Inseminada por error

Capitulo 2.

Capitulo 2.

*Un nuevo comienzo.

*Arya Montenegro.

Un nuevo día y mi alma aún está perdida, sin embargo está mañana siento una gran motivación, Gloria a encontrado para mí un centro de apoyo, se dice que de la depresión y las dificultades no se necesita apoyo, el que crea que se puede salir de tal situación solo, vive en un mundo de engaños, en este instante mi más grande apoyo lo recibo de mi mejor amiga, es una gran mujer, es mi hermana y mi única familia, a quien sin importar que por sus venas no corra la misma sangre que la mía ella se ha hecho cargo de mí, se ha sacrificado para que me sienta bien, se dice que en ocasiones se recibe más de un particular que de la propia familia, pero esto no me afecta, al contrario me deja saber quiénes son los que merecen estar en el momento en que vuelva a nacer, porque estoy dispuesta hacer lo que sea necesario para salir de esta oscuridad que me atormenta y dejar mi pasado junto a ese sueño que tenía con Arturo, quien se ha olvidado de mí, y a seguido su vida sin mirar atrás. Ya no queda nada más que nos una que esa oscura casa la cual e puesto en venta, no pienso volver, como dice Gloria, “Lo mejor es dejar ir todo lo que te aferra a ese pasado” pasado que se volvió mi más grande pesadilla y al que intento convertir en mi fortaleza.

— ¿Lista? —Pregunta Gloria con esa mirada llena de preocupación.

— Si, entremos. —Digo tomando aire al estar frente a la clínica.

Todo empieza en cuanto entramos y me doy cuenta que no soy la única, que mis problemas no son tan graves como los de muchos de los miembros de este agradable grupo, siento que, si podré, saldré de esto y la madre soltera con cuatro hijos junto a mí me da esa esperanza.

— ¿Tienes hijo? —Pregunta la rubia de ojos avellana que amamanta a su pequeña con tanto amor.

— No, pero deseo tenerlo algún día, quizás sea yo la del problema como dijo mi expareja, el hecho es que necesito a alguien para lograr esto que tanto deseo y siento que jamás podré lograr.

— O quizás no. —Expresa con una sonrisa que posa sobre la pequeña en sus brazos dejándome un trago amargo del que me cuesta digerir ante su comentario.

— ¿A qué te refieres? —Respondo a la defensiva y lo próximo que siento es su mano sobre la mía con una mirada llena de tanta seguridad que siento que lo que me dirá será algo positivo.

— Arya, ¿No es así?

Asiento con la cabeza y le expresó una pequeña sonrisa.

— Estefany, es un placer…—Dice devolviéndome la sonrisa. — Permíteme explicarte, no necesitas exactamente una pareja, no necesitas encontrar a esa persona especial, si es lo que deseas entonces espéralo, si no, siento que tú puedes sola, sé que en este momento y por tu situación te ves obligada aferrarte a alguien, quizás pensando en la metodología absurda que para ser madre tienes que tener una pareja o estar cansada, yo corría tras ese sueño de la familia feliz por mucho tiempo y me canse de buscar algo que no existe, al menos no en mí punto de vista. Decidí cumplir mi sueño sin importar el que o el cómo, simplemente deje las excusas a un lado y busque la manera de hacer mi sueño posible, después de años de intentar, encontré una clínica de fertilidad en la que me sometí a un tratamiento con el cual concebí a mi pequeña Ashley, es mi milagro y aunque al principio estaba llena de expectativas y de dudas no me arrepiento de haber hecho lo que hice, ahora soy tan feliz que vengo aquí hablar de mi experiencia y desahogarme en momentos de angustia, siento que la vida golpea duro a veces, pero depende de nosotros si nos dejamos caer o nos levantamos, quizás suene duro, por tu experiencia, pero algún día verás esto como una triste pesadilla que quedará en el recuerdo.

Mi expresión se llena de tristeza y me doy la oportunidad de imaginar que por mucho tiempo estuve aferrada buscando un sueño en el que luchaba sola para conseguirlo, me sometí a tanto que ahora que lo veo el sueño era más mío que de Arturo, aún estoy en esa cuerda floja y buscar la manera de intentar ahora me deja saber que no estoy lista, no por ahora.

