Cuando terminé de darme un baño me puse unos shorts de algodón y una camiseta desteñida que usaba solo para andar en casa, dejé mi cabello húmedo, que se secara solo. Tenía hambre y ni siquiera paré a ponerme los zapatos, bajé directamente a la cocina, quería llamar ya mismo al servicio de pizza y comprarme una grande, muy grande. Pero cuando llegué mi estomago gruñó, había un exquisito olor en la cocina, pensé que tal vez Miranda había vuelto antes, pero en cuanto entré me llevé la sorpresa del año. Vincent estaba cocinando, él se movía por la cocina como si fuera suya. Olía delicioso pero no sabía a ciencia cierta qué estaba cocinando. No me acerqué, me quedé de pie en la puerta, mirando cómo hacia las cosas con mucha soltura. Metió lo que parecía ser pollo en el horno y luego se f

