Capítulo 3.

1383 Words
Entré a la habitación de Noah,ya estaba despierto,en su silla de ruedas en el balcón.Me acerqué a él y se percató de mí presencia ya que volteó un poco el rostro hacia el costado para verme. -Buenos días,te traje tu desayuno-dije y él sonrió. -Oh,gracias.No tenías que molestarte,podría haber bajado yo-murmuró acompañado de una sonrisa de costado. -No es molestia,es mi trabajo-respondí y me senté frente a él.Acerqué la taza de café a su boca y lo ayudé a beber un par de tragos-¿Está muy caliente, o muy frío? -No,está perfecto-respondió y me miró curioso-.¿Cómo dormiste? Me imagino que los primeros días en una casa desconocida no es muy cómodo. Dejé la taza sobre la bandeja y suspiré. -De hecho dormí bien,si es cierto que no es lo mismo que estar en tu casa.Pero,me acostumbraré-me encogí de hombros restándole importancia-es muy linda la vista hacia la naturaleza aquí. -Si,lo es.Por eso elegí esta habitación,me siento relajado en este lugar. -¿Y alguna vez sales de la casa? -No mucho,de hecho me la paso aquí encerrado.No me gusta salir mucho desde...el accidente-hizo una mueca de disgusto y sonreí. -¿Qué te parece si salimos un rato? Me miró con una ceja elevada. -¿A dónde? Me encogí de hombros. -Por ahí,a dar alguna vueltas en la ciudad o algo.Si imagino que debe ser algo aburrido estar todo el tiempo en el mismo lugar,te sientes atrapado. -Esta bien,salgamos un rato. Sonreí y terminé de ayudarlo a desayunar.Luego llamamos a dos de los guardaespaldas de Noah para que lo ayudaran a bajar las escaleras,ellos insistieron en querer acompañarnos a la salida,aunque yo sí estuve de acuerdo Noah se los prohibió rotundamente.No comprendí porque no quería que vayan,pero no dije nada y lo llevé un rato a un parque. Algunas personas nos miraban y murmuraban cosas,pero no les dimos importancia y continuamos como si nada.También fuimos por un helado y estuvimos recorriendo un largo rato hasta que el sol comenzó a bajar entonces nos devolvimos hacia la casa o eso intentamos.No sabía exactamente en donde quedaba la mansión,así que intentando caminar por todas partes nos perdimos. Si,señoras y señores.¡Nos perdimos! Rayos. -¡¿Cómo no vas a saber en donde rayos queda tu casa?!-chillé histérica y sorprendida a la misma vez. -No lo sé,te dije que hace mucho no salgo de la casa.Además nos mudamos hace como un año y medio-respondió rápidamente. Me pasé las manos por mi cabello,frustrada. -Debiste dejar que tus guardaespaldas nos acompañarán. -Tú fuiste la que caminó de más,no me culpes a mí-se defendió y lo miré mal. -¿Por lo menos estamos en una zona segura? Porque la verdad es que no lo parece. -De hecho sino me equivoco aquí es donde asaltaron a mi madre una vez que venía hablando por teléfono-dijo como si nada,lo miré con los ojos como plato. Tenía que ser mentira.¿Cómo se le ocurre decirme algo así en este momento? Ay,madre santísima. -Juro que si viene alguien te dejaré y correré por mi vida-gruñí algo asustada y miré hacia todos lados. -Claro,déjame aquí.Yo estaré bien-dijo y me guiñó un ojo con diversión. -No es divertido,Noah.Ni siquiera hay buena señal,tiene que ser mentira-susurré y levanté mi móvil hacia el cielo,escuché la risa del pelinegro y lo miré-¿que es lo gracioso? -Que es broma eso de que habían asaltado a mi madre aquí.Este lugar es seguro,nunca escuché nada sobre robos o algo así. Apreté los dientes y guardé mi móvil en mi Jean. -Claro,se me olvidó que estoy en territorio de ricos-solté y sonrió-pero ya,en serio,¿que haremos? Estoy que moriré del miedo si llega a oscurecer del todo. -Relájate,sólo continuemos este camino,doblamos a la derecha,luego hacia la izquierda y listo.Llegamos. -¿Todo el tiempo lo supiste? -Si,solo quería ver tu reacción y fue muy divertida. -Eres un...ahgg,Noah Baker-solté entre dientes-nunca más te sacaré de la casa y si lo hago será con tus guardaespaldas.Que sea lugar de rico no quiere decir que no sean unos psicópatas o asesinos. Noah no dijo nada y seguí sus indicaciones,así hasta llegar a la mansión.Habían dos autos afuera cuando llegamos.Beth se acercó a paso rápido apenas nos vió y suspiró de alivio. -Señorita Hillary,no puede sacar al joven sin protección.Es peligroso-espetó algo enojada Beth. -Lo siento yo quise... -Para la próxima me informas y te autorizaré la salida. -De verdad una discul... -Sus padres me lo dejaron a cargo a mi,tú solo lo cuidas,no te da el derecho a... -¡Ya,cierra la maldita boca vieja loca!