Angela también se rió. "Me pilló por sorpresa. Seré tu bebé si quieres. Pero también puedo llamarte bebé. Me gusta cuidarte también". Hizo una pausa con una sonrisa y luego susurró: "Hace unos minutos". Soltó una risita.
James se rió. "Bueno... Nos cuidaremos esta noche. Tengo que ir a practicar". Señalándola con el dedo mientras se ponía de pie, dijo: "Estudia, así podemos jugar un rato más tarde".
"¡Sí, bebé!"
Capítulo 89
Para entonces, Angela se había convertido en una visitante habitual del campo de béisbol después de sus clases. De vez en cuando traía a sus amigas de clase a estudiar mientras James entrenaba a los jugadores. Los jóvenes jugadores notaron la visita de las chicas, y varios se interesaron por las amigas que Angela traía consigo.
Pero todos sabían que Angela y James
