solo observamos callados, el maltrato que sufre todos los días mi mamá ¿Por qué lo permite? Me pregunto a diario esta situación me da un bajón de ánimos ¡Jamás permitiré que un hombre me trate de esa forma!, le pregunte ¿Por qué no lo confronta? Y ella responde: yo lo amo. Yo ruedo los ojos mientras como y mi hermano deja de sonreír, comemos y vamos en el auto con mi papá. Después que avanzamos una cuadra se detiene.  —Daniels ¿A dónde vas a pie? —Le pregunta a un amigo de la familia  —Se me daño el auto, voy al trabajo. —  —Queda de camino a donde vamos, súbete adelante. — Le ordena a su amigo que mira con pena, como mi madre se baja en silencio y se monta detrás con nosotros, sin pronunciar una palabra.  Una lágrima sale de sus ojos, estoy acostumbrada a ver a mi mama cabizbaja y triste No entiendo ¿Por qué no hace cosas por ella?, es decir estudio en una buena universidad ¿Qué hace de sirvienta sin sueldo en la casa? ¡Me da rabia! Que no quiera salir de esa situación ¿Qué lleva a una mujer a mendigar el amor de un hombre? Y sobre todo sabiendo que este dejo de quererte hace mucho…si es que la quiso alguna vez. Llegamos a la escuela y nos bajamos en silencio, observo a mi madre, y si comparada con las otras mujeres ella luce triste y gris, ¡nunca en casa hay abundancia!, y ella es la que menos dinero gasta en ella, no recuerdo que haya ido a una peluquería ¡en años! arreglarse, las uñas ¡un día sin trapear! ¿Cuándo compro ropa la última vez?  —Deberías comenzar a trabajar en algo ¿eres licenciada en educación no? —  — ¿Quién va a contratar una vieja inútil como yo?—Me responde con una sonrisa que no llega a sus ojos ¡tengo ganas de llorar! ¡No sé cómo ayudar a mi mamá!. Comienza el partido, y todos los niños corren con energía, el sol brilla y nos dedicamos desde la barra a apoyar al equipo de mi hermano, es de los más pequeños ¡pero hace su mayos esfuerzo! Corre y al minuto 22 luce fatigado, los demás niño conservan la misma energía, comienza a caminar con lentitud hacia donde estamos nosotros, él entrenador grita —A tu lugar. —Mientras vemos horrorizados a mi hermano caer desmayado cerca de nosotros. El partido se termina en ese momento, mientras es llevado de emergencia al hospital más cercano, mi padre sube a la ambulancia con él, mi mamá no reacciona, la metemos en el auto de mi papá, mientras yo manejo a toda velocidad siguiendo la ambulancia. Llegamos al hospital y vemos que lo llevan corriendo hacia adentro en una camilla Mi papá se baja desesperado, pasando una mano por su cara—Todo es tu culpa. —Empuja a mi mamá ante mi mirada atónita — ¿Por qué es culpa de mamá? ¿Qué tiene? — Indago molesta —Ella es débil, por eso ustedes son defectuosos, salieron a ella. —Dice señalándola con rabia, mientras ella cae al suelo llorando. —Es lo único que sabe hacer llorar. —La insulta, viéndola con asco — ¿Por qué me haces esto?— Y en este momento pregunta en el suelo, mientras yo hago todo por levantarla. —Tú no y tus hijos no valen la pena, son solo unos perdedores. —Nos dijo quitándome las llaves de la mano. — ¿No te vas a quedar, para saber de Adrien?—Le pregunto molesta —Tengo que trabajar ¿acaso yo soy doctor?—Me responde descarado mientras se da la vuelta y nosotros entramos al hospital a la sala de espera —Familiares de Adrien Cárter. — —Aquí. —Digo yo mientras mi madre sigue sentada sin reaccionar ¡esta en shock! —Lamento darles esta noticia, pero el pequeño sufrió un infarto.— Mi madre nos ve y se desmaya de la impresión, corro a socorrerla mientras no puedo procesar toda la noticia. Desde el suelo abrazado a mi mamá le pregunto a la enfermera, con la voz quebrada —— ¿Se va a morir?.—Pregunto asustada —No puedo asegurarte nada pequeña, haremos lo que esté en nuestras manos por salvarlo, ¡tienes que ser fuerte! Si se salva de esta va a necesitar una cirugía, el doctor que lo está atendiendo te explicará los detalles cuando salga. —Me dice tocando con cariño mi cabeza. Unos enfermeros me ayudan a subir a mi mama a una camilla, en un instante tu vida puede caer sin previo aviso ¡como un castillo de naipes!, yo solo lloro ¿Qué puedo hacer para cambiar esta situación? Quisiera esto fuese una pesadilla y que al despertar todo sea como horas atrás. Las horas pasan con lentitud, una tras otra ya mi mamá despertó, y no he tenido noticias de mi hermano, el hospital general se encuentra colapsado, el personal no se da abasto para atender las emergencias, Tengo miedo que esta falta de capacidad pueda afectar el desempeño de los médicos y enfermeras que dan atención a los pacientes… mi hermano puede ser afectado, si tengo la oportunidad me lo llevare al mejor lugar. Tengo uno ahorros guardado, que eran para un viaje a París, cuando terminara mis estudios, tal vez eso me alcance pienso mientras observo a mi mamá que se quedó viendo a la nada… Aproximadamente cinco horas después del evento sale un doctor visiblemente agotado, —Familiares de Adrien Carter. — —Nosotras. — Respondo con rapidez —El pequeño sufrió un infarto, logramos salvarle la vida, pero necesita una cirugía costosa para sobrevivir. — —No importa el costo hare lo que sea necesario por él. —Le digo con seguridad El doctor nos ve con lástima y dice  —les voy a ser sincero, en Rusia hay una clínica especializada en el tratamiento de la enfermedad, si tienen los recursos, ese es lugar ideal para tratar su caso. — — Entonces nos iremos a Rusia. — Exclamo yo limpiando mis lágrimas Mi hermano tuvo dos días hospitalizado y mi padre nunca fue a visitarnos, cuando voy a recoger las cosas para el viaje, me doy cuenta de porque, mi padre ya fue por sus cosas, nos abandono sin dar explicación alguna, mi mama se quedo en el hospital de allí saldremos directo al aeropuerto. No tengo tiempo para decepcionarme, la vida de mi hermano está en juego, y mi padre acaba de demostrar el material del que está hecho, a la primera dificultad salió corriendo como la rata que es, no quisiera odiarlo ¡pero en este instante es imposible! Recojo rápidamente todo en dos maletas y me apresuro a ir al hospital— ¿Y tu padre?— Pregunta mi mamá viendo hacia atrás — No puede acompañarnos, está trabajando .— Le digo no tengo fuerzas para lidiar, con otra crisis de ella — No responde mis llamadas desde ayer. —Me informa yo ruedo los ojos ¡que poco amor propio tiene! Llevan a mi hermano al aeropuerto en una ambulancia, subimos a un avión pequeño en un vuelo privado, debe ser así para garantizar la vida de mi hermano, viajan con mi nuestra familia un doctor y un paramédico ¡porque podría presentarse una emergencia!, lo que me preocupa es que solo costear este viaje se lleva una gran tajada de mis ahorros ¿Qué puedo hacer para financiar el resto? me pregunto sin siquiera imaginar que este solo es el inicio de mis pesadillas.