Quiero vivirlo

1377 Words
_ Claro que importa hijo. En caso de que llegues a algo serio con ella, ¿qué crees que va a pasar en unos años? Ahora eres joven es cierto que aún lo eres, pero ella es por mucho más joven que tú. Los años pasan, y no perdonan. Eso es en el mejor de los casos. ¿Pero que hay cuando te vayas a Italia? O pretendes abandonar todo y quedarte aquí para siempre.? Qué harás si ella es quien se cansa de ti.? ¿O tú de ella, como ha pasado hasta ahora siempre? vas a dejarla sin más? _ Por qué esperar que suceda algo así.? _ Hijo por favor piensa bien.? Regresemos a casa. ¿Quieres? _ Dijo mi madre suplicante. _ Lo siento, pero no lo haré. _Qué quieres decir con eso? ¿Pretendes quedarte por más tiempo acaso? _ dije mi padre alerta. _ Sabes que no lo voy a permitir. Esto es algo serio. Son negocios. No es un maldito juego en el que decides si participas o no. Tienes responsabilidades de las que tienes que hacerte cargo personalmente. Te he educado para ser el hombre que eres hoy. _ esta vez, mi padre estaba verdaderamente enfadado. _ no lo voy a tolerar porque tú hayas decidido meterte debajo de la falda de una niña que acabas de conocer, en un país tan lejos de donde está tu vida y todo lo que tienes. Puede que seas ya mayor, pero te ordeno que arregles tus cosas, porque nos regresamos a casa. _ Dijo decidido _ No lo haré papá. _ Yo también estaba decidido _ Hijo por favor razona. _ Suplicó mi madre. _ Eres un irresponsable…_ Gritó mi padre. Pero antes de que siguiera echando insultos, cosa que estaba sucediendo por primera vez entre nosotros, lo interrumpí. _ Padre. Nunca te he fallado. Nunca he hecho nada de lo que hayas tenido que avergonzarte. He cumplido con todo lo que me has pedido, en los negocios lo he hecho siempre bien. Es cierto que no me he establecido formalmente con una mujer, como lo has deseado siempre. Pero, ahora que… he encontrado a esa mujer, me reprochas por ello. No lo entiendo. _ Es mucho más joven que tú. _ Volvió a decir mi padre y yo ya comenzaba a odiar esas palabras. Mi madre se mantenía callada y con semblante preocupado. _ Hijo solo recuerda lo que sucedió aquella vez. Yo no soportaba verte como quedaste. Tengo miedo de que te suceda otra vez. _ Mamá por favor. ¿Por qué esperan que no funcione? ¿Por qué? Era demasiado joven en aquel tiempo. No soy un niño. _ Reclamo ya cansado de aquella absurda discusión. _ Claro que no eres ya un niño. Y es precisamente por eso que debes dejar de comportarte como uno, y asumir tus responsabilidades. _ Mi padre hablando. _ Tantas mujeres que te aman y que desean estar contigo en Italia, vienes tan lejos a buscar una y que además... _ Basta mamá. Ya basta por favor _ Ya no podía soportarlo más. _ Ya basta no quiero seguir escuchando nada más. _ me dirigí a la puerta para irme de ese lugar. Estaba desesperado por terminar porque quería regresar con mi chiquita, que no se encontraba bien. _ Cuánto tiempo más pretendes quedarte. _ pregunta mi padre. _ El suficiente para arreglar las cosas que ustedes vinieron a arruinar sin más. Si no hubiese sucedido así, me hubiese ido pronto. _ Pues yo te aconsejo que vayas y recojas tus cosas. Que aproveches la ocasión para regresar ahora. Porque si te decides por ella, ten por seguro que no lo aceptaré jamás. Y peor aún, te sacaré por completo no solo de los negocios; tampoco herederas ni un centavo. Ni de tu madre, ni mio. _ Me giré para míralo a los ojos y vi que mi madre se puso de pie muy asustada, al escuchar lo que dijo mi padre. Se acercó a él y le puso una mano en el pecho, _ Qué dices Fabian.? ¿Estás loco? No puedes decidir una cosa así. _ Mi padre, inmutable, me