Capitulo 1

733 Words
—¡Christine!—escuché la voz de la señora Martha. Se detuvo a mi lado y puso una mano firme en mi espalda—. ¿Te encuentras bien? Quise responder con calma, pero no podía fingir. Algo grave estaba sucediéndome. Algo que mi cuerpo ya no lograba ocultar. —C-creo que… —respiré con dificultad—. Creo que necesito ir al hospital. —Pero niña, ¿qué ocurre? —preguntó inclinándose hacia mí, intentando analizar por sí misma lo que me pasaba. —No lo sé… —dije entre esfuerzos, la voz temblorosa por el dolor físico y por la angustia de pensar en mis hijos—. Por favor, ayúdeme a llegar al taxi. Debo ir al hospital. El dolor era punzante, profundo, como si me estuvieran perforando los huesos. Nada parecido a lo que la doctora describía como un inicio de labor de parto. —Sí, sí, vamos —dijo, tomándome del brazo. Pero incluso dar un solo paso se volvió casi imposible. Cada movimiento arrancaba un grito de mi garganta—. Vamos, pequeña. Falta poco para llegar. Aguanta. Por mis hijos, seguí avanzando como pude. Pero mientras los segundos pasaban, sentí una presión extraña, urgente, como si mi cuerpo intentara expulsar algo sin mi permiso. Un miedo helado me recorrió el pecho. Si los bebés nacían ahí, en medio del cementerio… mi hija no tendría ninguna oportunidad. —¡Ayuda! —grité, esperando que alguien escuchara. —¡Camina! —insistió la señora Martha, ya con terror en el rostro—. ¡Haz el esfuerzo! —¡No! —grité con desesperación—. Ya no puedo… creo que van a nacer aquí. —No, pequeña, ya casi llegamos. Puedo ver el taxi desde aquí. Aguanta un poco más —dijo, intentando darme ánimos. Pero mis piernas simplemente se negaban. Mi cuerpo estaba colapsando. Miré al frente, intentando encontrar el taxi… pero entonces alguien apareció en mi campo de visión. Un hombre. Alto. Familiar. Mi vista se nublaba. No lograba distinguirlo. Tal vez estaba por desmayarme. —¿Quién… es él? —murmuré justo antes de que mis piernas cedieran. No llegué a tocar el suelo. Unos brazos fuertes me sostuvieron, y mi cabeza cayó suavemente sobre un hombro cálido. Un olor conocido, casi idéntico al de mi esposo, me envolvió. Lloré sin poder evitarlo. Por un instante —irracional, desesperado— quise creer que Arthur estaba vivo, que había vuelto por mí, que estaba ahí para no dejarme caer. —¡Vamos, no te desmayes ahora! —ordenó una voz masculina. Me parecía familiar, pero el dolor y la confusión me impedían reconocerla. Me aferré a la fantasía de que era Arthur. A la única idea que podía sostenerme en ese momento. Él me cargó y avanzó con rapidez. En cuestión de segundos llegamos a la salida del cementerio. Vi mi taxi esperándome, pero el hombre no se dirigió hacia él. En cambio, me subió a una camioneta desconocida. No pertenecía a nadie que yo conociera. Ni siquiera a los Sallow. No tenía fuerzas para cuestionarlo. Mi consciencia se debilitaba con cada punzada. Lo único que me anclaba al presente era la voz de la señora Martha, sentada junto a mí. La camioneta arrancó y el dolor se intensificó hasta lo insoportable. Sentía peso, presión, fuego entre las piernas. Algo estaba muy mal. —P-por favor… —logré decir—. Apresúrense… ya vienen… Un gemido ahogado escapó de mis labios cuando una punzada más profunda me atravesó. Quería llorar, gritar, hacer algo… pero sabía que si me soltaba un poco más, perdería la consciencia. Entonces vi cómo la expresión de la señora Martha cambiaba. Su rostro palideció de golpe. Miraba mi vientre. —¡Está sangrando! ¡Por favor, apresúrense! —gritó al conductor, olvidándose por completo de mí. —¿Qué? —intenté incorporarme para ver, pero antes de que pudiera moverme, una mano firme me tomó del hombro. Gire la cabeza y vi un rostro joven. Un rostro con un parecido inquietante a Arthur. Un par de lágrimas me resbalaron sin permiso. Estaba alucinando. Tenía que estarlo. Ya no sabía qué era real. Solo intentaba no perder lo poco de consciencia que me quedaba. La camioneta se detuvo bruscamente. El hombre —el desconocido familiar— volvió a cargarme en sus brazos. Y justo entonces… la oscuridad me reclamó por completo.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD