—Se le llama amnesia —comento el medico.
Me había pasado las siguientes tres horas en pruebas consecutivas, análisis tras análisis.
—Su memoria a corto plazo no está dañada, recordara esto pero a largo plazo está dañada—comentó el doctor, mi hermana me agarraba la mano con fuerza.
—¿Y por que ese momento?—preguntó mi hermana.
El medico me miro.
—No se, no voy a mentir por mucho que sepa de la mente hay muchas otras cosas que no conozco, cosas que no se como van y no puedo ayudar del todo, se que su mente por algo decidió pararse en ese momento—comentó el médico y me miró—¿Pasó algo en ese día?—preguntó.
Miré a mi hermana.
—Tuvimos un accidente de coche y te rompiste la pierna, estuviste seis meses sin poder andar y fue cuando decidiste dejar el fútbol por la música—explico mi hermana.
—¿Tuvimos un accidente?—le pregunté molesto y ella me miró.
—Ahora no es el momento de ponerse modo gruñón—me dejo claro y la mire demasiado impresionado—Escucha al doctor—me ordenó y la mire demasiado sorprendido.
—No fuerce el contar cosas, puede saturarse y sufrir un caos, vaya tranquilo—comentó el doctor—Recuperará la memoria poco a poco, no debe alterarse, debe tomar todo calmado, hacer una vida normal y dejar que todo llegue—me dijo el médico.
—Se lo agradezco pero le pediría intimidad para poder aclarar unas cosas con mi hermana—le dije.
El médico se fue en silencio y mire a Halsey.
—Mama—le ordené.
Ella me miro molesta.
—No le paso nada en el accidente, es que no tuvo mucho misterio, te rompiste una pierna, supera lo—me dijo molesta y la mire.
—Deje el fútbol—me queje y mi hermana me miró.
—No te hagas el bebé llorón, eras malisimo, nunca te sacaban—me dejo claro mi hermana y la mire sorprendido, demasiado incrédulo de que mi hermana estuviera diciendo esto, que nadie me mal entienda, mi hermana es la persona más sincera que conozco, no suele callarse ante nada por lo que si decía esto era por algo—No te gustaba, jugabas por papá y sabes que realmente tu vida es la música, tener mal el pie solo te ayudo a darte cuenta—me dijo.
Mire a mi hermana demasiado molesto, no comprendía porque se estaba poniendo las cosas tan complicadas, demasiado, no voy a negar que mi hermana era una persona complicada con la que lidiar, pero ella y yo, por nuestra relación nunca habíamos tenido problemas, a la única persona que respetaba o con la que menos se pasaba, pero se ve que ahora se iba tomar unas libertades.
—No te pases—le deje claro.
Mi hermana me miró.
—Amas la música, Shawn, nunca has estado tan feliz y te lo juro, sonríes a diario y eres tú quien escribe muchas de las canciones, sonríes tocando la guitarra, y se que no es posible, o que no te lo quieres creer pero es así—comentó mi hermana.
La mire.
—Lo que no entiendo es como pase de odiar tener una banda o dedicarme a eso cuando no he visto provecho a ello—comente.
Mi hermana se quedó en silencio, me miró sin saber qué decir o qué hacer.
—No se que te paso en la cabeza mientras estabas en cama, pero de un día a otro dijiste que dejabas el fútbol—me dijo y le mire sorprendido—No diste muchas explicaciones, dijiste que ese tiempo sin entrenar era el mejor de tu vida, y ese tiempo que estuviste con tu guitarra y a solas tuviste una revelación—comentó.
Cerré mis ojos, mi padre era una gran persona, amaba el futbol y deseaba dedicarse a ello, pero una lesión le llevo a no poder hacer nada, a quedarse quieto, a quedarse en un lugar solos sin saber que hacer, las cosas eran complicadas, sobre todo cuando tenías todo bien planeado, cuando toda tu vida dependía de ello, mi padre se quedo demasiado mal, y tuvo que rehacer todo sin saber que hacer, por eso se dedico dedicarse a ser banquero y a matarme a mi con la idea de tener que dedicarme a ser futbolista, puede que yo pasara por lo mismo, que tuviera un enorme problema por lo que tuve que decidir y seguir mi corazón era mucho más sencillo que todo lo demás, amaba la música pero no se si como para dedicarme a ello pero esta claro que algo paso que me hizo decidir.
—Revelación o no, la vida es una mierda—comente.
Mi hermana me miro.
—Lo es pero te aseguro que las cosas son demasiados importantes, como para que ahora te nos rindas—me dijo y la mire sin entender nada.
—¿A que te refieres?—le pregunte.
Mi hermana me miro.
—Nos ha costado mucho hacerlos un hueco en la música y a ti enamorarte—comento mi hermana.
La mire.
—¿Enamorarme?—le pregunte—¿De la chica de la voz?—le pregunte.
Me miro.
—Algo así—me dijo.
Le mire sin entender nada, sin saber que hacer o que decir, tenía demasiadas dudas, no entendía que estaba pasando, no entendía lo que estaba pasando, pero tenía una cosa clara, que iba a encontrar a la chica de la voz, puede que no fuera esa chica de la que antes me enamore, eso no me importaba, lo que me importaba eran mis recuerdos y las cosas que deseaba ahora, encontrar a la chica de la voz, y pedirle que se quede conmigo, porque esa voz es demasiado mágica, se que mi hermana tiene otros planes pero aunque le deje y le diga si a todo, tengo mi plan secreto que voy a llevar a cavo, con su ayuda o sin ella.