miraba fijo a los ojos, como esperando ver mi reacción. Yo también, lo miraba fijamente _ Supongo que tendré que vivir con eso papá. Puedes hacer lo que quieras. Yo haré lo mismo. _ Le dije con calma y desilusionado. _ No. No. Fabio hijo mio por favor. _ Mi madre corrió detrás de mí, para detenerme. Me tomó de la mano y me dijo: _ No puedes anteponer una relación con una mujer que acabas de conocer, ante todo. ¿No te parece eso demasiado hijo? _ Yo me limité mirarla y luego salí. Si pensaba que esto era todo, me estaba equivocando profundamente. Y es que, al llegar a la habitación, no encontré a mi chiquita. _ Hola Chiquita. Ya estoy aquí. _ Voy directo y a la habitación de dormir y la cama estaba vacía. Entonces la busqué en el baño. _ Chiquita. _ La llamé, pero no estaba por ninguna parte. Llevé las manos a la cabeza involuntariamente, al darme cuenta de lo ingenuo que fui, al creer que ella me esperaría. _ Oh no, no, no, no, no, nooooo. Maldita sea. _ Gritaba mientras golpeaba la pared desesperada. “Se fue. Se fue, se fue. Cómo pude ser tan idiota, debí quedarme con ella más tiempo. “ Pensé en salir a buscarla y al salir encontré a Massimo que venía con Giorgia. _ Massimo, Has visto a mi chi… a Emily.? Me dijo que la vio tomar un taxi. Que no pudo detenerla porque la vio precisamente cuando estaba entrando al taxi. Como todo lo que estaba sucediendo en estos días, tomé una decisión rápida, pero segura. Entré a mi habitación y él vino detrás de mí _ No pudimos encontrar una habitación para Giorgia. Está abarrotado el hotel. Ahora no sabemos qué hacer. _ No te preocupes, puede quedarse aquí. _ Le dije mientras sacaba mi maleta y echaba dentro todas mis pertenencias. _ ¿Qué haces? ¿Estás regresando? _ Me voy con mi chiquita. Ustedes pueden quedarse aquí, o regresar, que igual me vale. _ Estás loco o qué? Hemos venido por ti y ahora te vas.? _ Igual y no les mandé a buscar. _ le respondí sin mirarlo, mientras buscaba por la habitación si había olvidado cualquier cosa que fuera a necesitar. Tomé mi maleta con mis cosas y mi amigo me detuvo, interponiéndose en mi camino. _Escucha Fabio. Somos amigos de toda la vida y nunca hemos tenido secretos. No sé qué es lo que pasa aquí, y te comprendo si no quieres decirme, pero me preocupa que actúes sin pensar. _ Eso es precisamente no lo que quiero Massimo. Pensar. A veces pensamos demasiado las cosas y al final resulta que solo hemos perdido el tiempo exactamente en eso, pensando. _ Estás enamorado verdad? _ La pregunta del momento. Esa que no quiero ni responderme a mí mismo. _ Tal vez. No lo se. Pero sé que quiero vivir esto. Y tú que me conoces bien, sabes que nunca he tenido algo así, que me haga querer vivirlo sin que se termine. Si eso eso es amor, sí, entonces estoy enamorado_ De pronto sentí una especie de revelación que iluminó mi conciencia. Me sentí raro de confesarlo con mi boca. como si al contarle a Massimo, también acabara revelándomelo a mí mismo Massimo sonrió y me dio su aprobación. _ Ve a por ella entonces. Ya sabes que estoy aquí para apoyarte. _ Le di un abrazo y le agradecí. _ Luego te llamo. Déjame ver cómo arreglo esto y luego hacemos algo. _ Si ellos preguntan? _ Diles lo que hay. No me importa. Ah y Giorgia puede quedarse aquí. Puse mi maleta en la parte de atrás del auto y me marché. Llegué a la casa de mi chiquita y agradecí que no estaban allí mis nuevos amigos, sentados debajo de la sombra del árbol frondoso que estaba delante de la casa de mi chiquita. Tomé mi maleta y entré con ella, como la cosa más normal que siempre hacía. _ Madre. Ya llegué. Estoy aquí.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD