Descubriendo Algo Especial

4806 Words
—¿Qué ace papá? Mientras leía y anotaba todo en unos papeles, vi a Sora sujetando una pelota. —Ah, Sora ¿Quieres aprender con papá?—pregunté sonriendo mientras él se acercaba—. Estoy aprendiendo recetas de dulces y buscando ideas para unas nuevas, he pensado en abrir una pastelería aquí, claramente falta mucho para eso. —¿Pa-teía?—preguntó curioso. —Si, una pastelería, un lugar para hacer dulces—sonreí al ver sus ojitos llenos de curiosidad—. No conociste a tus abuelos, pero ellos eran grandes pasteleros y luego de leer todo esto me doy cuenta que faltan muchas recetas, me pregunto por qué a nadie se le ocurrió traer dulces de la Tierra a este mundo. Miré el horno pensando en la forma de usarlo. —¿Necesita ayuda para hacerlo funcionar? Una pequeña lechuza blanca con motitas negras en la cabeza voló hacia nosotros antes de pararse sobre mi hombro. —Mucho gusto, yo soy Sunny, mi padre me dijo que les ayudara—explicó amablemente, por su voz femenina y aguda diría que debía ser una cría o una lechuza más joven. —Mucho gusto—dije mientras Sora trataba de tocarla—. Sora no, no debes tocar a los demás sin su permiso. —Chi—dijo haciendo un puchero. —Gracias, los niños suelen ser muy agresivos con nosotros—explicó—. Bueno, volviendo al tema, puedo enseñarle cómo funciona el horno mágico, primero debe activar la magia en la piedra que está sobre este. Busqué rápidamente y vi una gema de color verde junto a las hornillas, lo toqué y una especie de luz blanca pasó por los libros como una especie de escáner. —Ahora tome cualquiera de los libros que desee probar las recetas—explicó. —Mmmm veamos, probemos el pastel de manzanas blancas—dije tomando el libro con ingredientes que eran similares a las que conocía. —Lea en voz alta todos los ingredientes y materiales que necesite. Asentí y comencé a leer todo lo que necesitaba, entonces una luz salió de las páginas y sobre la mesa aparecieron los ingredientes y todo lo que necesitaba, haciendo que Sora y yo gritáramos de la emoción. —Por favor, no griten—nos regañó Sunny. —Lo siento—me disculpé avergonzado antes de mirar a Sora—. Hijo, vamos a aprender a cocinar pasteles. —Chi papá—asintió muy feliz. Acerqué mi mano hacia uno de los ingredientes y al tomar uno de los huevos sentí que sostenía uno de verdad. —Vaya, me pregunto si esto será como cuando en las pelis hacen esas cosas de modificar algo en 3D—pensé curioso antes de empezar a leer las instrucciones. Sora se quedó en silencio muy curioso por lo que estaba haciendo, estaba haciendo un pastel de manzana muy parecido a las que hacía antes en la pastelería, pero cuando tomé la manzana blanca me sorprendió sentir que estaban tan frías como un cubo de hielo. —Las manzanas blancas, mejor conocidas como la frutas hielo, se caracterizan por ser frías ya que sólo se obtienen en invierno—explicó Sunny. —Mmmm podría hacer helados de manzana, pero si sólo se consiguen en invierno no tendría sentido—medité antes de tomar el cuchillo y empezar a picarlo—. Voy a suponer que esto está limpio y desinfectado, aunque claro, no tenía sentido decir eso si todo era virtual. Corté todo y comencé a poner el relleno ya en la base, luego comencé a decorar hasta que estuvo listo para el horno. —Mmmmm ciertamente se ve como un pastel de manzana normal—dije mirando la mezcla todavía cruda—. Esto de practicar sin desperdiciar comida me gusta, pero no me siento cómodo sin haber probado antes la comida. Llevé el pastel al horno y puse el temporizador, rápidamente anoté todo lo que pude sobre alternativas de relleno, cambios en la base o decoraciones, cuando la campana del horno sonó me acerqué y traté de sacarlo, pero Sunny me dio un piquete en la oreja. —¡Ay! —¡Señor! ¡Aunque sea un horno ilusorio todavía puede quemarse!