Enséñame a querer

Capitulo 4

4.

Punto de vista de Vanessa

Miro en silencio a Thomas cocinar y me muerdo el labio.

¿Por qué tiene que estar tan sexy y también poder cocinar? yo suspiro Thomas me mira con sus ojos verdes.

—¿Qué pasa? — Me pregunta con su voz profunda.

—Oh nada — Sonrío y él no cree una palabra, Debido a que siempre soy honesto de todos modos y no dudo en expresar mis pensamientos en voz alta — Pienso que estás muyyy sexy mientras te quedas ahí y cocinas, ya es bastante malo que te veas tan bien, pero también tienes que saber cocinar y quién sabe qué más — Veo la boca de Thomas abierta y sonrío levemente cuando veo que sus mejillas se ponen ligeramente rojas. — No hay necesidad de lucir tan aturdido, tú mismo sabes que eres sexy — Sonrío

—Estas realmente loca, la gente tan honesta es rara — Luego niega con la cabeza como si no pudiera creer lo que dije, sonriendo ante la expresión de su rostro, me acerco a él y examino su perfil lateral. Maldición, mierda, es muy, muy guapo, y me he llamado la atención durante semanas.

Cuando abrió la puerta sin camisa sin inhibiciones, casi me aparto de mi fe, sonrío cuando pienso en cómo lo miré y luego cruzó los brazos sobre el pecho.

Es un desperdicio que le gusta Luna, ella simplemente está equivocada, sí, amo a mi prima, es como una hermana para mi, pero ella siempre se aprovecha de todos y no aprecia a un chico querido, espero que Thomas se dé cuenta de lo falsa y superficial que es.

 Todavía miro a Thomas mientras regreso a la realidad. ¿Cómo puede una persona ser tan atractiva y ni siquiera saberlo?

La forma en que me besa me lleva a otro mundo y desencadena sentimientos que ni siquiera yo conocía antes, besarlo es diferente, sus labios se sienten perfectos sobre los míos, es como si estuvieran hechos para mí

—¿Qué piensas de Vanessa ? — me pregunta con su voz ronca, puedo sentir la piel de gallina en mis brazos

—Sobre ti — digo sin rodeos, se ríe suavemente de mi honestidad.

—Es bueno saberlo — sonríe, y una vez más admiro su hermosa sonrisa, Dios, ¿qué me pasa?

Me inclino y lo abrazo de un lado, él también me rodea con el brazo derecho y revuelve la pasta y la salsa alternativamente con el otro, veo sus músculos tensarse, todo lo que desearía tocarlos, niego con la cabeza y trato de desterrar el pensamiento porque todavía es muy inexperto y no quiero asustarlo.

Si supiera lo mucho que me gustaría abalanzarme sobre él

—¿Todo está bien Vanessa? me has estado mirando perdida en tus pensamientos durante unos minutos — sonríe, sonrío ante sus palabras, es tan cariñoso y bueno.

—Todo está bien, solo admiro lo bien que te ves — le respondo honestamente, me está sonriendo.

—Entonces solo es eso… — Asiento y sigo mirándolo, hasta que me alejo un poco y lo veo escurrir la pasta mientras tensa los músculos.

 Dios, no debería estar tan obsesionada físicamente, cuando pasa a mi lado unos minutos más tarde con la pasta y la salsa, mi mirada vaga hacia su ancha espalda y su trasero, sonríe cuando me ve mirándolo.

— Sabes, en lugar de mirarme, también puedes llevar los platos — Él sonríe, asiento con la cabeza.

— No es mi culpa que seas tan guapo — murmuro más para mí, pero él lo oye desafiante

—¿Lo soy? — Él sonríe, luego comemos y hablamos de varios temas a medida que se hace tarde, me dirijo a casa.

Espero que Luna finalmente haya terminado con su chico, es repugnante ver cómo se aprovecha de los chicos y se los lleva a la cama, yo también me divierto, pero para mí siempre es cierto que lo mejor es algo mutuo, de ambos lados, dónde los dos queremos aprovechar el tiempo, ella, por otro lado, deja que los chicos piensen que está interesada en ellos, y ahora Thomas también, ¿Qué hay de genial en ella? Thomas me acompaña a la puerta y me la sostiene con una sonrisa, me pongo de puntillas y le doy un beso largo y apasionado de despedida, entonces se escapa un pequeño grito ahogado y me doy cuenta de lo calientes que suenan esos ruidos de su boca.

— Adiós, nos vemos mañana — sonrío y empiezo a caminar, noto como su mirada está pegada a mis piernas y glúteos y me vuelvo hacia él, simplemente se ve atrapado y se sonroja, camino a casa sonriendo y feliz.

Gracias a Dios ahora está tranquilo y me voy directamente a la cama después de cepillarme los dientes, mientras yacía en la cama, mi mente vagó hacia Thomas y me quedé dormida tranquilamente.

Cuando me despierto a la mañana siguiente, noto mi buen humor de inmediato, me puse un vestido ajustado que termina justo por encima de mi rodilla, además de botas oscuras y una chaqueta de mezclilla, por supuesto que mi hermana está usando su ropa de niña buena de nuevo y me doy cuenta de lo diferentes que somos en realidad, conducimos juntos a la escuela en nuestro BMW.

—Dime qué tan bien puede besar Thomas hermana — me pregunta Luna con curiosidad. —Obviamente muy bien, por la forma en que colgaste en sus labios ayer — sonríe, me encojo de hombros

—nunca lo descubrirás Luna, ese sigue siendo mi pequeño secreto —le sonrío, Ella sonríe y mueve las cejas.

—Él es atractivo — entonces ella murmura, noto cómo surge una sensación de inquietud en mí y asiento con la cabeza con fuerza.

—Si, lo es — murmuro.

Cuando llegamos al estacionamiento, puedo ver a Thomas desde más lejos, luego salgo y sonrío mientras su mirada vaga con avidez por mi cuerpo, me vuelvo de nuevo y veo con satisfacción cómo me mira, me despido de Luna y les doy a Thomas y Dexter un rápido saludo, Thomas responde con una sonrisa y Dexter solo da un asentamiento, luego me dirijo a clase.

En el curso de investigación nos avisan que habrá una conferencia a la cuál es bueno que asistamos, además de que se juntaran varios grupos de investigación, y sé que Thomas hace parte de uno, con la esperanza de que Thomas también vaya y así podamos pasar una semana juntos en otro lugar, me anoto en la playa de asistentes.