Una Guía y Dos Esper

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De Compras

Después del entrenamiento al día siguiente, Noah tomó a Rin y la subió a un auto para llevarla a la ciudad.

- Esto no es correcto. Estamos en entrenamiento. Si nos atrapan... - dijo la joven preocupada sin poder evitar mirar la ciudad con curiosidad. No había salido mientras vivió en la Cúpula cuando era una niña y las naves de transporte llegaban directo a la plataforma en los terrenos de la mini ciudad por lo que no pasaban por la ciudad Norm.

- Le pedí permiso a la Guia Allen. - le dijo tranquilizándola - No quiero comer las loncheras del comedor central. Tengo que comprar ingredientes para cocinar en casa.

- Podríamos haberlo solicitado a través de la Unidad de Seguridad a la que pertenecemos. Es el procedimiento.

- Pero no sería divertido... Anthea me dijo que no conoces la ciudad. Seth nos prestó su auto...

- ¿La G3 se prestó a esto? - preguntó sorprendida.

- Dijo que es bueno para conocernos en otros entornos. He vivido nueve años con Norms por lo que aún me siento incómodo de regreso a la Cúpula. - le contestó sonriendo mientras conducía hacia el área comercial.

- ¿Por eso me pediste vestirme con jeans y polera?

- Claro, de lo contrario destacaríamos más. Soy un esper sin implante...

- Cierto...Si tenemos la autorización de la G3, podemos comprar lo que necesitamos y debemos regresar. Nada de recorrer la ciudad.

- Owww, ¿Cómo lo supiste? Aguafiestas... - dijo Noah con un puchero que hizo reir a la joven.

- El vínculo. - le explicó Rin - No puedo leer tu mente, pero puedo sentir tus emociones y si lo combino con tu personalidad e intereses, puedo saber que quieres... Estás acostumbrado al aire libre y has vivido casi como Norm en el ejército. Turistear y recorrer la ciudad mientras estás en la base es normal.

- Vaya, eso es genial. - reconoció entrando al estacionamiento de un supermercado - Me impresionas...

Cuando apagó el motor, le sonrió, palmeando su muslo con afecto - Estoy muy emocionado por hacer esto contigo... - le dijo con honestidad sorprendiendo a la joven - Siempre pensé en hacerlo con mi pareja...

- No he comprado en un supermercado desde que tenía doce años. Siempre como en los comedores centrales de los domos o me quedo en la habitación ¿Tenemos como pagar por la comida? Aún no se nos asigna presupuesto para la unidad familiar.

- He ahorrado mi sueldo del ejercito en una cuenta. - le dijo mostrandole una tarjeta - No te preocupes...

Noah iba a abrir la puerta para salir cuando Rin lo sujetó de la manga de su camisa de leñador la que llevaba abierta sobre la sudadera negra de entrenamiento de su uniforme. Se había cambiado a toda prisa emocionado por la salida.

El esper quería hacerla sentir bien tal como ella les había hecho sentir. La noche anterior, después de comer, estuvieron los tres en la intimidad con Zack y él dandole placer y recibiendo sus estelas. Noah debía reconocer que se sentía tan bien que le era difícil controlarse para no tomarla a la primera oportunidad. Hacer algo en un espacio público cotidiano lo ayudaría a controlarse.

- ¿Pasa algo? - le preguntó girándose para mirarla y Rin le sonrió antes de besarle con suavidad en los labios.

- Gracias... - le dijo suavemente antes de girarse y bajar del automóvil dejando a Noah perplejo.

Rin tomó la mano que el joven le ofrecía antes de entrar al supermercado donde tomaron un carrito para llevar la compra. Noah le explicó la lista y que sólo compraría lo de la semana para probar el menú que tenía pensado. Si era del gusto de los tres, prepararía uno similar para la siguiente semana considerando que debían viajar a la nacion del dragón por la conferencia de los líderes de la comunidad.