—exclamó regañándome. —Lo siento—me disculpé antes de tomar unos guantes y sacar el pastel terminado. Me sorprendió mucho que la masa, en lugar de ser dorada y crujiente, se volvió blanca como la nieve, brillante y llena de escarcha. —¡Que boito, papá!—exclamó Sora. —Estoy sorprendido—dije antes de soplar un poco la humeante tarta y luego rasqué un poco la superficie—. Es…como si hubiera nevado sobre la propia tarta, la cubierta está fría pero a la vez todo está caliente…quisiera probarlo, tengo mucha curiosidad. Había tanto contraste, era frío y cálido a la vez…se me hizo agua a la boca al imaginar lo delicioso que sería. Guardé los libros de recetas y en los estantes, luego tomé las anotaciones y las puse en mi bolsillo, iba a hablar con Ur y Rose para que me prestaran su horno, así podría saber si podía crear nuevas recetas con ellos. —Te agradezco mucho que nos ayudaras, Sunny—dije una vez que dejé todo en su sitio. —No se preocupe, es parte de mi trabajo—sonrió la lechuza—. ¿Seguro que no quiere llevarse otros libros? Puede decirle a mi padre que les entregue sus tarjetas de biblioteca y podrán llevarse todos los que quiera, sólo recuerde que deben ser devueltos luego, puede decirle que les ofrezca el servicio de entrega, mis hermanos podrían buscar los libros antes de que termine el tiempo. —Eso sería de mucha ayuda—sonreí agradecido antes de tomar la mano de Sora y dirigirnos al escritorio de Snow. Al llegar noté que en el segundo piso habían varias personas leyendo o llevando libros, su ropa parecía un poco más cara así que supuse que eran gente de la Zona Media. No les di importancia y le pedí a Snow la tarjeta de biblioteca, él aceptó con gusto y al parecer sólo con darle mi brazalete mi registro estaba completo. También me dio un libro sobre los héroes para conocerlos y al terminar sólo debía enviar un mensaje desde mi brazalete y lo irían a buscar. ____ (Pv Hermes) —¿Es ese el héroe? Levanté la vista y vi a Elena revisando un libro pero en realidad vigilaba la planta baja, me asomé con cuidado y pude ver al héroe hablando con Snow. —Si, es ese—respondí volviendo a poner el libro en el estante—. Te dije que lo trajeron con un niño. Elena se fijó en el chico mientras salía con el pequeño, se puso a jugar con su cabello azul claro parecido al cielo de la mañana y se acercó a mí quitándose los lentes oscuros que ocultaban sus ojos grises debido a su ceguera, pero ella no tenía ningún problema para “ver”, era un talento que me fascinaba y fue eso lo que me hizo amarla totalmente. —Hermes, ¿Qué opinas ahora que lo conoces?—me preguntó. —Mmmm realmente no siento ningún peligro en él—respondí—. Ese chico es muy tranquilo, incluso se cansa fácilmente…no creo que sirva para la cama. Hice el chiste sólo para molestarla, pero ella me jaló un mechón de mi cabello morado y me quejé adolorido. —No hablo de eso—gruñó fingiendo molestia, pero la conocía muy bien. —Lo sé, amor—reí divertido—. Realmente aún no sabemos cómo reaccionará cuando conozca a más criaturas aparte de Atem, sólo podemos esperar. —Muy bien—Asintió—. Volveré a la Zona Alta, nos veremos más tarde. —Si, mi bella princesa—dije haciendo una reverencia, haciendo que ella sonriera antes de volver a poner una expresión seria y alejarse—...Jooo como me molesta que tengamos que estar separados, por culpa de esos idiotas no puedo dormir con mi bella princesa ni con mi amado príncipe. Amaba a mis queridos chicos, pero