Big Heart

La puerta de la oficina se abrió dejando ver a un chico moreno, alto y grueso. -Siéntate por favor- Le dije. El chico hizo lo que le dije de mala gana.-Sé que no quieres estar acá, pero es preciso que hables con alguien de lo que sientes, tu conducta no es normal y yo estoy para ayudarte- -Nadie puede ayudarme.- Su rostro refleja mucho enojo, mientras mantiene sus puños apretados. -¿Y si yo sí puedo ayudarte? No pierdas nada con intentar, puedes confiar en mí -¿Confiar? -Preguntó muy alterado- No puedo confiar en nadie, todos terminan haciéndome daño ¿Y sabe qué? - En mi pecho y brazo izquierdo se instaló un fuerte dolor, pero se concentró en el chico.- Esto es una pérdida de tiempo- se moverá su silla y se dispuso a salir, así que mi reacción fue levantarme rápido, pero todo mi alrededor se nubló. Abrí los ojos con dificultad ya que la luz entorpece mi vista, me siento muy cansada. -Por fin despierta, Stefannia- giro en dirección a la persona que dejó y me encuentro con un doctor. Miro alrededor y efectivamente estoy en una habitación de hospital. Trato de sonreír pero venta más como una mueca, hasta la cara me duele la verdad.-Hola, doctor. Dígame que fue lo que pasó, aunque yo ya tengo una idea -Ajá dígame usted que cree que pasó- -Pienso que me desmaye porque anoche no dormí nada, tengo una hermanita pequeña 5 años y tuve una tarea para hoy, y no me dijo hasta ayer en la noche y pasamos toda la madrugada haciéndola, porque si yo la había hecho sola, había sido rápido, pero lo quiero enseñar a ser responsable pero bueno y por el desvelo dormí como 1 hora y ya íbamos tarde a su escuela ya mi trabajo, así que no desayuné nada y creo que soy muy débil como para eso -Si hace un rato conocí a tu hermanita- -¿Está aquí? Debería estar en la escuela -Creo que la trajo una de tus compañeras de trabajo- -No requieren fue un simple desmayo ¿Verdad? ¿O no? -Temo que no-Guardó silencio-Stefannia, no sé si recuerdas que sentías antes del desmayo- -Si sentía, dolor en el pecho y brazo izquierdo, y no sé si estará relacionado, pero en la mañana sentía nauseas, dolor de cabeza y estaba mareada, pero atribuí al hambre porque no había comido ¿tiene que ver?- -Tiene mucho que ver, esos eran síntomas de pre-infarto, y cuando te desmayaste lo que tuviste fue el infarto, debes darle gracias a Dios que de casualidad había una ambulancia cerca y te atendimos a tiempo, de lo contrario tu hermana se habría quedado sola- Sentí como si me hubieran tirado un balde de agua frio, no quiero ni imaginarme dejando a Camil sola. -No entiendo por qué, yo creí estar saludable- -¿Has tenido más desmayos últimamente?- -Hace dos semanas en el trabajo pero desperté un poquito después- -Tiene sentido, siento decirte que tienes una grave enfermedad llamada Cardiomegalia o corazón grande, es una condición grave y difícil de tratar en donde el corazón aumenta su tamaño. Tener el corazón grande te expone a un mayor riesgo de sufrir eventos cardiovasculares, desarrollar insuficiencia cardíaca, enfermedad cerebrovascular, infarto, angina, arritmias o la muerte súbita, por lo que el seguimiento médico es vital para esto para tratar de encontrar la causa que provocó esta condición, control de la presión arterial.- Otro balde agua fría cayó sobre mí, no puedo creer lo que estoy escuchando.- ¿Qué posibilidades tengo de vivir?- Pregunté sin pensarlo dos veces. -Por desgracia, su Cardiomegalia está en una fase en donde ya no se puede hacer nada más que esperar a que tu corazón no resista más- Mis ojos se llenaron de lágrimas amenazando con salir.- Entiendo que nadie quiere escuchar una noticia como esta nunca, pero si te ayuda de algo, quiero decirte que tengo 2 años atendiendo a un señor de 53 años a quien le detectaron esta misma enfermedad a sus 17 años, en la misma fase en la que estás, y sigue vivo, es cierto en cualquier momento puedes morir, pero a cómo puede suceder hoy, dentro de un mes, un año, puede que mueras un día dentro de muchísimos años, todo depende de que tan fuerte sea tu corazón, pero eso solo lo sabe Dios- -Soy una bomba de tiempo ¿Cierto?