Luego de despedirme besando la mano de esa chica, la noté tan cálida y suave, eso hizo que se me vinieran a la mente las palabras de mi abuela, ella siempre solía decir que las personas con miradas y manos cálidas eran buenas personas y muy comprensivas, cuando me dijo aquello la escuché pero no le di importancia pero ahora recién pude experimentar esa sensación por mi cuenta; Me dejó asombrado y solo pude decir Que no se equivocó, pero también me dejaba pensativo por saber que le dirá a el señor camilo y la señora Clara, aunque me lo preguntará algo dente mi estaba en calma y a su vez me pedía la pedía.
En todo el trayecto no dije nada, por su parte Ricardo y Carlos sólo hablaban de la merienda que habían dado a los invitados, en cuanto a la atención gastronómica que nos dieron, no tuvimos problema alguno y menos aún porque antes de venir a la fiesta habíamos picado algo que nos llenará, arroz c***o con camarones, pollo frito, ensalada y shop suey, fue algo genial. Como es costumbre cuando Ricardo me observa de vez en cuando y es el primero en notarme mas callado de lo normal, siempre habla un poco para tantear terreno y luego sigue en lo suyo.
Miraba por la ventana como pasábamos las calles en plena noche hasta que Ricardo dio señales de que si no hablaba conmigo iba a estallar, por lo tanto el empieza la conversación preguntándome en donde me encuentro ahora, y lanzó las opciones de mi cama o con alguna mujer en una cita mental, el sarcasmo en sus palabras se hacia notar hasta que al no tener respuesta mencionó que dirigirme la palabra era como hablar con un cuerpo sin alma, simplemente asentí y le dije que estaba allí vivo y sano, que tan sólo mis pensamientos eran los que me distraían, él sintió la necesidad de comprobar mis palabras hablando de chicas o del próximo disco que lanzaría, si le respondía quizás me dejaría un rato solo para pensar y Carlos también dirigió la mirada hacia mi, los miré atentos y parecían dos fans esperando a que dijera sus nombres, una parte de mi quería reír a carcajadas, pero sólo le negué los temas a Ricardo y les dije que hablaran de las chicas de la fiesta pero entre ellos, mientras yo volvía a mi mundo.
Ricardo me miró fijo a modo de intentar dar risa y dijo haberme pillado, que por fin sabia el porque tan vueltero que me puse, y menciono a esa chica la cual despedí, se lo negué también diciendo que el ver por solo unos minutos a una mujer era típico de él y si intenta “pillarme” que se declare mi novia nomas ya.
Carlos se unió a la discusión a modo de broma mencionando el dicho “a otro perro con ese hueso”, afirmó que ambos me conocen bien, pero que ya me calmara, entendían que era tarde asique solo tomamos algo de camino a casa.
Carlos además de ser nuestro mánager tenía muy buen ojo en ciertas cosas, para nosotros y para otras que no notábamos, lo siguiente que hizo fue comunicarme su opinión, el se preguntó más en sí, si es justo todo eso para la chica, no la conocíamos ninguno de nosotros, pero me aseguró al observarla que sé sentía prisionera y triste.
En esta situación su percepción no fue errada tampoco, yo también había notado a Elena de esa forma y de solo recordar la voz rota con la que me contó aquello y la pena que me dió, las palabras del vidente se me hicieron claras “tu alma gemela está enlazada con otro hombre", reí un poco y me di cuenta de que tan ido estaba ya por el cansancio, al nivel de incluso llegar a pensar que esa alma gemela era la misma Elena, pero luego de lanzarme unas carcajadas solo se me escapó un “madre mía, no he dormido lo suficiente”
Al llegar a casa me senté en el sofá y quite mis zapatos, sentía que pesaban mucho y también quitaba un peso extra de mi vestimenta, Ricardo por su lado se estiró en el otro sofá y con su típica voz de molido me dio a entender que descansaría un rato allí y luego a la cama, yo dude de si tomar un baño y dormir o dormirme de golpe y mandar al baño a la ... pero al final fui a mi cuarto y deje sólo a Ricardo en la sala, decidí tomar el baño por mucho que estuviera molido porque odiaba cargar con tantos olores incluyendo el del cuerpo sudado, con el agua ya tibia entré y me duché, seque mi cuerpo de manera rápida y me puse una ropa más cómoda para dormir, de allí tome un poco de agua y directo a la cama a soñar con Elena… digo con mi disco.
La cama era algo genial, pero debía avisar a mi madre que había vuelto, pero el sueño me ganaba esta vez y nada, preferí llamarla al apenas despertar relajado y descansado. Desperté a las 7:09 am, a pesar de haber dormido a las 11:30 pm, tal cual me había prometido me lleve el móvil al balcón para ver ese cielo despejado y un sol para dar los buenos días, hable 2 horas con mi madre y le avise la hora de mi llegada al país y a la casa, entendió rápido el porque no la pude llamar y lo típico de madres saber si uno duerme y come bien, luego de responder todo su interrogatorio, me vi tentado en preguntarle algo pero lo descarte al instante.
Sentí que si le decía algo más, tal vez lo mal interpretaría o diría que le doy muchas vueltas al asunto y no debería meterme mucho en ello, asique solo opté por colgar la llamada e ir a hacer limpieza en lo que ejercitaba el cuerpo, luego de eso preparé el desayuno para Ricardo y para mi, al acabar de desayunar con calma prendí la portátil y verifique mis correos, curiosamente me había llegado un correo de la señora Clara dándome las gracias por haber asistido donde me comentaba que si había otra reunión o fiesta pero con anticipación también estaba invitado, también me deseaban éxito en el nuevo disco y futuras canciones.
Ricardo muy curioso me mira atento observando mi cara y sin ninguna discreción lee la carta e imita a una novia celosa usando las típicas palabras de si pienso en otra y porque me veo tan feliz.
No pude evitar reír a carcajadas al punto que Ricardo tubo que dejar de actuar y reír conmigo un rato mencionando ahí mismo que si podía imaginarme una mujer así, antes de pasar en plan serio y salirme con “¿Qué causo esa sonrisa?”, y yo siguiéndole la broma en plan de llamarlo hermano sobreprotector, pero yo al final tampoco sabía porque demonios me reí con solo leer esa carta.
Ricardo mas sereno y un poco más serio dijo saber el porqué, creí que denuevo me tomaría el pelo pero, el mencionó que me gustaba esa chica y también tal cual lo dijo Carlos el también notó yo que estaba confuso porque cría que Elena era la chica que menciono ese adivino.
Tomé un cojín y se lo pegue en la cara, para hacerlo recordar que teníamos una reunión a las 3:00 pm con el grupo, para ver que idea nuevas tenían y empezar a grabar la nueva canción. Una vez en el estudio pasamos unas 4 horas de ensayo sin parar y decidimos dejarlo por hoy e ir a pedir comida a domicilio, por mayoría compramos una pizza familiar y una de jamón y queso, luego de allí cada quien tomaría su parte y se iría a su casa, yo siempre llevaba una bandeja desechable libre por si nos tocaba hacer eso, una vez en el departamento cada quien trabajaría aparte en lo suyo, Ricardo se inspiraba con música de varios tipos y estilos y yo con vídeos juegos multijugador.