Prólogo
13 años antes...
El chico deja salir el humo del cigarro, todavía recuerda los sucesos de unas horas antes, los gritos de su colega, el sonido de las balas y el enorme acantilado por el que arrojaron los cuerpos.
Cinco cuerpos fueron arrojados por ese sitio, nadie vio ni escucho nada.
Inhala el olor que el tabaco produce, escucha que la puerta se abre y como alguien se queda parado a su lado.
-No fue tu culpa-dice la voz del Lobo.
-Ya lo sé-dice sin ninguna pena-. Fue tuya.
-Ambos sabemos que el León era una porquería que más bien debía ser una Hiena.
-Eso también lo sé-el Dragón gira su vista a su colega que le tiende una cerveza.
-¿Quieres?-no duda en tomarla.
Bebe el contenido helado de la botella, el calor del sitio donde están es sofocante y no les deja muchas opciones de bebida, sin embargo, no por eso dejan de tomar el alcohol más conocido en el mundo.
-Escorpión nos matará si descubre lo que pasó-dice el Dragón mientras su colega se sienta a su lado.
-No digo sí no dices nada.
Los ojos del Dragón lo miran de reojo, mientras deja salir el humo que sus pulmones contuvieron.
-Bueno... Me parece que es un trato.
El Lobo asiente.
Ambos regresan la vista al amanecer, el bello sol se va ocultado tras los enormes riscos de la montaña.
El Lobo se debate entre decirle o no, después de todo es como la décima vez que le hace eso.
-Cobra está en la recámara de Buitre.
El corazón del Dragón se estruja en su pecho. No es la primera vez que sucede y tampoco será la última vez que lo hace. Es la cuarta novia que tiene en lo que va de su vida y... Es la que más lo ha lastimado por no decir que la única.
-Algún día encontraré al amor de mi vida y dejaré a esa linda puta.
Duran hablando un rato hasta que los llama su jefe. Ambos van pensando en que dirán para salvarse el pellejo entre ellos, Águila está adentro de la sala donde los esperan.
Escorpión mira a sus dos subordinados más importantes, uno que lo considera como su hijo y el otro que es algo importante, pero que no llega a tanto.
-Encontramos indicios de que León no murió en fuego cruzado.
Ambos se miran y asienten.
-Bien... León estaba pasando información a Oveja Negra.
-No era para que lo mataran...
Dragón se quita la pena que no tiene y enciende un cigarro para fumar adentro de la sala.
-Sabes que... He hecho mucho dentro de esta mierda-dice tranquilo-, y ya es tiempo de que me retire... Saldré de esta mafia de mierda y no harás nada para ello, por qué así como hice crecer tu imperio puedo tumbarlo. Así que es todo de mi parte.
Se levanta del asiento en el que está y se encamina a la puerta.
-Nos vemos Escorpión... Ya no me verás dentro de estás puertas.
Y ese fue el final del Dragón dentro de la mafia Animal.
Llega a su habitación y Cobra ya está lista para que le dé lo que recibió en la habitación de Buitre. Dragón sonríe y se acerca a ella, la toma de la cintura para cargarla y sacarla de recámara.
-¡Esto se acabó! No me interesa tener una puta por novia.
-Dragón... No soy una...
-¿Te recuerdo en que camas has estado?
-Pero...
-Buitre, la de Escorpión, la de León, Zorro, Gato, Oso, Araña... De las que yo sé y la verdad ya me cansé de que otros hagan lo que yo debo hacer.
Cierra la puerta siendo consciente de que varios vieron lo que sucedió.
Alista su maleta y sale del que era su hogar, se sube a su auto para ver a Axel seguirlo.
-Hace años que herede la empresa de mi abuela... Sólo esperaba que te salieras.
Ambos manejan al hogar de Bastián. Al llegar su madre es la primera en abrazar a su hijo, su padre le sigue.
Dejó toda su vida atrás, las drogas el alcohol... Todo.
Se dedicó a los estudios, dónde conoció a sus grandes amigos.
Jason Jefferson.
Bastián Bianchi.
Christopher Leonardi, su gran amigo de siempre. E infancia.
Se graduó de en Comercio Internacional y en Mercadotecnia. Se volvió el tiburón de los negocios, uno de los más grande en Italia, y en parte de otros países, se convirtió en un hombre legal. Pero la promesa que le hizo a Axel le dio la vuelta.
Axel enamoro a su hermana, bueno, ella se ilusiono a pesar de que Axel le dijo que no lo hiciera.
Años después de que Axel no agarra una sumisa él se mantuvo alejado haciendo su trabajo, conociendo a Harry Jackson, que se convirtió en parte de su grupo de amigos.
Axel conoció a su secretaria gracias a la búsqueda de su nueva secretaria.
Sara Jackson.
Una chica que mendigo amor de Ricardo Castell, ambos se conocieron cuando tenían quince años, se volvieron novios un año después, y en esos años juntos él la lastimó de varias formas hasta que por fin... Sara encontró lo que estaba buscando.
Y es donde el juego comenzó.
El León la estaba cuidando desde lejos, él nunca la dejo a pesar del pasado, en cuanto se enteró de que Sara ya no estaba con Ricardo, él fue a buscarla pero encontró al Dragón, y al Lobo, junto a su hermosa Sara... Era tarde para él...
"Nunca es tarde para cambiar las cosas" se recordó, y así fue en busca de venganza.
Se vengaría de todos los que lo lastimaron.
Le quitaría a Sara al Dragón y vengaría lo que una vez le hicieron.
Sólo debía esperar.