todos estaban en contra de nuestra relación y por eso debíamos estar separados, bueno al menos podía serles útiles con mi propio talento. —Hora de volver al trabajo—dije cubriéndome con una capa y dejando los libros en las estanterías. ____ (Pv Daniel) Volvimos al restaurante de Ur y le pedí que me dejara usar el horno y los ingredientes. —Para nada—gruñó—. Te presto el horno, pero los ingredientes los buscas tú. Eso fue muy directo. —Pero no puedo ir al bosque mañana—me quejé. —Ve temprano, no creo que haya algún problema si regresas antes del atardecer. No tenía otra opción que aguantar hasta mañana, aunque pensé que tal vez en el gremio podría encontrar alguna misión de recolección. Luego de comer, bañé a Sora y lo dejé durmiendo antes de dirigirme al gremio, claro que tardé por cada vez que tuve que pararme a recuperar el aliento, pero pude llegar y por suerte todavía estaba abierto, no había mucha gente y la mayoría estaba bebiendo o comiendo. Me acerqué al tablón de anuncios y busqué todas las misiones que tuvieran que ver con recolección en el bosque, después de todo no conocía nada más y no quería que Atem se enojara conmigo. —Me pregunto cómo estará —pensé preocupado—. Tal vez debe estar preparándose para tener relaciones con una chica o dos, digo los gatos en la Tierra solían ser muy adictos al sexo. …No sé por qué pero, me sentí un poco incómodo de imaginarme a Atem desnudo en la cama con varias chicas muy felices de su virilidad, no lo había visto desnudo por completo, pero sí tenía semejante cuerpo no dudaba que tuviera un m*****o enorme y… ¿Eh? ¿Por qué estoy pensando eso? Me puse muy rojo y me dio vergüenza pensar en ello. No sé de dónde saqué eso, es cierto que Atem me había tratado bien, fue amable y me decía todo sin pelos en la lengua, realmente me sentía a gusto con él. Pero…¿Acaso estaba sintiendo algo más? No, imposible. Nunca me interesaron los hombres, aunque Sam era un poquito marimacha, por eso le quedaba mejor la ropa de hombre y pudo crear el personaje de Susu…pero de ahí a gustarme un hombre. …Bueno si soy sincero no estoy interesado en buscar una mujer luego de lo que pasó con Ludmila, digo ya puedo hablar con ellas pero seguía sin sentirme cómodo…pero tengo a Sora…¿No se sentirá incómodo si su padre buscaba una pareja masculina? Digo, no quería insultar la memoria de Sam, jamás podría olvidarla y ella siempre fue el amor de mi vida…¿Sería una falta de respeto si decido buscar a alguien más? Mientras estaba en mis pensamientos, la puerta se abrió y una persona cargando un enorme jabalí entró...espera…¡¿Un jabalí?! La persona tenía una túnica morada abierta con bordados de letras extrañas, botas gruesas de cuero y un pantalón bombacho blanco que apenas se veía, caminó tranquilamente llevando al animal que parecía muerto sobre su hombro como si no pesara nada. Al llegar al mostrador dejó caer al jabalí frente a la chica que gritó asqueada. —¡¿Qué demonios?! ¡¿Por qué trajiste eso, Risha?!—exclamó la chica. —La misión era derrotar al jabalí así que traje su cuerpo para probarlo—explicó una voz femenina aunque sonaba un poco gruesa y rasposa, como una cantante de rock. —¡Con finalizar la misión es suficiente!—exclamó—. Saca esa cosa, véndela a la carnicería o qué sé yo. —Agh, está bien—gruñó la chica. —Wow, debe ser muy fuerte para cargar esa cosa como si nada—pensé dándome la vuelta para ver las misiones—. Me pregunto en dónde estaba ese jabalí—revisé la lista pero no había alguna marca que dijera si estaban tomadas o pendientes, supongo que tiene sentido o alguien más las tomaría. —Oye. Me di la vuelta y de pronto la chica estaba a milímetros de mí. —¡AAAAAHHHHH!