aceptando el compromiso
1007 Words
los dos hombres se detuvieron al escuchar lo que dijo, se giraron y vieron a la anciana, está también estaba muy sorprendida.
— AMELIA QUE ESTAS DICIENDO.
ella no le prestó atención y dijo.
— seré su esposa, se nota que no tiene una ya que mantiene triste así que me casare y usted dejara el orfanato tranquilo.
— jajajajaja
empezó a reír Iván jamás pensó que una niña fuera quien le dijera a su amigo que necesitaba a una mujer.
— no
dijo molesto y se giró para irse, ella corrió y se enganchó en su pierna.
— no se vaya, piénselo primero
el respiro profundamente su irá iba en aumento
— SUELTAME AHORA
amelia se asusto por el grito pero no sé atrevió a soltarlo.
Rogelio iba a quitar a la niña pero pronto alguien apareció en su mente.
— matrimonio... de acuerdo
GOLPE.
Rogelio miro a Iván que había golpeado su cabeza, el estaba bajando las manos
— es una niña, perdiste la cabeza.
Rogelio masajeo su cabeza mientras decía.
— no para mí tonto, para Lucas
— oh, ya veo pensé que por poco y te dejo de funcionar el cerebro.
el miro a la niña atrevida y arriesgada y dijo.
— está bien suéltame.
— lo va a pensar
el Asintió, Amelia que noto su asentimiento lo soltó pero se puso rápidamente en la puerta.
— entonces se casará conmigo
el Negó.
— yo no, mi hijo.
ella lo miro sorprendida.
— usted tiene hijos.
— jajajajaj está niña me hizo el día Rogelio.
Ivan seco su lágrimas que habían salido de tanto reír.
el miro a Amelia
— así es, tiene exactamente 17 años
ella lo miro.
— pero el es más grande que yo.
Rogelio se cruzó de brazos.
— y yo tengo muchos más años que tú.
ella sonríe avergonzada.
— es que se ve joven.
el suspiro y dijo.
— está bien, te convertiras en la prometida de mi hijo, pero necesitas cambiar, la mujer que estará al lado de mi hijo debe ser fuerte y capaz, de pensamiento rápido y muy hermosa
ella se señaló.
— ya soy hermosa
el la miro era bastante gordita su cabello lacio llegaba hasta sus hombros y sus ojos cafés eran muy lindos.
— pero no lo suficiente debes ser tan hermosa que atraigas las miradas de todos, por qué mi hijo lleva mis genes y es muy guapo.
Ivan lo miro, ese tipo de hielo se podría ver muy guapo pero era idéntico a su padre.
ella asíntio.
— de acuerdo, me caso con el, pero necesito los papeles para que la tierra quede a mi nombre.
ella no era tonta sabía que para que algo fuera de uno tenía que tener pruebas o si no se lo quitarían.
— de acuerdo, vendré luego con un contrato lo puedo es que sabes escribir.
ella lo dejo pasar cuando ya se fueron de derrumbó en el suelo sin fuerzas.
Debora se acercó
— que hiciste, por qué.
Amelia la miro
— por qué este es mi hogar, no quiero perderlo maestra.
la anciana suspiro
— siempre te metes en problemas.
el Bentley recorrió las calles de la ciudad, Iván miro a Rogelio.
— enserio harás esto.
Rogelio Asintió estaba recostado en el asiento mientras veía por la ventana.
— no quiero que pase el resto de su vida como yo, ninguna mujer quiere estar a tu lado y si lo hacen es por interés, así que mejor conseguirle una y entrenarla.
Ivan suspiro, pronto ambos se separaron Iván se fue cond u familia e Rogelio a su casa.
cuando llegó miro la fría mansión, saco su teléfono y le marco a su hijo.
la llamada se conecto rápidamente
— padre
se escuchó una voz monótona.
— ahora tienes una prometida
el otro lado se quedó en silencio por uno segundos y luego hablo.
— entiendo, algo más.
— quieres que te envié alguna foto de ella
Rogelio espero la respuesta de su hijo.
— no, solos su nombre e identificación, será suficiente para encontrarla
— entiendo, te dejo con tus estudios.
el corto la llamada y camino hacia su habitación, pero alguien salió fisosrsdo de ella.
el se giró y salió persiguiendolo, pero la persona era muy ágil, pero el le ganó ambos empezaron a luchar hasta que el derribo a la persona y le quitó la capucha.
la mujer miro al hombre frente a ella y sonríe
— que guapo, solo tenía hambre y me perdí lo siento.
el se perdió en su mirada esos ojos verdes profundo lo atrajeron a primera vista.
— nombre
la mujer sonríe de hecho no era un ladrón, simplemente era una migrante ilegal, no le daban trabajo y tenía mucha hambre, se sorprendió de que este lugar no fuera vigilado así que estudió cada cuantondalia el dueño y luego entro quien diría que el hombre regresaría tan temprano.
— mi nombre, que harás si te lo doy
— irás a prisión
ella suspiro y dijo
— bueno verás.
ella se levantó y lo besó, lo que lo dejo paralizado, ella aprovecho esto y lo pateó y salió corriendo, el se sentó después de un rato se puso de pie y camino hacia su habitación, noto que todo estaba normal, excepto por la comida que había dejado ahí antes de salir.
el llamo a su equipo de seguridad, que respondió rápidamente.
— se llevó algo.
— no, la hemos estado viendo, solo comió.
el Asintió.
— y quién es ella
— una imigrante ilegal su nombre es leona Rodríguez de Colombia.
el Asintió.
— entiendo, tu búscala y tráemela.
— entendido jefe.
el no tenía guardias a su alrededor ya que le molestaba, pero su casa era un campo minado, había cámaras en todo el lugar y su gente monitores todo desde lejos pero si algo sucede llegarían rápido.
el se acostó en su habitación no podía sacar esos ojos verdes de su mente,
tocó sus labios y una pequeña sonrisa salió.
— divertido.
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