POV ADRIEN LOWELL Salgo de la casa, sintiéndome furioso y frustrado. Furioso, porque aún no puedo creer que soy tan estúpido como para tratar de ayudar a esa niña tonta y que ella me siga tratando como a su pendejo. Y, frustrado, por el inmenso deseo que me está calcinando por dentro. Deseo de regresar a donde ella, tomarla entre mis brazos, devorar sus labios, pasar mis manos por su cuerpo y hacerla mía. Me meto dentro del automóvil y comienzo a echar rabia. Gruñendo, rugiendo y golpeando el timón, una y otra vez. No entiendo qué es lo que me sucede. ¿Por qué esa niña me trastorna de esta manera? Siento que voy a volverme loco de un momento a otro. Sujeto el timón con fuerza y respiro a profundidad, llenando mis pulmones hasta que siento que están a punto de explotar y entonces lo s