—pegué un salto hacia atrás golpeándome con el tablón de anuncios—¡Ayyyyyy! —Lo siento—se disculpó quitándose la capucha mostrando una larga cabellera plateada y unos ojos rojos como la sangre, su piel era extremadamente pálida casi verdosa, como si huyera del sol—. Dime ¿Eres el nuevo héroe? —¿Eh?—me alejé un poco de ella—. Si, lo siento tengo que irme. Me levanté corriendo dejando las misiones que había tomado y sólo salí corriendo huyendo de ella. Al ver a una mujer tan cerca, mis traumas regresaron y todo lo demás se borró de mi cabeza. Sólo quería huir… Alejarme de ella. Alejarme de cualquier mujer. ____ (Pv Ur) Cuando terminé de limpiar los platos, Daniel entró corriendo casi al borde de las lágrimas y subió encerrándose en su cuarto. —¿Dan?—subí a tocar su puerta, pero él no me abrió—. Oye, ¿Estás bien? ¿Alguien te molestó? —....No….estoy….estoy bien—escuché al otro lado, pero su voz sonó muy asustada y llorosa. No pude decirle nada. Conocía esa voz de miedo y terror, seguramente tuvo un encuentro nada grato con una mujer. —...Oye, si necesitas hablar—traté de decirle, pero sólo dijo un No rotundo antes de darme las buenas noches. Me sentí terrible e incapaz de hacer algo para ayudarle. Desde que Daniel y su hijo llegaron me había encariñado con ambos, como si realmente fueran parte de mi familia, era un buen chico y gracias a Sora, mi esposa estaba recuperando esa felicidad que le quitaron cuando supimos que no podía tener hijos. Suspiré derrotado y fui a cerrar la puerta principal, tal vez mañana podría prepararle algún platillo especial para animarlo. Ahora que mis días de luchador habían terminado, mi mayor talento era preparar comida que alegrara a la gente, no estaba seguro de que otra cosa podría hacer, así que usaría mi propio talento para que recuerde que podía contar con nosotros. —¿Qué pasa, Uri? —me preguntó Rose cuando entré a nuestro cuarto, ya estaba en la cama más dormida que despierta, así que preferí no molestarla. —Nada, sólo se me hizo un poco tarde—dije quitándome la ropa y buscar una bata para dormir —. Descansa, mañana haré hamburguesas para desayunar. —Yupiiiii….—susurró antes de quedarse dormida totalmente. Sonreí divertido al escucharla, Rose tenía múltiples talentos, incluyendo quedarse dormida en menos de un minuto, hasta podría quedarse dormida de pie sin problema. Le acaricié el cabello con cariño y le di un beso en la frente antes de acomodarme a su lado cerrando los ojos. ____ (Pv Atem) —...Mierda. Apenas abrí los ojos sentí que mi cuerpo estaba hirviendo, una señal de que había comenzado mi celo desde muy temprano. Me quité la ropa y me di un baño, pero eso no calmó nada, ni mi calor ni mi enorme erección. —Maldita sea—gemí antes de comenzar a masturbarme. Normalmente mi celo comenzaba en la noche y al día siguiente estaba normal, no entiendo por qué ya estaba ardiendo y deseando tener sexo con alguien, quería penetrar el culo de alguien y llenarlo…¿Por qué de pronto quiero eso? Algunas imágenes llenaron mi cabeza, imaginando a alguien debajo de mí gimiendo y gritando de placer. —Mierda, han pasado muchos años desde que quise algo así—gemí tocando mi pene y moviendo mis caderas. Ya había tenido parejas antes, tanto hombres como mujeres, pero no ninguna había durado mucho por diferentes motivos, obviamente tuve sexo con todas por lo que no estaba tan necesitado…ya habían pasado dos años desde mi última relación pero eso no era tanto para un híbrido así que ¿Por qué de pronto estoy tan caliente? ¿Qué cambió de pronto? ____ (Pv Daniel) —Papá, ya maeció. Abrí