April permaneció callada todo el camino de regreso a casa. No entendía por qué, si las cosas habían salido mejor de lo que esperaba. Incluso él, que llevaba años sin hablarse con su padre, tuvo una buena tarde. Y para su sorpresa, Matt se llevó bien con el viejo, estaba en la parte de atrás del auto y no dejaba de hablar de su abuelo, y de cómo el viejo chantajista, le había obsequiado un avión a control remoto. Eso fue un gran gesto por parte de su padre, la verdad es que él valoraba mucho esa colección, y nunca dejaba que nadie tocara sus cosas, Pero en serio parecía que quería nietos, y aceptó la situación mejor de lo que pensaba, y trató a los hijos de April como si fueran hijos de él, eso lo hacía sentir feliz y orgulloso. Llegaron a cenar hamburguesas, a un restaurante para niños