- -Se podría decir que si- Listo, no pude seguir haciéndome la fuerte y me quebré en lágrimas. -Sé que no quieres morir, pero en serio, Stefannia. Puedes tener una vida plena, te pondremos en tratamiento para controlar que no vas a sufrir de otro infarto, te cuidaremos bien- -Lo sé, es solo que no me gustaría dejar a Camil sola, no tengo a ningún familiar que pueda hacerse cargo de ella- -Tú vas a estar para ella, solo asegúrate de luchar y pedirle a Dios que te alargue el tiempo de vida, para que puedas estar con ella, por lo menos hasta que se pueda cuidar sola- Asentí con tristeza, no sé ni cómo sentirme ahora. -¿Ellas pueden pasar?- -Claro, les diré- Me sequé las lágrimas con la bata. Unos minutos después aparecieron las chicas. -Hola, mami Nia- -Hola preciosa mía ¿Cómo te fue con la tarea?- -A la maestra le encantó y me felicitó- -Ven conmigo- Camil, subió a la cama y se recostó junto a mí- Ella te felicito porque eres muy, pero muy inteligente-Camil me sonrió. Observé a mi mejor amiga y vi como una lágrima bajaba por su mejilla. -Todo está bien, Kylie- Conozco a Kylie desde el primer año de universidad ya que alquilamos casa juntas junto con Gemma, mi otra mejor amiga, solo que ella se marchó a otro estado con su esposo después de terminar la universidad, ahora solo nos visitamos de vez en cuando, aunque siempre mantenemos comunicación. -Lo sé, es solo que- Su voz se quebró- Iré a tomar aire- Me dijo. No sé por qué esto me está sucediendo y odio provocarles dolor a mis amigos. Si mamá y papá estuvieran acá todo sería mejor, no tendría que pensar en que mi bebé se quedaría huérfana. Ella no merece perder a toda su familia, es tan inocente que ni se da cuenta de lo que pasa.-Te amo ¿Lo sabes?- Camil me dio un beso en la mejilla- Lo sé, mami- Un rato más tarde Kylie llegó junto al Doctor.-Creo que es momento de despedirnos, Camil di le adiós a Nia- -Chao mami-Le di un sonoro beso en la mejilla. -Chao mi amor, no olvides cepillarte los dientes y no dormir muy tarde- Camil asintió. Sé que Kylie y Matt la cuidaran muy bien mientras yo esté acá. Pronto se marcharon. -¿Mami?- Preguntó el doctor. -Soy todo lo que tiene, nuestros padres murieron en un viaje de negocios de papá cuando ella tenía tan solo 7 meses, y yo tenía 21- -Siento oír eso, y admiro mucho el hecho de que te hayas hecho cargo de ella, y a como veo, te quiere muchísimo- -Y yo a ella- -Bueno, te voy a dejar descansar, te debes sentir muy cansada- -Un poco- -¿Quieres algo para dormir?- -Por favor- El asintió. Se marchó y unos dos minutos después una enfermera llegó y me dio unas pastillas. ... Abrí los ojos y observé al doctor quien se encuentra al pie de la cama, apuntando cosas en su cuaderno. -Hola- Le dije. -Hola, se supone que deberías estar durmiendo, Stefannia.- -Puedes decirme Nia y creo que ya no tengo sueño- -Bueno Nia, ¿y que planeas hacer hasta que regrese el sueño?- -No lo sé, pensaba que tal vez podrías quedarte conmigo, puede sonar tonto, pero siempre me han puesto nerviosa los hospitales, como también nunca había estado internada- -Bueno Nia, me quedaré contigo hasta que logres dormir, pero primero debo de ir a dar una breve ronda para asegurarme que los otros pacientes estén bien, no tardo nada- Asentí y él se marchó. Minutos más tarde el regreso, jaló una silla y se sentó a mi lado.- Listo estoy aquí, dime de que quieres hablar.- -De lo que tú quieras, por mí no hay problema.-Le dije. -Okey, me llamo Kilian Daniel, hijo de un estadounidense y de una costarricense, nací en Costa Rica, no sé si has escuchado de ese país- Asentí- Bueno, tengo 27 años y no hace mucho ejerzo como Cardiólogo- -Cuéntame de ti- -Me llamo Stefannia, mis padres eran de acá y yo igual, soy psicóloga de preparatoria y tengo 26, y soy madre joven, aunque todo esto ya lo sabías, supongo- -Así es, mejor cuéntame que te gusta hacer, tus hobbies, no sé lo que quiera, y luego sigo yo- -Okey, me gustan los deportes, amo la música no hay un minuto de mi día que yo no esté escuchando música, me gusta salir a bailar, disfrutar con amigos, amaba pasar tiempo con mi familia, aunque ya quede muy poca, los videojuegos me encantan, como también leer y escribir, me encanta ver series y películas, no lo sé, creo que hay muy pocas cosas que no me gustan, ¿y a ti- -Estoy sorprendido, es como si me hubieras descrito al pie de la letra-Reí.- Solo falta que me digas que tu canción favorita es I'm yours.- -¿De Jason Mraz?- -¿Es una broma cierto?- negué con la cabeza. -Me encuentro igual de sorprendida- Sentí unas inmensas ganas de vomitar y nuevamente todo se puso n***o.