los ojos confundido y me di cuenta que Sora se estaba levantando de la cuna y me miraba, lo que me hizo levantarme asustado para agarrarlo. —Sora ten cuidado—le dije preocupado—. Pudiste caerte, aunque…—miré la cuna meditando—, parece que ya te está quedando pequeña—reí pensando que debería ahorrar para comprarle una cama o una cuna más grande—. Me gustaría buscar alguna forma de registrar tu altura. De pronto se escuchó un fuerte escándalo afuera, como trompetas y tambores. —¡Daniel! ¡Cierra la ventana! Ur entró corriendo y se acercó a nosotros cerrando la ventana casi por completo. —¿Qué fue eso? —pregunté más confundido. —Es el anuncio de las Conquistadoras—dijo sentándose a mi lado—. Las sacerdotisas no pueden casarse pero sí la chica que hace de Gran Santa, el problema es que ella no sale del templo y de pronto algunas de las chicas que la siguen empezaron a llevarse hombres para formarle un Harem. ….¿Perdón? —Si vinieron justo hoy, supongo que debe estar en celo por la luna llena—se quejó —. Lo mejor será que te quedes en casa. —...¿Este mundo no puede ser más extraño? —gruñí enojado —. Además, quería ver si podía recolectar materiales…agh dejé las misiones en el bar…¿Y cuanto dura esto? —Hasta el atardecer —dijo Ur mientras Sora caminaba hacia la puerta —. Lo siento, Dan, si salieras de la ciudad estarías a salvo, pero no veo forma de que salgas sin que te atrapen, suelen ir principalmente por los hombres solteros y aunque eres un héroe, no sé si podrías escapar de ellas. Esta gente está enferma. No estaba para andar con misiones de sigilo, así que lo mejor era quedarme en casa con Sora…pero…realmente estaba preocupado por Atem. ¿Habrá comido? ¿Esas chicas con las que estaban lo dejarían descansar de vez en cuando? O tal vez estaba siendo atacado por mujeres pervertidas y estaba en peligro…… Espera ¡¿Por qué de pronto estaba diciendo eso?! —¡Yo sé cómo puedes salir de la ciudad! Rose entró muy contenta llevando…¿Un vestido? —Desde que vi tu presentación me emocionó mucho y quería que me dejaras usarte de modelo para vestidos —dijo mientras Sora la seguía divertido. —¿Mi presentación? —pregunté confundido —. ¿Se refieren a la canción que hice el otro día? —Sí, me pareció extremadamente lindo verte así —dijo Rose moviéndose de un lado a otro mientras Sora la imitaba—. ¿Me dejarías hacerte más vestidos? Hice este para ti por si necesitabas otro, le faltan los adornos pero te servirá para escapar. Quería decirle que no era travesti, pero realmente en este momento eso no importaba si al menos podía salir. —Gracias Rose—sonreí divertido porque Sora le seguía la corriente a su tía. —Jeje, vamos a arreglarte entonces —sonrió ella muy contenta. Ur se llevó a Sora a comer mientras yo me bañaba y Rose prácticamente me llevó a su cuarto para vestirme, maquillarme y peinarme. —Rose, no creo que sea necesario ponerme ropa interior de chica—dije mirando el corsé y los calzones que me hizo llevar. —Mejor tomar precauciones —insistió —. Aunque creo que te quedaría mejor otra ropa interior, algo más atrevido —y mientras decía eso me ponía relleno en el brasier—. Te compraré otras más bonitas. Creo que me acabo de convertir en un maniquí viviente Cuando terminó de ponerme los zapatos me sorprendió que me gustara el resultado, tenía el cabello peinado con un lazo n***o, un vestido azul claro hasta las rodillas con la falda abierta en un lado, las mangas eran cortas y tenía adornos de mariposas en algunos lados de la falda, tenía sandalias marrones con poco tacón ya que Rose no solía usarlas. —¡Awwwww! ¡Te ves hermoso! —exclamó abrazándome—. Como eres