Evan estaba en su despacho, sabía que en cualquier momento vendría Jason, estaba agotado, deseaba irse a su departamento y tomar un baño, aunque en algún momento de su vida estaba acostumbrado a las guardias, hace mucho que esos tiempos habían pasado, pero con todo lo que estaba aconteciendo afuera no era buena idea que se fuera.
Tenía sueño, estaba cansado, por suerte tenía un cómodo sofá, así que se quitó la bata, se aflojó la corbata, saco una almohada que tenía en el armario, y una cobija que guardaba para emergencias, ya que a veces le había tocado quedarse ahí por las nevadas. Cerro los ojos e intento descansar, pero no dejaba de resonar en su cabeza la noticia que le dio April, un bebe, definitivamente no estaba preparado para ser padre, pudiera decir que era joven, aunque no lo era tanto, pero jamás planeo eso en su vida. Y menos con April, no es que no fuera hermosa, lo era, solo dios sabe las veces que tuvo que contenerse cuando eran jóvenes para acercarse a ella, es solo que Jason se lo había advertido una vez, cuando lo descubrió mirándola.
Se había unido a un viaje de vacaciones de su familia, ellos hacían esos viajes todo el tiempo y era la primera vez que lo invitaban, habían pasado un par de años desde la última vez que había visto a April y cuando la vio en el aeropuerto no puedo evitar fijarse en lo mucho que había crecido y en lo absolutamente hermosa que era. Desvió la mirada para disimular lo impresionado que estaba, después en la sala de espera mientras esperaba, la miro de reojo un par de veces, pero siempre cuidando que Jason no lo notara, pero durante el resto del viaje eso no fue posible, interactuó con ella y con su amiga, y mientras a la otra chica solo le pasaban tonterías por la cabeza, April era muy interesante, conocía de lugares para viajar, al parecer amaba la comida y le hizo excelentes recomendaciones, podía hablar con ella de todos los temas imaginables, y ella siempre tenía una buena conversación, una centrada opinión, nada que ver con otras mujeres de su edad. Y así como su gusto por ella creció, no solo era una cara bonita con una cabecita hueca preocupada por su apariencia, era una persona extraordinaria y divertida.
Un día Jason lo sorprendió mirándola mientras estaba en el lago, sabrá Dios por cuanto tiempo lo observo a él antes de decirle
- ¿Puedes quitar tu lasciva mirada de mi hermana? – declaro Jason molesto – Ni siquiera parpadeas, pareces hasta estar babeando, no olvides que aún es menor de edad.
- ¿Cuántos años tiene ya? – le pregunto sonriendo, pero en realidad si quería saber
- Aún tiene diecisiete años, casi le doblas la edad.
- Si mal no recuerdo se acerca su cumpleaños, así que está por cumplir dieciocho, y yo acabo de cumplir veinticinco, así que son solo siete años de diferencia exagerada y piensa de forma más adulta que tú. – dijo en tono de broma, como retando
- esto es serio Evan, pon atención, sé que estás acostumbrado a que las chicas se lancen a ti en cuanto pasas, y en absoluto eres hombre de una sola mujer, podría decirse que has salido con toda la universidad, eres atractivo amigo y te felicito por eso.
- Entonces cuál es el problema amigo, la pequeña April estaría orgullosa de salir con semejante Dios, el más codiciado de todo el estado – dijo con sorna
- El problema es que, de todas las mujeres del estado, esta es mi hermanita, y no quiero que salga con un tipo como tú, así que te agradecería, por nuestra amistad que mantengas tu mirada, tus manos y todo tú, lejos de mi hermana.
- No crees que eso lo tiene que decidir ella – pregunto Evan agraviado, lo trataba como si fuera una mala persona, el no engañaba a nadie, él sabía lo que quería y todas esas chicas también.
- Por Dios Evan, te mira como si fueras su estrella de Rock preferida, seguro se lanzaría a tus brazos también, pero yo eso nunca te lo perdonaría.