— ¿Y bien? ¿Cómo te fue? — Pregunta Gloria quien me espera al salir.

Su mirada llena de preocupación cambia al verme sonreír.

— Fue grandioso, gracias por traerme aquí. — Le digo dándole un fuerte abrazo.

— O cariño, no sabes lo feliz que estoy por ver esa sonrisa en tu rostro, confía en mí, todo saldrá bien.

Su abrazo y esas palabras se volvieron mi motor, una motivación más a llegado a mi vida, pero antes quiero volver a encontrarme y buscar mi estabilidad.

*Tres meses después.

Me e convertido en la tía de Ashley, esa hermosa princesa llena mi vida de esperanza, el apoyo del grupo, de Gloria y de Estefany me ha servido mucho, hoy me encuentro corriendo para llegar a mi primera clase en el instituto, así es, después de tanto tiempo e decidido volver, el primer paso comienza con hacer lo que quiero y para mí diseñar es mi más grande sueño, tomar la decisión de dejarlo fue un gran golpe, sin embargo sentía que hacía todo por mi familia, esa familia que quería formar con Arturo, dejando mis sueños y aspiraciones de lado, gran error, ahora no tengo prisa, más que llegar a mi primera clase.

La luz cambiar a verde y sigo corriendo para cruzar la calle siendo detenida por un Ferrari n***o que se detiene ante el golpe que le doy con mi bolso, al sentirlo sobre mí.

— IMBÉCIL, ¿Acaso no ves que está en verde?

No logro detallar a la persona que conduce y vuelvo a golpear de manera agresiva el capo del coche, estoy enojada debido al raspón de mí rodilla y la manera grosera en la que nadie se toma la molestia en bajarse del coche y darme la cara. Por última vez lo fijo con la mirada y puedo ver qué de manera grosera hace rugir el motor, llegaré tarde, sí, pero no le daré paso.

Me detengo con enojo frente al coche esperando a que se atreva arrollarme, cuando cinco Bmw n***o aparecen en el lugar de manera extraña, dos hombres se bajan del coche y uno de ello toca el vidrio del asiento del conductor del Ferrari que enciende su luz y se atreve hacer rugir nuevamente su motor con insistencia logrando quitarme ante su arranque que lleva a los dos hombres de seguridad a volver a su coches. Me hago aún lado muy enojada y observo la escena, mi enojo va en aumento y la hora en mi reloj no calma mi angustia.

*Un año después.

— Felicidades, Arya, lo lograste, amiga, por fin terminaste tu carrera, ¿Ahora que deseas hacer?

La pregunta de Gloria atormenta mi mente por meses, es un gran paso el que acabo de dar y con esto una gran decisión vuelve a mi vida, la única parte de mi pasado en la que quiero ser parte y es volver a la empresa de mi familia, sé que será duro empezar de cero, pero tengo fe de que todo saldrá bien.

— Voy a recuperar la empresa de mi familia y crear mi propio imperio en ella.

— Que maravillosa noticia, Arya, esto hay que celebrarlo.

— Eso significa que te estaré molestando un poco más en casa, ya que con el dinero que he recuperado del divorcio y lo de la venta de la casa e invertido en la remodelación y recuperación de la empresa, ya que Arturo la llevo a la quiebra y dejo el edificio abandonado, el pago del abogado para recuperar la propiedad ha Sido mucho, hay mucho que arreglar, pero te prometo que en cuanto me recupere te recompensare.—Le digo avergonzada ante este tiempo que he Sido una carga para ella.

— No seas tonta amiga, yo estoy feliz de tenerte en casa, cuando decidas irte me sentiré muy sola y triste, no sabes lo feliz que estoy por todo lo que has logrado, te has propuesto a recuperar tu vida y no hay día que no me sienta dichosa de ser parte de cada progreso.

— Gracias Gloría, nada de esto lo hubiera logrado sin tu apoyo.

— Y sin tu fuerza de voluntad por seguir adelante. Tranquila abran tiempos mejores, yo invito está cena.

Tiempos mejores. Desde esa noche no hay día que no me aferre a esa posibilidad y más cuando el deseo de ser madre crece cada día en mí, cada segundo que pasa añoro poder tener en mis brazos a mi bebé, e investigado y esos tratamientos son costosos, eso solo me motiva a seguir adelante y con la inauguración de Arya confecciones, mi mundo empieza a dar un gran giro.