tan delgado te puedes poner muchos modelos distintos, luego te haré uno de flores. Creo que acaba de declararme travesti. —Hoy no vamos a abrir así que cuidaremos a Sora—dijo sacando una canasta que desprendía un delicioso aroma—. Vete y dale esto a Atem, si se declaran dile que se digne a pagar los gastos de la escuela de Sora. —No me voy a declarar—dije avergonzado—. Sólo estoy preocupado…—los dos me miraron con una expresión de “Ajá como no”—. Apenas tengo una semana de conocernos. —Primero viene el calentón y luego la declaración—dijo Ur con calma. —Así lo hice con Ur—dijo Rose orgullosa antes de abrazar a su esposo—. ¿Y cómo no hacerlo con esos músculos y esos brazos tan grandes? —Jaja y Rose sigue siendo tan hermosa como cuando la conocí—dijo Ur inflando su pecho con orgullo—. Recuerdo que era luna llena cuando nos conocimos, el olor a pólvora en su cabello me encantó porque era algo inusual en una mujer. Dioses, prácticamente puedo ver corazoncitos alrededor de ambos, no estoy seguro de que Sora esté a salvo aquí. —Papá, los tíos se queren—rió mi hijo divertido. —...Sora, si ves que tus tíos se ponen muy cariñosos ve a tu cuarto y cierra la puerta—le dije—. Si no llego en la noche duerme en mi cama. —Chi papá—sonrió—. Te ve boito. —....Me temo que no será la primera vez que me veas así—dije pensando que Rose seguramente me haría usar esta ropa más seguido. …No importa, cuando conocí a Sam, ella usaba ropa de chico así que el hecho de yo usara una falda no cambiaría nada. Tomé la canasta y me fui dejando a los tortolitos y a Sora diciendo que iba a limpiar las mesas, bueno parece que mi hijo estaría muy distraído, además era lindo ver como se iba independizando poco a poco, cada vez se parecía más a un niño normal, libre de ese sucio sótano. ____ Fue extremadamente raro salir de la ciudad porque habían decenas de chicas o llevándose a algunos chicos solteros que se negaban a ir con ellas o tocando puertas invitando a la gente a que ofrezcan a sus hijos o novios a la Gran Santa. Si tuviera que describirlo sería como un grupo de fanáticos religiosos tratando de llevarse a la gente a su secta. —No entiendo, este año ningún hombre se está ofreciendo—escuché decir a una chica—. Vamos a tener que traerlos de vuelta al final del día, que molestia. —Deberían sentirse agradecidos de que les demos la oportunidad de tocar a la Maestra—gruñó otra sacerdotisa. Claro, un gran honor. Por lo que me explicó Ur, siempre buscaban hombres de la ciudad pero sobretodo de la Zona Baja asegurando que le estaban haciendo un favor, pero los que entraban nunca salían del Templo y al parecer eso se detuvo el año pasado cuando un chico comprometido se negó a ser parte del harem y que se suicidaría si no lo llevaban de vuelta, nadie le creyó hasta que tomó un cuchillo y se perforó la mano, como nadie se lo esperaba las chicas gritaron aterradas cuando los demás tomaban cualquier cosa que pudieran usar para atacarse, incluso uno comenzó a golpear su cabeza contra una pared. Las sacerdotisas los regresaron y debido a las heridas la gente amenazó con atacar el Templo por los daños y aunque dijeran que los pobres no eran importantes, todos sabían que un pueblo enojado podría causar esa revolución que tanto les asustaba. —Me parece increíble que hayan regresado a buscar hombres—gruñó una anciana. —Como si a alguien le interesara ser parte de este circo—contestó otra. —Y al parecer la revolución no está tan lejos—pensé mientras salía de la ciudad. Mientras caminaba, no pude evitar pensar en lo que pasaba en este mundo, antes los héroes eran tratados con respeto, pero cuando