- Está bien hermano, deja de decir tonterías, eso jamás pasaría, tu hermanita, es como mi hermanita también, así que olvídalo- le dijo a Jason para tranquilizarlo, pero en el fondo lamentaba que esa fuera su hermanita. Estaba harto de todo lo que conocía, no hubiera estado mal probar algo distinto.
- Evan, te pregunto que si tienes esas malditas fotos – dijo Jason con voz fuerte, interrumpiendo sus pensamientos.
- Oh, si las tengo, pase mi teléfono del escritorio – dijo señalando hacia donde estaba
- Deberías irte a descansar, lamento este desastre – dijo Jason pasándole el teléfono
- No lo lamentes hermano, tu padre pidió que lo trajeran aquí, le pareció un tema muy delicado como para que cualquiera se diera cuenta, y como no estabas tú, parece que no se sentía capaz de lidiar con la policía y la prensa. Pero somos hermanos, sabes que siempre puedes contar conmigo - le dijo a Jason
- Gracias, en serio, por tu discreción, por todo, no sé cómo toda esta mierda ocurrió así, íbamos a decirles a mis padres y a April en una linda cena que estábamos juntos, no de esta manera, ahora ella ya no quiere decirle a nadie, siente vergüenza como si la culpa fuera suya, mi padre siente culpa, hasta April la siente, y ese bastardo se largó como sin nada. Ya llamé a Jerry el de la fiscalía, voy a llegar a las últimas consecuencias.
- No esperaría menos de ti, lamento que tengan que pasar por esto, ella parece una gran chica, por fin entiendo por qué te pusiste pesado cuando dije que era linda.
- Para ti todas son lindas, menos mal a ella y a April si las salve de ti- dijo con una sonrisa
- Ey, ya no soy el de antes, tenme fe, ahora si veo a las chicas como algo serio, tal vez pronto siente cabeza
- No digas tonterías, ves dices las chicas, seguro sigues saliendo con jovencitas de la universidad, nunca vas a madurar – dijo Jason con burla, -eres el incasable de los tres, siempre lo supimos, agradece que nosotros vamos a darte sobrinos, así no serás un viejo solo.
- ¿Cómo sigue Elizabeth? - pregunto tratando de cambiar de tema, no le gustaba el rumbo de su conversación, no sabía por qué tanto Ben como él se expresaban de esa forma de él, como si fuera alguien sin sentimientos solo en busca de sexo y diversión, que sabían ellos si solo no había encontrado a la indicada. Además, cuando él supiera que al final no respeto a April, seguro iba a matarlo.
- Está con la psicóloga ahora, tú me avisarás cuando pueda llevarla a casa – dijo Jason
- La llevarás con tus padres – pregunto Evan con curiosidad
- Claro que no, seguro ella no quiere volver a ver esa habitación en su vida, se va a mi departamento, Mika está lista para cuidarla.
- Si amigo, será lo mejor, pero si quiero que pase aquí unos días antes de irse, tenía sangrado urinario, podría ser por trauma renal o en la vejiga, además sus enzimas musculares están muy altas, hay que vigilar eso o podría sufrir su corazón o riñones
- Ese maldito trataba de matarla, estoy seguro de que pensaba que después de tomar lo que quería de ella podía matarla y huir, y que nadie sabría que se trataba de él, pero el imbécil no sabe lo que le espera.
- Cuenta con mi testimonio y lo que necesites, pero ahora ve con ella, debe estar muy mal con todo esto, ¿le avisaste a Ben?
- Está en su luna de miel, no vamos a arruinarla, voy a esperar a que vuelva, porque necesitaré tomarme un tiempo.
- Tienes razón, ahora ve con ella- dijo, y Jason se puso de pie, pero se acercó a darle un abrazo antes de irse.
- Eres un gran amigo viejo, nunca olvidaré nada de esto- y en serio Evan esperaba que no lo olvidará cuando supiera lo de su hermana.