Izan y Amelie decidieron ir a bañarse ya que él había hecho la reservación para cenar en el restaurante Le Jules Verne dentro de la Torre Eiffel. Amelie estaba muy emocionada, no sabía como Izan le hacía para tener tanta influencia, parecía como si no le costará nada obtener las cosas. Cuando ella quiso reservar le dijeron que había filas de hasta dos semanas para los tours. El auto de Izan se detuvo frente a la casa de los Davis.
—Paso por ti en una hora, ¿está bien?
Amelie asintió sonriente. Justo cuando Amelie había abierto la puerta para salir del auto Izan la regresó del brazo plantándole un beso en los labios.
—¡Izan! ¡Mi abuela esta en casa!
Izan esbozó una sonrisita.
—Algún día se tendrá que enterar, además, por ahí me enteré que no se llevan bien con tu madre, tal vez ten