Con curiosidad, Rin vio como Noah elegía las verduras y frutas así como los demás productos colocándolos con especial cuidado en el carro.

- ¿No dijiste que Zack era el más ordenado? - le preguntó divertida empujando el carro mientras Noah caminaba a su lado revisando su lista, concentrado.

- En general soy más disperso que Zack, pero cuando algo me interesa soy en extremo meticuloso. - le contestó - Es la comida que comerá mi familia. Es importante para mi.

- Noah... - le dijo Rin con cuidado. No quería que confundiera el entrenamiento con sentimientos reales, menos al comienzo donde son tan intensos que pueden llevar a confusión. Ella estaba consciente de lo que producía su guía a un esper y más aún a uno vinculado. Noah era el más sensible a canalizarlo de manera intensa ya que no había tenido un guiado estable a diferencia de Zack, independiente de la calidad o el objetivo.

- Lo sé... - le dijo con una sonrisa amable - No debo confundir el SICOM con sentimientos reales. No te preocupes, Zack me lo ha repetido también. - la vio pestañear sorprendida - Creo que ambos menosprecian mi capacidad de análisis o de darme cuenta de la diferencia entre la necesidad de cercanía o que me gustes.

- Lo siento... - dijo Rin - No quería ofenderte. Sólo me preocupa que te hagas falsas expectativas sobre una relación más allá del SICOM.

Noah se detuvo por lo que Rin lo imitó y esperó a que hablara.

- No eres la primera mujer con la que me he acostado. - le dijo con claridad - También fui guiado antes de los dieciocho años y no he sido un monje mientras estuve en el ejército. Puedo diferenciar perfectamente a una mujer que me interesa de una que sólo quiero follar. - Rin se sonrojó - Yo también te investigué y puedo hacer mi propio juicio sobre la clase de mujer que eres. Me gustas no sólo porque seas mi guía, si no porque eres preocupada, amable y considerada. Eres estricta, pero proteges a los que amas. También vienes de una familia rota como la nuestra y no vas a jugar con dos hombres, aunque sea por una misión.

- ¿Y si sólo es una actuación para mantener la estabilidad de ambos mientras los entreno? Eso se hace para mejorar la efectividad del toque.

- Tal vez se haga en un toque superficial o en un guiado monitoreado con una luz en entrenamiento, pero somos adultos y hay cosas que no se pueden fingir aunque queramos. - concidió.

- Entonces... ¿Qué quieres de mi? - le preguntó.

- Honestidad, quiero que dejes fluir tus emociones durante la guía. - le pidió.

- Sabes que debo canalizar las suyas, no liberar las mías. Es mi trabajo.

- Aunque estuvieras trabajando...Si no tienes nada que esconder no debería haber problema ¿No crees? Tal cómo tu puedes ver todo de nosotros ¿No deberíamos poder ver todo de tí? Es un trato justo.

Rin se rio. Era una sorpresa la profundización de su razonamiento y su astucia para tratar de hacerla bajar la guardia. Debía darle crédito.

- ¿Te sentirías mejor si puedes canalizar mis emociones?

- Si, sentiría que podemos conectarnos de manera más honesta. Siento que ocultas algo.

- Oh, vaya... - dijo riendo, nerviosa ¿Era tan perceptivo? - Creo que es justo...¿Te parece si en la próxima guia me preguntas algo y canalizaré la respuesta para ti?

- Siempre y cuando sea la verdad... No lo que quieres que veamos.

- Trato...- le dijo levantando la mano para estrechar la suya, pero Noah sonrió y la besó en la boca.

- Trato... - le dijo cuando levantó la cabeza con una sonrisa satisfecha para luego seguir avanzando por el pasillo.

Rin lo siguió en silencio con un presentimiento extraño. No parecía tan sencillo como lo hacía parecer el esper. Estaba tramando algo. Tenía que estar alerta.