-la interrumpió Noah enojado,lo miré sorprendida por su reacción y luego a Beth,ella lo miraba entre asustada y sorprendida-no la dejas terminar de hablar.Yo le pedí que me sacara un rato y sin los guardaespaldas,además no soy un maldito niño el cual necesite pedir permiso.Tú solo eres la sirvienta,nada más. -Joven yo... -Vamos Hillary-murmuró el pelinegro y lo seguí a paso rápido ya que se fue adelante a rápida velocidad.Entramos a la sala y se quedó ahí,yo me quedé callada sin decir nada-lo siento,yo...no soy así nunca,es solo que...me molesta que me traten como un niño que no puede tomar deciciones solo.Estoy inválido,no soy un enfermo mental-volteó la silla hacia mi y me miró-de verdad discúlpame si te asusté por mi reacción. -Ah,no,no,no te preocupes-me apresuré a responder y asintió-¿Quieres subir a la habitación o...comer algo? -Me iré a duchar,llama a mis guardaespaldas,por favor-pidió y asentí.Fui por ellos enseguida,lo subieron a la habitación y lo dejaron en el baño,con ayuda le quitaron la ropa,quedando solo en bóxer y lo metieron a la tina la cual ya estaba lista para él. -Estaremos fuera de la habitación para cuando termine de ducharse-informó uno de los guardaespaldas y se fueron,apenas lo hicieron me puse nerviosa. Tenía que bañarlo,yo. Tragué saliva y me volteé hacia Noah. Okey.No se si será porque que estaba nerviosa o que,pero tenía un cuerpazo hecho por los dioses.¿Cómo podía ser posible eso? Es decir,él estaba...en silla de ruedas. También tenía varios tatuajes alrededor del cuerpo.Entre ellos un arma en uno de los hombros. Me quedé contemplándolo hasta que él se aclaró la garganta,ahí me di cuenta de lo que estaba haciendo y salí de mi trance. Que vergüenza.Él sabía que había quedado como una estúpida por su cuerpo. Seguro pensará que soy una pervertida.Lo miré y tenía una expresión entre divertida y sensual. -Por genética siempre fui de tener buen cuerpo,además de que en la terapia me obligan a hacer ejercicios,obviamente yo no sentía nada,pero los terapeutas me ayudan y también como muy saludable.Por si la duda no te deja dormir-me guiñó un ojo y abrí la boca para decir algo pero la cerré enseguida-no te preocupes,no eres la primera en quedar así. De todas formas no podía estar tan bien.Pero bueno,yo que podía saber de eso. -Entonces a ti no te para ni que estés en una silla de ruedas para estar bien físicamente-solté y se rió. -La verdad es que no.Pero,¿me bañaras? Es que el agua se comenzará a enfriar. -Ah,si.Lo siento-susurré apenada,tomé una esponja de baño y se la comencé a pasar por su cuerpo con cuidado,cuando pasé por su pecho me miró y yo a él-¿sucede algo? -Es algo...vergonzoso que una chica me bañe ¿sabes? -Si quieres puedo...no sé,llamar a Beth. -No,No.Tú estás bien,simplemente dije,un comentario nada más.Tú continúa y deja de ponerte tan nerviosa,no hago nada para que lo estés. -No me pongo nada cómoda si me recuerdas todo el tiempo que estoy nerviosa. -Pero,¿por qué lo estás? Es decir no es como si...no sé,te estuviera tocando o algo. La esponja se me cayó al agua y cerré los ojos por unos segundos.Cuando lo abrí sentí que lo tenía un poco más cerca que antes,con esa típica sonrisa burlona en su cara.Tomé la esponja de nuevo y terminé de bañarlo sin mirarlo a los ojos. Llamé a los guardaespaldas para que lo llevarán a la habitación,pero primero lo ayudarían a ponerse la ropa.Salí del baño y lo esperé sentada en la cama.Cuando salió ya estaba vestido,tenía su pijama al parecer,completamente negra.Lo ayudaron a sentarse en la cama y luego se fueron. -¿Necesitas algo?-le pregunté mientras ponía algunas almohadas detrás de su cabeza para que estuviera más cómodo. -No estoy bien,puedes ir a dormir o ducharte. -Esta bien.Buenas noches. -Buenas noches. Salí de la habitación y entré a la mía,no tuve tiempo de ir a buscarme ropa a casa hoy,así que me tendré que poner la pijama que me habían dado. Mañana iré temprano antes de que se levanten.
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