Incómodo

1465 Words
Anabel Desperté con bastante energía, después del día tan extraño que tuve ayer espero que hoy sea mejor, me prepare un poco de fruta con yogurt para desayunar y le llame a Susan. -¿Cómo sigues?¿Hoy si irás a la oficina o te quedarás en casa? -Buenos días Susan, ya estoy mucho mejor de hecho ni debí de haber ido al hospital pero Cristian insistió, no debiste de haber llamado a mi padre. - Perdoname pero cuando Cristian me llama se oía muy angustiado entonces supuse que era algo grave y él me sugirió que le avisará a tu familia- eso realmente me sorprendió y también me confirmaba que el realmente se preocupaba por mi, pero no debo de hacerme historias en mi cabeza aún. -Por suerte no me regaló, aunque sí me preguntó por Cristian ya que escucho al doctor que decía que era mi novio. -¡QUEEEE! Tan rápido ya se te declaro, vaya que no pierde el tiempo. -Nada que ver, solo fue una confusión por parte de los médicos, el no siente eso por mi- me recordé con un poco de tristeza -Claro que le gustas, él haría cualquier cosa por ti, es más te lo voy a demostrar- no me dejó ni decirle una palabra cuando ya me había colgado, vaya que es extraña. Terminé de desayunar y me fui a dar un baño para terminar de arreglar, esta vez tuve más cuidado para no sufrir otro accidente porque esta vez no había nadie que me salvará. Tomé mi bolsa y mi celular de la mesa para salir cuando note que tenía un mensaje de Susan. Susan: "Te dije que haría cualquier cosa, me agradeces después ahora disfruta." No entendí a qué se refería, si que es extraña, en el carro de camino a la oficina le marcaría pero ya tenía que salir porque se me hacía tarde, en cuanto abrí la puerta lo vi ahí, parado frente a mi puerta totalmente estático, con un traje n***o un poco ajustado en sus hombros, se notaba que estaba en buena condición física, cuando dirige mi mirada hacia la suya pude notar que el tampoco dejaba de mirarme de arriba para abajo entonces no pude evitar ruborizarse y parece que lo noto porque desvió la mirada de inmediato. -Buenos días Cristian, ¿Que haces aquí tan temprano? -Buenos días, Susan me llamó para pedirme que sustituyera a tu chófer por un tiempo en lo que regresa de vacaciones.- ahora entendía el mensaje que me acababa de mandar, tendría que hablar con ella muy seriamente. - No debiste haberlo hecho, yo puedo manejar rumbo a la oficina sin ningún problema. - Lo se pero no deberías después de haber tenido un golpe en la cabeza y menos si estuviste internada en el hospital. Me permites las llaves de tu camioneta por favor- aún en estado de shock extendí mi mano con las llaves hacia él, en cuanto las tuvo se dio la vuelta y caminó hacia el elevador y no hice más que cerrar mi departamento y seguirlo en silencio. Llegamos al estacionamiento y me abrió la puerta de la parte de atrás de la camioneta, de inmediato subí sin quitarle la vista de encima, el giro por enfrente de la camioneta y subió en el asiento del conductor, el camino rumbo a la oficina fue bastante incómodo ya que no sabía qué decirle y aún resonaban en mi cabeza la frase de Susan de que él haría cualquier cosa por mí, sería eso cierto o solo me estaba ilusionando. Cuando llegamos al estacionamiento de la oficina tarde un momento en reaccionar y antes de que yo abriera la puerta él ya la estaba abriendo y extendiendo su mano para que me apoyará al bajar, él es todo un caballero, cerró la camioneta y nos encaminamos a los elevadores de la oficina, como era esto posible, cómo había terminado llegando con él a la oficina, frente a todos, obviamente todos lo notarán, pero bueno no es que me importe mucho lo que todos opinen. El elevador se detuvo en el último piso donde se supone que teníamos que bajar, respire profundamente y me dispuse a salir rumbo a mi oficina, de inmediato sentí las miradas encima de nosotros y algunos susurros los cuales no pude distinguir que decían. Entre a mi oficina y Cristian se sentó en el escritorio de afuera, no pensé que esto sería tan