TRES DÍAS DESPUES – REINO DE GLACIALIS Existía una antigua tradición común en todos los reinos: cuando se enviaba una invitación a una boda real, los invitados debían presentarse en el reino anfitrión con la mayor prontitud posible, sin importar que la ceremonia se celebrara varias semanas después. Esta costumbre permitía que los huéspedes compartieran con los novios durante todo el período de preparativos. El propósito de esta práctica era fortalecer los vínculos diplomáticos, ya que, durante esas semanas de convivencia, los representantes de diferentes reinos tenían la oportunidad de estrechar lazos con sus aliados. La celebración de la boda era simplemente el momento culminante de ese período de intercambio social y político. Esta tradición se había convertido en una ley no escrita q

