NARRA NOAH Nos toma casi una hora de camino, llegar hasta el lugar en donde será la cena. Es un sitio bastante retirado. De hecho, queda en otro condado; en el condado de Strafford. Es un pueblo costero, mucho más pequeño que Seabrook. El restaurante no queda en una zona céntrica. Queda bastante alejado y cuenta con bastantes hectáreas de terreno, es más, según me dice Kai, también es un hotel, pero en lugar de habitaciones, lo que tiene son unas pequeñas cabañas. —¿Por qué hemos venido tan largo? —indago, antes de que nos bajemos del carro—. ¿Acaso no hay lugares bonitos en Seabrook? —Los hay —responde, mientras se saca su cinturón de seguridad. Cuando termina, se inclina, se me acerca y me ayuda a quitarme mi cinturón. Su rostro se acerca al mío, me roba un beso lento y suave, pero lo