empezaron a invocarlos cada diez años incluso en época de paz a la gente sólo le interesaba las cosas que traían, aunque los de las Zonas Alta y Media eran fanáticos religiosos, en la Zona Baja y los campesinos sólo querían progresar y no tenían tiempo para creer en una chica mágica. Incluso si comparaba los avances tecnológicos con el progreso de la Tierra, diría que este mundo estaba aproximadamente en la era del hierro cuando la iglesia estaba perdiendo crédito gracias a los descubrimientos de la gente, incluso yo diría que un poco más a nivel de tendencias estaban en el siglo XX, ya que las mujeres no parecían tener alguna limitación sobre la ropa, aunque no he visto ninguna chica con pantalones…espera…si he visto una. —Con algo de suerte nunca más me la cruzaré—dije en voz alta mientras llegaba al valle—. Mmmm no parece que haya slimes por aquí. —Hoy sólo salen los morados, mucha gente soltera viene a que los “vacíen” —Eso suena asqueroso—comenté….¿Eh? Me di la vuelta y vi a la chica albina… —¡AAAAAAAHHHH! Salí tan rápido como pude alejándome de ella. —¡Espera! ¡Quiero hablar contigo! —gritó corriendo detrás de mí—. ¡Disculpa si te asusté! —¡Está bien! ¡Pero aléjate! —grité asustado. Ella se detuvo bruscamente y levantó su mano, dijo algo que no entendí, pero de pronto sentí que estaba retrocediendo en cámara lenta. —¿Eh? ¿Qué está…? —no podía moverme y antes de darme cuenta estaba frente a la chica a un par de metros de distancia. —Lo siento, pero necesitaba hablar contigo sin que corrieras todo el tiempo —explicó —. Lamento mucho si te asusté, la gente dice que no sé comportarme, así que he asustado a muchos. No sabía qué decir ¿Esta chica es una especie de maga o algo así? ¿Entonces por qué llevó un jabalí al gremio? ¿Usó magia para hacerlo ligero? —Vives con Ur ¿cierto? —siguió hablando —. Quería disculparme contigo así que les dejé carne, tripas, sangre y un poco de piel de jabalí, también dejé una piedra hielo para conservarlo todo, así que no te preocupes. —...Pues ¿Gracias? —no sabía qué más decirle —. ¿Eh? Oye espera ¿Qué es una piedra hielo? —¿Mn? Son objetos mágicos que enfrían un espacio determinado—explicó extrañada—. Son útiles para conservar alimentos, no sirven para enfriar cuartos pero puedes crear cajas y congelar la comida. —¡¿De verdad?! —exclamé sorprendido y una nueva emoción sustituyó el miedo —. ¿Entonces podría usar esa piedra para conservar manzanas blancas para cuando llegue el verano? —¿Eh? —la chica me miró sorprendida antes de cruzarse de brazos—. Mmmmm supongo que podrías, aunque las piedras se desgastan mientras más tiempo queden expuestas a la luz…tal vez si guardas las manzanas y no las sacas… Mmm tendría que construir alguna especie de refrigerador y asegurarme de no abrirlo mucho, pero ya estábamos entrando al otoño así que podría construir alguna especie de caja improvisada mientras tanto. —Podría construirla pero en la pastelería ya nos llegaban cajas y bases ya construidas, sólo había que armarlas—medité —. Mmmmm podría contratar un carpintero, sería más fácil. —Si es una caja para guardar manzanas, puedo enseñarte —dijo la chica —. Te cobro 4 cobres, con todo y la piedra ya puesta, tengo un truco para que dure hasta dos años, yo vendo pociones así que necesito ingredientes frescos, o te lo puedo dejar a dos cobres si me haces un favor. —¿Mn? ¿Qué favor? La chica se agachó y me levantó la falda. —¿Puedo ver tu pene duro? …..¡AAAAAAAAAAHHHHHHHHHHH! ¡Atem ayuda! Salí corriendo lo más rápido que pude lo más lejos de esa loca. ¡¿Qué coño fue eso?!
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD