Capitulo 56

1030 Words

Con determinación, me acerco a Fátima. Su cuerpo aún tiembla, pero su mirada es una mezcla de fuego y miedo, y yo sé que no puedo abandonarla a esta sombra. Tomo su mano, entrelazo mis dedos con los suyos y aprieto con fuerza. Es mi manera de decirle que estoy aquí. Que no importa lo que se nos venga encima: la enfrentaremos juntas. —No estás sola. Estoy aquí. Vamos a salir de esto juntas —le susurro, como un conjuro propio, tratando de romper lo que sea que esté oprimiendo su mente. La figura en la esquina —ese ser cuya sola presencia tuerce la realidad— parece moverse, como si el aire a su alrededor se plegara en torno a él. Intento no mirarlo, como si ignorarlo pudiera debilitarlo, hacerlo desaparecer en la penumbra. Pero es inútil: su influencia se extiende como raíces negras sobre e

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD