Sky y Kael continuaron su camino por el bosque, la linterna de Kael proyectando una débil luz que apenas lograba penetrar la densa oscuridad. El ambiente era opresivo; los árboles se alzaban como gigantes silenciosos, y cada crujido de una rama bajo sus pies los mantenía en alerta. La sensación de estar observados no desaparecía, y Sky intentaba mantener la calma mientras absorbía la nueva información sobre su situación.
—Dime más sobre estas criaturas de las sombras —preguntó Sky, su voz temblorosa mientras se adentraban en el bosque. La preocupación en sus ojos reflejaba el temor que sentía por lo desconocido.
Kael se detuvo y miró a su alrededor con cautela. La linterna revelaba breves destellos de la vegetación circundante, pero las sombras parecían moverse de manera propia, ocultando los secretos del bosque.
—Son antiguas entidades que se alimentan de la energía vital —dijo Kael, su voz grave y seria—. Han estado presentes desde el principio de los tiempos, pero se han mantenido ocultas en las sombras. Son atraídas por la energía de los lobos, especialmente de los alfas.
Sky sintió un escalofrío recorrer su espalda al escuchar esto. La idea de que criaturas tan antiguas y ominosas pudieran estar interesadas en ella era inquietante.
—Entonces, ¿me estaban siguiendo a mí? —preguntó, su voz apenas audible.
Kael asintió, su expresión grave.
—Sí, tu energía es muy poderosa. Son capaces de sentirla a kilómetros de distancia. Y ahora que has despertado tus poderes, eres un blanco aún más atractivo para ellos.
Sky se quedó en silencio, asimilando la información. La realidad de su situación se estaba volviendo más clara, y el temor a lo que podrían hacerle esas criaturas la envolvía como una niebla helada.
—¿Y por qué quieren hacerme daño? —preguntó finalmente, su voz temblando con una mezcla de preocupación y curiosidad.
—Quieren absorber tu energía para fortalecerse —explicó Kael—. Si te capturan, podrían usar tu poder para dominar a toda la manada.
Sky se estremeció ante la perspectiva de ser utilizada como una fuente de energía para esas criaturas oscuras. La idea de su energía siendo drenada y utilizada para fines nefastos era aterradora. El bosque parecía cerrarse a su alrededor, intensificando su sensación de vulnerabilidad.
—Pero no te preocupes —dijo Kael, tomando su mano con firmeza—. Estoy aquí para protegerte.
La calidez de la mano de Kael y el firme propósito en su voz proporcionaron a Sky una sensación de seguridad que contrastaba con el terror que sentía. Continuaron caminando por el bosque, adentrándose más en su corazón oscuro. A medida que avanzaban, Sky se sentía pequeña e insignificante frente a la inmensidad de la naturaleza que los rodeaba, pero la presencia de Kael a su lado le ofrecía una extraña sensación de protección.
De repente, un ruido inquietante rompió el silencio nocturno. Sky y Kael se detuvieron en seco, sus corazones latiendo con fuerza. Se giraron lentamente, sus ojos buscando en la oscuridad lo que había causado el sonido. Varias figuras oscuras comenzaron a emerger de entre los árboles, sus siluetas indistintas pero claramente amenazantes.
Las figuras tenían ojos brillantes que reflejaban la luz de la linterna, y sus garras afiladas se dejaban entrever en la penumbra. La visión de esas formas sombrías aumentó la tensión en el aire, y la sensación de peligro inminente era palpable.
—¡Detrás de mí! —gritó Kael con una voz autoritaria, empujando a Sky hacia un lugar más seguro mientras se enfrentaba a las criaturas. La determinación en sus palabras y la protección en su acción mostraban su compromiso con la seguridad de Sky.
Sky se movió rápidamente, escondiéndose detrás de un árbol cercano. Sus ojos seguían las figuras oscuras mientras Kael se mantenía a la defensiva. El silencio entre los árboles estaba cargado de tensión, y Sky podía sentir cómo el peligro se acercaba cada vez más. Aunque no podía ver claramente lo que estaba sucediendo, el miedo y la ansiedad estaban presentes en cada uno de sus movimientos.
El bosque parecía envolverse en un manto de inquietud, y la presencia de las criaturas de las sombras creaba una sensación de desesperanza. Sky se aferraba a la esperanza de que Kael pudiera mantenerlas a raya y que encontrarían una manera de escapar de esta amenaza en la oscuridad implacable.