Buscando a la Sirena

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Dejándola Entrar a mi Espacio

- Entra

Andreas se quitó la chaqueta y la arrojó sobre el sofá y Sei lo siguió a la sala.

Pudo ver un amplio estudio, decorado con simples líneas modernas de estilo minimalista. Un sofá y sillones, un comedor para cuatro personas, cocina americana, un mueble, que dedujo era un bar con copas, un pasillo hacia una puerta corrediza a un lado y dos puertas en el lado opuesto.

- Detrás de esa puerta hay un cuarto de lavado y para alacena. No lo uso, así es que no sé que falta. Al otro lado esta mi estudio de trabajo y mi dormitorio. - le indicó dos puertas y las abrió, mostrando el interior.

En el estudio había algunas pantallas, un escritorio y un sofá con una manta junto a una mesa auxiliar. En el dormitorio, una gran cama king sise con un respaldo n***o, sábanas y mantas de color gris no atrajeron su atención tanto como lo que había en la esquina, junto a la ventana: un cómodo sillón de lectura con una lámpara especial, una mesa auxiliar con varios libros y tras ella, de techo a suelo, varias repisas llenas de libros.

Una gran O se formó en su boca y luego una gran sonrisa que sorprendió a Andreas.

- ¿Te gusta leer? - le preguntó con curiosidad al ver su reacción.

- Sí, muchísimo. - le dijo acercándose - Casi todo es digital ahora por lo que ver libros es especial.

- Puedes leer alguno si gustas. En tu tiempo libre. - advirtió, indicando las dos últimas puertas junto a la cabecera: Baño, vestidor. - dijo al fin - Por qué no revisas la cocina mientras me cambio de ropa. Supongo que ya tienes un listado de ropa que debería llevar...

Andreas entró a la puerta de la derecha y cerró dejando a Sei sola, la que regresó a la estancia.

De manera profesional sacó su libreta para revisar las alacenas y la nevera encontrándose con bebidas de agua y sopas instantáneas. No había otras cosas y se preocupó más cuando revisó el resto de los estantes y no había nada.

- Cuando estoy aquí, como afuera o pido comida para llevar... - le dijo el joven acercándose, vestido con un pantalón de chándal gris y una sudadera blanca con unos zapatos de vestir informales.

La joven suspiró.

¿Cómo podía tener ese físico comiendo tan mal?, pensó confundida.

- Creo que necesitamos completar la lista. - le dijo mirando el dormitorio - ¿Puedo revisar su baño y el resto de la casa? Haré una evaluación rápida y prepararé lo que creo que debe llevar a las grabaciones.

- Haz lo que quieras...- le dijo haciendo un gesto con la mano mientras se sentaba en su sillón en el living revisando su teléfono.

De reojo, pudo ver a la joven recorrer el lugar y anotar algo en una pequeña libreta y el gesto le recordó a una pequeña bibliotecaria con esos grandes lentes, falda larga hasta los tobillos, una sudadera con un chaleco sencillo con zapatillas urbanas.

Todo en ella era práctico y cómodo.

A medida que la veía anotar, revisar su gran bolso y sacar cada vez más cosas

¿Dónde cabía todo eso?.

- Estoy lista... - dijo después de un rato sentándose frente a él en el sofá - Ya hice una lista de todo lo que es necesario. Haré un menú para cuando regrese de la locación. Es ideal que no haga ayunos prolongados si debe memorizar guiones o tiene sesiones de fotografías. Su piel lo acusará de inmediato ¿Podemos revisar la lista que le di?

- Está en mi chaqueta...

-Adelantaré lo que observé y sólo le preguntaré lo que no sé ¿De acuerdo?

- Claro...

- También preparé parte del equipaje. Encontré la maleta en el vestidor y adelanté. Voy a ver el servicio de lavandería en el lugar para no tener que llevar tanto peso.

Andreas se sintió de regreso en la Cúpula donde todo estaba programado y agendado. Todo lo que comían y hacían estaba predeterminado, incluso los domos eran iguales por lo que todo se volvía en extremo rutinario y monótono. Eso lo asustó ya que se resistía a esa rutina, lo único que conservaba era el orden, la ropa de descanso gris así como la decoración minimalista y las sábanas de su dormitorio... Era lo único que le recordaba que era un metahumano, un guía.

Pero, el joven sabía que debía aguantar el proceso y dejarla entrar a su casa para cumplir con el papel. No tenía nada de su identidad como guía en el lugar por lo que, aunque estuviera sola o pudiese registrar algo, no encontraría nada.

- Café con dos de azúcar, - contestó mecánicamente al interrogatorio - un vaso de agua en la mesa de noche para irme a dormir, pasta, queso. Puede ser estilo mediterráneo, frutas en general. No me gusta la sandía, soy alérgico a los frutos secos, me gusta la carne bien cocida, las patatas asadas, nada de picadillos o lo que no sepa qué ingredientes tiene, me cuesta dormir, disfruto nadar. No bebo....

Y así, el joven contestó el listado que la joven quería y la vio sonreír satisfecha para luego levantarse guardando el listado en su bolso.

- El señor Mike ha informado que tiene la tarde libre por lo que me gustaría adelantar la maleta después de almorzar.

- Puedo pedir algo... - le dijo Andreas tomando el teléfono, pero la joven negó con la cabeza - Vi una tienda de conveniencia cuando llegábamos. Deme 10 minutos y volveré con algunas cosas ¿Puede revisar lo que dejé separado en el vestidor. Hay una lista de chequeo, revísela y agregue lo que guste. Está enfocada en básicos los que puede combinar de múltiples formas.

Andreas se giró para contestarle, pero la joven ya había salido.

- Demasiado intensa... - murmuró, cerrando los ojos apoyando la cabeza en el respaldo - Ya estoy cansado con solo verla trabajar.

El joven se movió perezoso y caminó hacia el vestidor. Creyó que iba a estar desordenado ya que ella había revisado sus cosas, pero para su sorpresa, todo estaba en el mismo lugar, como si no hubiese estado ahí. Entró al vestidor y vio la maleta en el apoyo junto a la pared y varias cosas ya empacadas. Todo impecablemente acomodado. Al lado estaba la lista con marcas y ajustes, además de los "debo comprar", "tener presente" y varios bosquejos de combinaciones posibles de acuerdo a la situación, hora y privacidad.

Se rio pensando en Björn y que estaría encantado con el sistema de organización de la joven. Ese hombre también tenía todo un sistema de almacenamiento y de organización.