incómodo, pero después de que él me viera completamente desnuda no pensé que lo vería tan pronto. La mañana transcurrió sin ningún problema, le envié un mensaje a Susan para almorzar ya que quería regañarla en persona, trate de voltear disimuladamente al escritorio de afuera y note que Cristian no estaba, seguramente alguien le hablo o fue por café, todo lo que lleva la mañana no ha entrado a mi oficina para nada, me estará evitando o simplemente no le importo. Estaba tan entretenida en mis pensamientos y en mis posibilidades con Cristian que nunca note que tocaban la puerta de mi oficina, cuando me di cuenta Cristian ya estaba frente a mi escritorio, recargado en él y con su rostro muy cerca del mío, me sorprendió totalmente, admirando sus hermosos ojos verdes y esos labios que quería besar con tantas ansias. -Anabel, Ana, ¿estás bien? despierta.- sacudí mi cabeza un poco y separé mi vista de la suya. -Perdón, estaba un poco distraída, ¿qué haces en mi oficina? ¿necesitas algo? -Traje estos papeles para que firmes, se tienen que entregar hoy, además para preguntarte si quieres ir a almorzar conmigo.- vaya que su propuesta me sorprendió, pero lamentablemente ya había hecho planes. -De inmediato los firmo, y sobre el almuerzo lo lamento, en serio me gustaría pero ya tengo planes, tal vez en otra ocasión.- pude notar que su rostro cambió- es que tengo que ver a Susan para revisar cosas de mi agenda- sentí la gran necesidad de explicar y al parecer eso fue bueno porque su sonrisa volvió a su rostro. -Oh ya veo, no te preocupes, nos vemos al rato que regreses a la oficina, ahora iré a entregar estos papeles.- salió de mi oficina y yo me dispuse a hacer lo mismo, tome mi bolsa y le mande mensaje a Susan para que pasara por mi y fuéramos a el restaurante de sushi que nos encanta. Una vez en el lugar, nos dieron la mesa de siempre y ordenamos nuestros rollos favoritos, en lo que esperábamos la orden ella no decía nada solo me veía con mucha precaución. -Ya me vas a explicar qué es lo que piensas que haces. -No se de que hablas- Susan trataba de disimular -Como se te ocurrió decirle a Cristian que fuera mi chofer, me sorprendió mucho verlo esta mañana parado en mi puerta, debiste de haberme avisado antes. -Si te hubiera avisado que era el no hubieras abierto la puerta, es mas te hubieras escondido en tu habitación de ser necesario. -Bueno debo de admitir que tienes razón pero aun no entiendo tu mensaje. -Creo que es muy obvio la verdad, te dije que él haría lo que fuera por ti, no tuve ni que insistirle mucho para que aceptara, es más solamente se lo propuse y apenas estaba terminando de decir cuando él ya había aceptado, así que solo lo mande a tu casa.- todo esto me estaba confundiendo aun mas de lo que ya estaba, que estaba pasando realmente entre Cristian y yo. Estábamos revisando las posibilidades y lo que las acciones de Cristian representaban cuando por la puerta vimos entrar a Estefan, así que lo invitamos a sentarse con nosotras, para tener su punto de vista masculino, después de ponerlo al tanto le preguntamos qué haría él. -Así que el chico del desfile si te impresiono, pues realmente yo note que ese día él no quitaba la vista de ti, pero Peper llego para llevarselo, yo creo que deberias de intentar hablar con él, ver que pasa, convivir y tal vez besarlo -Cómo crees que lo voy a besar, no se que piensa Cristian sobre nosotros o si hay un nosotros. Después de terminar de comer decidimos pasar a dejar a Estefan en un estudio donde tenía que maquillar a unas modelos para una campaña, luego Susan se fue a conseguir unas cosas que necesitábamos para un plan que creamos durante la comida y yo me fui a la oficina, Cristian aun no llegaba así que entre a mi oficina y me puse a terminar de planear mi siguiente paso para descubrir que siente Cristian por mi, si no es lo que yo creo, si no siente nada por mi será mejor que lo descubra cuanto antes para así poder avanzar y dejarlo atrás.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD