En las fauces de la Bestia

Por la acera desolada de una calle en un barrio bañado en desgracias, una chica camina subida en tacones de diez centímetros, fuertes y afilados como dagas, con una falda ajustada de treinta y un cigarrillo prendido de siete entre sus labios teñidos con el color de la sangre. La noche caía sobre ella como un velo y el viento frío le despeinaba el azabache cabello recortado hasta sus hombros desnudos. En sus ojos azules ardía la ansiedad que consumía cualquier duda, con un beretta en la mano y un cargador lleno se disponía a volver esta gélida noche suya a como diera lugar. La mochila en su espalda guardaba su disfraz de niña buena con el aroma del perfume de su novio aún grabado, pero ella no necesitaba rosas, mucho menos chocolates en un desabrido San Valentin, sólo un vaso de vodka a tope y una coartada para el suceso que llevaría lugar a unas calles desde su pesada mano. Pero no se lo pondrían fácil. Bajo la misma noche, a unas cuantas cuadras en un callejón olvidado, corrían presurosos unos pasos rompiendo el viento. Su dueña exhalaba respiraciones agitadas con los ojos redondos como la misma luna y cristalinos de tal forma que la prisa los hacia desbordar por sus mejillas sonrojadas, uniendoslos a la fresca sangre que escurría por una de sus comisuras. Escuchaba el peligro más cerca, lo sentía en la piel, la desesperación le rompía el alma y añoraba entre las rústicas paredes de ladrillos rojos el divisar su casa, aquella que, con un poco de suerte, volvería a pisar. Ambas compartían algo más que el estar perfumadas con el mismo aire nocturno, con la probabilidad de encontrarse pero divididas por el destino al separar sus pasos luego de un semáforo, dejando en nada más que en un "pudo ser" aquellas balas del cargador que tenían como objetivo la frente de una chica apresurada por volver a casa en media persecución pero que estarían ahí esperando pacientemente el reencuentro, porque ella no olvidaba una traición y la cobraría por más que al hacerlo estuviera poniendo un precio a su propia cabeza. Porque ella no olvidaba, pero él... él nunca fallaba. Nota de Alex: ¡Hola! Esta es mi primer novela, fue escrita hace más de seis años y hoy vuelve a ver la luz del día tras una edición. Espero de todo corazón que acompañen a mis personajes en esta historia. Antes de comenzar la lectura aclaro que el siguiente libro continene: - Descripciones detalladas de violencia. - Escenas sexuales explicitas. - Temáticas no aptas para todo público(prostitución, uso de sustancias ilegales, abuso, etc.). Por favor, leer bajo consideración. Sin más que añadir, que disfruten la lectura. ¡Espero que nos sigamos leyendo e interactuando en los comentarios! Abrazos.