LOS DI PIETRO

capitulo 7

El despertador suena a las 08:00 y despierto de golpe, por alguna razón he dormido bien, bueno supongo que fue por la descarga de adrenalina en el bosque y después en mi cuarto.

No pienso mucho en eso, me levanto y me pongo el uniforme de saco y falda, me pongo las medias a juego para el uniforme, me pongo los zapatos y con corbata en mano me dispongo a salir.

Cuando abro la puerta Nate esta encantadoramente inclinado hacia mi puerta

–Hola-

Me quita la corbata de la mano y me roza ligeramente la mano cuando lo hace

–Hola-

carraspeo para ver si se me deshace el nudo que tengo en la garganta

–Vengo a ponerte la corbata en ese bonito cuello tuyo- me sonrojo

–Espera- y me meto por mi mochila, me la cuelgo al hombro y salgo del cuarto.

-Ven déjame anudarte la corbata-

me toma por la cintura y me atrae hacia a él y me anuda la corbata y me da un casto beso y yo me pongo más que roja, me extiende la mano y yo la tomo, bajamos las escaleras, tomados de la mano.

- ¿Un té? - el asiente y vamos a la cocina tomados de la mano, cuando entramos Lily está haciendo huevos revueltos, cuando nos ve ella da saltitos y grita como niña

–Sabia que terminarían juntos- Nate la fulmina con la mirada y ella palidece…

-Preparare el té- el asiente y me suelta, yo me dirijo a la nevera y tomo dos naranjas, las corto en rodajas y las pongo en la tetera, le pongo agua y la pongo al fuego.

Mientras esperamos, en un incómodo silencio, veo como Lily le sonríe de oreja a oreja a Nate

- ¿Así que ya empezaron a salir? –

Nos quedamos viendo y guardamos silencio, ¿Estamos saliendo?, solo nos dimos un beso en mi cuarto, vuelvo a ver a Nate que sopesa que contestar cuando por fin va a decir algo, la tetera comenzó a sonar el té está listo

- ¿Quieres un poco Lily? –

-Por favor cuñada-

ella sonríe con malicia a Nate y yo enrojezco de nuevo, yo sirvo el té y lo tomamos en un incómodo silencio. Llevo tres días aquí y ya me enrollé con alguien ¿En qué diablos estoy pensando?

De pronto se siente como la tención aumenta, yo volteo y Nathan está el en umbral de la cocina, entra se sirve un poco de café en un termo y sale sin decir nada, después entra Estefan

–Mmm, Té-

-¿Quieres un poco? -

-si no es mucha molestia- me paro y le sirvo un poco de té

- ¿Galletas? - me pregunta mientras abre un tarro, yo asiento y volvemos a estar en silencio.

Nate y yo somos los primeros en terminar

–Ya nos vamos- me toma de la mano, Estefan frunce el ceño y salimos.

Nos dirigimos hacia al edificio principal, en donde se imparten las clases, de camino veo que todos nos ven, lo sabía es porque Nate me tiene tomada de la mano, deben de estar pensando que soy una chica fácil oh una caza fortunas, pero él los ignora.

-Nate...-

-Si, dime-

-Creo que esto no está bien- Detuvimos el andar

- ¿A qué te refieres? –

-A lo que sea que está pasando entre tú y yo- Nate frunció el ceño

– Acabo de llegar hace tres días, y siento que no es correcto- Ay que difícil es decir esto

– Anoche nos besamos y caí en la cuenta de que apenas te conozco y eso no habla bien de mi ni de ti- Nate solo asiente y soltó mi mano.

-Si es así como te sientes, está bien, te acompaño a tu primera clase- Caminamos juntos hacia el edificio principal, en un incómodo silencio.

Entramos y el me deja en un salón hasta el fondo del primer piso, en la puerta dice literatura, Ginna da esta clase, en el salón hay unos cuantos alumnos y la chica que está en nuestra casa Elena creo que se llama.

Nate me arrincona a un lado de la puerta, me toma de la cintura y comienza a hablar

- Tienes razón, tuve que detenerme a pensar en eso…-

–Obstruyes el paso - Soltó Nathan lo dice de una manera muy hostil, Nate le sonríe de una manera glacial y yo me encojo al sentir esa tención.

Nate se voltea hacia mí, me toma del mentón y me dice muy cerca de mis labios

–Buena suerte Bella-

me da un beso en la mejilla, Nathan entra al salón y su cuerpo destila rabia, yo me quedo pasmada y aun no entro al salón, veo como entran otros tres alumnos y yo sigo a fuera

- ¿Nerviosa? -

me pregunta Daniel, niego con la cabeza y se frota el mentón pensativo

– Ya se, te saltaras la clase- niego con la cabeza

–Entonces entremos-

me toma del brazo y entra conmigo al salón, las butacas están acomodadas en forma de circulo, tomo una butaca de atrás como acostumbro, Nathan está frente de mí y me ve con rabia ¿Qué le pasa? Entra Ginna y anota en el pizarrón, vuelvo a ver a Nathan

–Idiota-

me dice solo moviendo los labios, Pero qué demonios…

-El tema de esta semana será literatura inglesa- dice Ginna y todos ponen atención.

-Esta semana veremos a la escritora inglesa Jane Austen- y nos pone tres libros a cada uno

–Tienen que leer por lo menos uno de estos tres en esta semana-

los libros que nos dio son “Emma” “la abadía de Northanger” y “Sentido y sensibilidad”, tal vez termine dos.

La clase pasa rápido, yo lo siento así ya que me gusta mucho leer, algo me dice que la literatura inglesa le gusta a Ginna ya que habla con entusiasmo, de vez en cuando hago rayones en mi libreta cuando llego a aburrirme, no sé porque, pero tengo la sensación de ser observada.

