1. Capitulo 1
Antonia Acosta regresa a Nueva York, la ciudad de su infancia después de huir de su exnovio. Ella regresa rota pero lista para comenzar su vida de nuevo. Se las arregló para encontrar un lugar bastante alto en Johnson company, pero eso fue sin contar con el regreso de su jefe, su primer amor, Miller Johnson, después de su decepción amorosa, ¿está lista para abrirse de nuevo?
…
Capitulo 1
Estoy en el baño, frente al espejo. Mi cabello n***o está recogido en un moño de estilo desordenado que deja algunos mechones colgando. Me pongo la falda a cuadros y agarro mi blusa, mi mirada se encuentra en el espejo y detengo mi vista. Mis ojos se detienen en las huellas que él dejó a mis costados, debajo de mis clavículas. Ni siquiera me atrevo a mirar los de mis muslos. Me estremezco y se me suben las lágrimas. Sé que estos eventualmente se irán, pero los demás, aquellos que van en el corazón, no estoy segura
Respiro hondo, me pongo la blusa y voy a maquillarme. Me pongo los tacones y agarro mi bolso y me apresuro a mi coche. Será mejor que no llegue tarde a mi primer día de trabajo en la empresa
¡Nueva York! ¡Extrañaba esta ciudad! Me fui a los 16 años para vivir con mi madre en Canadá, dejando todo atrás. Amigos, familia y novio. Finalmente novio que se puede descartar.
Al finalizar mis estudios en Canadá, me contrataron como directora de recursos humanos en una gran empresa allí y todavía estaba trabajando allí hasta hace unas semanas. Me ofrecieron trasladarme a una de las empresas más grandes de Estados Unidos y, aunque no quería ir, finalmente sirvió como una salida. Me las arreglé para salir de él, de sus garras.
Estaciono mi auto en el estacionamiento reservado para el personal y finalmente entro en Johnson company . Tuve suerte de que uno de los hombres de la mano derecha del Sr. Johnson me viera y hablara con su jefe. Así que subo en el ascensor de cristal para encontrarme con este famoso Sr. Johnson , el creador de este imperio. Me imagino a un hombre de cierta edad, tal vez 50, con el pelo canoso.
Veo los pisos desplazarse y subo al piso 55, Las puertas se abren a un espacio luminoso, lleno de ventanales. Miro por la ventana, se puede ver toda la ciudad desde allí Debe ser hermoso por la noche. Una mujer tose detrás de su escritorio para llamar mi atención.
-¿Señorita? Buenos dias.
-Hola, soy Antonia Acosta, la nueva directora de recursos humanos.
Me presento a la joven que debe tener mi edad. Ella es morena y bastante pequeña pero es linda. Tiene buen cuerpo y se ve bastante natural, no del tipo que se esconde debajo de 3 toneladas de maquillaje ni mucho menos silicona
-Oh si, el Sr. Johnson me lo dijo que llegarías hoy, por favor sígueme
La sigo por un pasillo donde veo algunas puertas. Me muestra la puerta por donde debo ir y vuelve a su trabajo.
Llamo y espero el permiso para entrar.
-... ¡No te pedí que hicieras eso! ¡Dejarás de entrometerte en cosas que no son de tu incumbencia y perderás mi tiempo! ¡Estas despedido!
Se abre la puerta y sale una joven llorando sin tomarse el tiempo de cerrar la puerta. La veo irse. Llamo de nuevo a la puerta ahora abierta.
-¡Qué quieres! — grita una voz ronca con acento hispano que me parece un poco familiar.
Entro en la gran sala y veo a un hombre de cabello oscuro desde atrás mirando el movimiento de la ciudad
-Yo ... Hola, soy la nueva directora de recursos humanos. Antonia Acos ...
No termino mi frase porque se da la vuelta y su mirada azul celeste se sumerge en la mía. Una mirada que desearía no haber vuelto a ver nunca en la vida