*Un año después.

— Arya, amiga, esto es una gran noticia, ¿Recuerdas el vestido que compraron de manera anónima? Resulta que lo llevo a la cena de gala la sobrina del príncipe Samir, amiga, están hablando de ti en la revista Lanx, eres famosa amiga.

La felicidad de Gloria me hace sonreír, después de muchas altas y baja salimos en una de las revistas de farándula más leída del momento, mi socia y mejor amiga no hace más que pasearse por la oficina leyendo el artículo que la hace llorar de la emoción.

— ¿Lo escuchaste? La princesa catálogo tu diseño como único y glamuroso, Arya, ¿Sabes lo que significa esto?

— ¿Qué le ha gustado nuestro diseño?

— Amiga, esto nos abre las puertas al mundo, después de esto estaremos en la lista de los famosos para confeccionar sus diseños, Arya, tu sueño y el de todos los que estamos contigo se hará realidad, amiga, la vida nos puede cambiar.

No puedo evitar sonreír a mi mejor amiga, es una mujer muy sabia y positiva. No paso mucho cuando el correo y el equipo de marketing empezó a recibir mucha atención, en menos de cinco meses muchas de las celebridades nos solicitaban, llegaban pedidos de mis diseños únicos todas las semanas, confeccionaba sin parar diseños únicos y exclusivo que marcan la diferencia entre los muchos diseñadores y en un abrir y cerrar de ojos me encontraba en la gala de Nueva York y eventos de moda en París, me proyecte catálogos exclusivos en los que trabajo por horas y añadí diseños para caballero me abrió la puerta a nuevos ingresos.

Un hombre misterioso se ha contactado con Gloria, me tiene confeccionando diseños a la moda para él y su pago por adelantado me llena el día de una gran felicidad, lo he logrado, e conseguido un enorme departamento y ya tengo coche propio, empezamos a recibir frutos y todo el equipo que estuvo conmigo desde abajo se sienten maravillados por lo que hemos logrado, ahora estoy aquí en la clínica de fertilidad tomando la mano de Gloria quien al igual que yo está muy nerviosa.

— ¿Quieres un jugo? ¿Tequila o algo?—La miro con una sonrisa y ella me corresponde de la misma manera. — Lo siento, estoy nerviosa, siento que este momento lo has esperado tanto que cuando recibiste los resultados de los exámenes me imaginé a una mini Arya corriendo por toda la empresa.

— ¿Lloraras?

— Lloraré, está espera me angustia, iré por café, ¿De verdad no quieres nada?

— Si, un jugo.

— Bien, estaré aquí en unos minutos.

La salida de Gloria de la sala me pone más nerviosa, no sé porque se tardan tanto, hay una cantidad de pacientes que me hacen pensar que es el lugar indicado, las enfermeras no salen y puedo notar que en el pasillo a mi izquierda acaparan toda su atención, pareciera que estuvieran atendiendo a la misma reina, tiene demasiada seguridad para ser un paciente normal, pero no me sorprende, es la mejor clínica que pude encontrar, es muy prestigiosa y costosa, siento que aquí podré lograr mi sueño.

— Aaah…— Se queja una enfermera que deja caer las fórmulas al suelo.

Me levanto de prisa al ver lo nerviosa y apurada que está, se puede ver la presión que lleva en sus hombros, quizás la cantidad de personas que esperan desde muy temprano la ponga de tal manera.

— Gracias…—Dice mirando la hoja y las muestras en su carrito. — ¡Demonios! Tenía un número, ¿Qué hice el número? Dios, me matarán si no lo encuentro.

La miro con una sonrisa y le quitó del codo el número que busca con angustia.

— Tranquila, aquí está. — Le entrego el número y ella sonríe.

— Nuevamente gracias, me has salvado.

— De nada. —Le digo volviendo a Gloria quien llega con el jugo.

— Hasta la cafetería está llena, ¿Acaso no piensan llamarte nunca?

— SEÑORITA ARYA MONTENEGRO.

— Me llaman, ¿Estarás bien?

— Si, ve, ve, suerte amiga.