Levante la mirada de la bonita flor que estaba dibujando, cuando alzo la mirada veo a Nathan que ve con unos ojos oscuros, pero aun así sus ojos se ven hermosos, me ve muy serio y yo le saco la lengua y por fortuna sonríe y niega con la cabeza como si no diera crédito a mi gesto tan infantil.

El día pasa rápido y cuando terminan las clases estoy muerta de hambre. Espero que Nate no tomara de mala manera lo que le dije esta mañana

Salgo del salón donde fue mi última clase; latín y lo más raro es que Lily está en la misma clase.

-Vamos a comer algo por favor- le digo a Lily tomándola del brazo

–Si, yo también estoy muerta de hambre vamos-

caminamos juntas, de pronto siento sobre mis hombros un brazo y veo que es Nate, le sonrió tímidamente y me da un tierno beso, en la frente, lo que me hace pensar que no se tomó a mal lo que dije.

Lily pega un grito y veo que está colgada del cuello de un chico alto, un poco más bajo que Nate, es de piel morena, ojos cafés y cabello oscuro, cuando Lily lo suelta veo que es guapo a su manera claro.

-Frann, él es James-

-Hola- pero me sorprende cuando me da un beso en la mejilla

–James es mi novio- Dice Lily con un tono de boba.

-James, ella es Franccesca, mi chica-

abro los ojos de golpe al escuchar eso volteo a ver Nate y me dedica esa hermosa sonrisa de lado y me guiña el ojo.

Los cuatro caminamos hacia la cafetería, James y Lily caminan delante de nosotros,

Nate me ofrece su brazo y yo lo tomo.

-así que ¿Ahora soy tu chica? -

digo en un tono de burla, él se voltea y asiente con energía

- ¿Cuándo pensabas decírmelo? –

- Era sorpresa, así no podrías decir que no-

se encoje de hombros con una sonrisa que es contagiosa

–Que romántico- bromeo y él se queda pensativo.

-Tienes razón, hare mi mayor esfuerzo para que olvides la terrible impresión que ocasione-

Me dice mientras toma mi mochila y me da un beso tierno

– Apúrense- grita Lily y pronto los alcanzamos.

Su comentario me tomo por sorpresa, no sé si está bien oh está mal, nunca había tenido un novio, no sé cómo se inicia una relación, pero estoy segura que no se inicia besándose en tu cuarto a alguien que conociste hace dos días.

La Cafetería está casi llena

-Chicas ustedes busquen una mesa y nosotros pedimos-

- ¿Preciosa que te pido? - le pregunta James a Lily

– Una ensalada cesar por favor- el asiente

¿Frann que quieres? -

-comeré lo mismo que tú, Nate abre mucho los ojos

- ¿Segura? -

-si –

-está bien.

Lily y yo buscamos una mesa, y encontramos una cerca de un hermoso ventanal.

-Nate y James pronto se irán a la universidad ¿Verdad? -

-Sí, pero aquí también hay una universidad pequeña y ellos seguirán aquí –

dice Lily con ilusión, supongo que es porque se queda James.

Los chicos llegan a la mesa con nuestra comida

-Tu ensalada y una soda dietética Preciosa- y le da un beso

Nate se sienta y me pone una gran hamburguesa con todo, volteo y lo veo

-Tú me dijiste que querías lo mismo que yo y un jugo de frutos rojos natural –

-es justo lo que quería- sonrió, él se sienta a mi lado y me da un beso en la mejilla.

Antes de que le dé la primera mordida a esa deliciosa hamburguesa James me habla

-Franccesca ¿De dónde eres? - dejo de nuevo la hamburguesa en el plato

-Yo nací aquí en Roma, ¿Y tú? - le pregunto y le doy un bocado a la hamburguesa, esta buenísima

-Yo soy de Puerto Rico- asiento mientras trago el bocado

-Eh ido una vez ahí, es hermoso- el asiente y se concentra en su comida y yo hago lo mismo.

Cuando terminamos y salimos de la cafetería, Nate me toma de la cintura y me acerca a el

–No sabía que tenías ese apetito- me dice realmente sorprendido

–A mi gustan las cosas grasosas y también las ensaladas, pero prefiero las cosas fritas- el asiente, fascinado me parece.

Ya es la mitad de la semana, yo espero a Lily para que vayamos al estudio de baile, cuando volteo hacia las escaleras veo a Lily que baja corriendo, cuando llega donde yo estoy me toma de las manos

–Lo siento se me hizo tarde- Apurémonos- asiento y salimos hacia al estudio.

Cuando llegamos, ya hay unos cuantos en el estudio también están los gemelos Estefan y Nathan.

Lily y yo nos metemos al baño para cambiarnos rápido el uniforme por ropa más cómoda.

Al salir comienzan con Bachata, es un ritmo cadencioso y sensual, mientras me recojo la melena más que esponjada, veo a Nate y que se va acercando al ritmo de la pieza derrochando sensualidad.

Cuando lo tengo frente a mí me quedo congelada.

-Bailemos- y antes de que dé respuesta me toma en brazos y nos dirigimos al centro de la pista

-Espera, no se bailar esto- me acerca más a el

-Solo déjate llevar- y comienza a moverse al ritmo de “Eres mía” de Romeo Santos.

Dios, sí que sabe bailar es fácil seguirlo, es un baile tan sensual que debería ser ilegal bailarlo tan bien.

-No te asombres si una noche entro a tu cuarto y nuevamente te hago mía-

me canta al odio y me pongo más que roja y doy un respingo cuando siento como sus dientes se clavan en mi lóbulo y tira suavemente.