LILLY Si no estuviera acostumbrada a esto, diría que tuve una pésima mañana, un comienzo del dia asqueroso y poco convencional, ya que de nuevo había ido a meter mi cabeza al inodoro para regresar la lasaña de la cena, los pasteles de leche con caramelo de fresa y que comí en el postre, y la bolsa de Doritos que nos comimos al llegar a casa mientras mirábamos una película en Netflix sobre unos chicos que viajan al espacio; pero como ya estoy acostumbrada a las mañanas así, mejor diré que fue una mañana común. Cuando desperté, Ethan ya no estaba, puesto que tenía que entrar por la mañana a primera hora, a más tardar a las 6:00 AM al hospital y aunque insistí en poner una alarma para mí y así poder hacerle el desayuno, insistió en que me quedara en la cama. Según él porque me miraba hermo

