Addictive

Capítulo 7

Salí de mi habitación con el top puesto y sin sujetador, ya que no me gustaba dormir con él, me puse la toalla alrededor de mi cintura y ahí estaba él, parado frente a mí con mis bragas rosas colgando de su dedo pulgar. Joder, madre mía, qué vergüenza... No podría estar pasándolo peor en estos momentos.

— ¿Me las podrías dar, por favor? — Le dije borde, con la mirada agachada y mi rostro completamente rojo.— ¿Piensas que te las voy a dar así como así? — Dijo con una breve sonrisa excitante mientras se mordía el labio. Sabía perfectamente que tenía el poder en estos momentos. — Has sido una niña mala antes Lara, y te dije que eso tendría consecuencias.No sé a qué jueguito pretende jugar pero se le ve ilusionado y me está empezando a sacar de quicio.

Entonces, sin pensármelo dos veces, empecé a dar saltitos para cogerle las bragas, pero él solo subía y subía más su brazo. Era totalmente imposible, me sacaba casi dos cabezas.

— ¿Sabes que puedo coger otras? Estoy en mi habitación y tengo miles en los cajones — Le dije en tono vacilante y desafiante, segura de mí misma.

— Oh cariño, sé que no harás eso, no te conviene.

—  Sino, ¿qué harás? — Le dije con una ceja levantada.

— Tu castigo podría ser aún peor y créeme, no querrás eso — Dijo apoyándose en el marco de la puerta. ¿Castigo? Oh no, oh no, está loco... Sí, estoy a su cargo pero... ¿Castigarme?

— Vale  — Tragué saliva — ¿Y comopuedo recuperar mis putas bragas? —Pregunté rendida, harta ya de esta situación.

— No quiero volver a escuchar esas palabras jovencita — Me regañó, aunque más bien creo que se está riendo de mí.

— Sí, lo que tú digas — Dije poniendo mis ojos en blanco aún ruborizada.

— Si quieres tus preciosas bragas tienes que enseñarme las tetas — Soltó sin tapujos, haciendo que me quedase boquiabierta ante su tremendo descaro.

Solté un grito ahogado, ¿Pero qué? ¿Está enfermo? Nunca le he enseñado mis atributos a nadie, ni siquiera a mis padres cuando era pequeña. ¿Y viene este chico tan imbécil a pedirme que le enseñe mis tetas a cambio de mis bragas? Ni de coña, suena muy patético...

— Ni de coña, estás loco — Dije riéndome literalmente en su cara de brazos cruzados.

— Vamos, sé que en el fondo te mueres de ganas. Tienes que hacerlo si no quieres un castigo peor, vamos, sé que ese te aterraría aún más. Si me las enseñas te lo perdono — Me dijo poniéndome las bragas casi a mi altura.Entonces, di otro salto para cogerlas, pero él fue más rápido y subió su brazo. Comenzó a reír y de alguna forma me quedé contemplándolo, tiene una risa preciosa... ¡Tierra llamando a Lara, ubícate!

— Ni hablar cariño, vamos — Contestó volviendo a subir el brazo.

Entonces dudé, ¿lo hago? Tampoco sería tan malo enseñarle mis tetas, ¿verdad? Hay chicas que lo hacen todos los días a cualquiera... ¿No? ¡Ag Lara en qué estás pensando!

La verdad es que no querría llevarme un peor castigo que a saber dios qué sería, pero algo mucho peor seguro, como llamar a mi madre e inventarse cualquier cosa absurda sobre mí, algo que ni me quiero imaginar.

Entonces sin pensármelo, asentí.

— Bueno... lo haré, pero será rápido y para que esto acabe de una vez, estoy harta — Dije levantándome lentamente el top para provocarlo. Esta sensación me gusta y su cara es excitante. El hormigueo en la parte baja de mi vientre se volvió a hacer presente en mí. Wow...

— Vamos, no me tortures princesa.

Entonces, lo levanté por completo, dejándolas totalmente a la vista para luego, rápidamente, bajar mi top. Creo que casi ni se me ha visto nada...